Inside of the Beast- Harry Styles

"Edward"

Él me estrecho la mano y juro que sentí algo, era como si antes ya lo hubiera hecho. Sus manos eran grandes, aunque estaban cubiertas por unos guantes, él se me hacia familiar.

-Buen golpe- le dije.

-Gracias- encogió los hombros, su voz parecía algo... Fingida. De pronto, el señalo mi blusa y yo la mire.

-Mierda- susurré-. Ahora me pregunto si tienes otro pañuelo- el rió y negó con la cabeza-. Iré al baño.

#Narra Harry

Era raro.

Cuando ella se sentó frente a mi, realmente sentí mucho pánico. Pensé en salir corriendo como idiota, pero tenía que idear algo para hacerlo disimuladamente. Luego, ella se ensucio la cara y lo del "poco bastante" salió de mi boca involuntariamente. De todos modos, le ofrecí un pañuelo. Después, un tipo me tiró café encima y si no estuviera pendiente de ocultar mi rostro, créanme que en menos de 5 segundos hubiera estado en el suelo suplicando para que lo deje respirar. Pero no, no lo valía. Pero cuando (tn)______ se levantó y habló por mi, y todavía él me dijo marica... Explote.

Cuando vi a (tn)_____ sorprendida por aquello, tuve unos segundos para idear algo. Toda esa ira que sentía por ella y todo el dolor que había sufrido físicamente debido a recuperación por su culpa, desapareció. Ademas que no la recordaba tan graciosa. En fin, decidí llevar a cabo una investigación. Una investigación acerca de todo, toda su vida contada por sus propias palabras.

Pero ella no sabría que yo era Harry, así que opte por mi segundo nombre al presentarme.

Cuando ella volvió del baño, me asegure de tener la bufanda cubriendo mas de la mitad de todo mi rostro y se sentó nuevamente frente a mi.

-Hola- ella sonrió y nuevamente hizo eso con los ojos intentando ver mi cara, pero no lo logro.

-¿Por que llorabas al entrar?- le pregunté tratando de poner mi voz mas aguda, algo que me hizo sonar ridículo.

-No estaba...- tosí un poco y ella rió-... Me sentía mal- dio un sorbo a su té-. ¿Eres de por aquí?

-No, vengo de Connecticut.

Harry, eres un imbécil, no pudiste elegir un lugar mas cerca a Nueva York.

-Es hermoso, fui allá cuando era pequeña- ella sonrió-. ¿Cuantos años tienes? Ya sabes, con todo ese disfraz que llevas... No te veo.

-22.

-Que coincidencia... Yo 21.

-Genial.

-¿Por que te cubres el rostro?

-No me gusta mi apariencia, asustaría a todos aquí.

-Vamos, no creo que te veas tan mal...- ella volteó un poco su cabeza.

-Me veo mal.

-¿Que te paso?

-Tuve un accidente, un auto... Ya sabes.

-Auch- ella arrugo la nariz-. Yo hace un tiempo tuve una experiencia igual, aun sigo soñando con eso a veces y duele pensar en todo lo que perdí ese día.

-Claro, el problema es que mis heridas se ven y las tuyas no- dije y ella me miro raro, como desconcertada-. Lo lamento.

-Descuida- susurró.

-¿Como fue tu accidente?- pregunte-. Claro, si no te molesta... A veces es bueno desahogarse y yo... Soy una tumba, soy algo antisocial y no diría nada de eso- rió nuevamente.

Diablos, todo le causaba una que otra risa.

-Es difícil decirlo sin llorar- hizo una mueca-. Ademas, no te conozco y...