Una chica en Delta

Una nueva amiga

-Si funcionaras seria mejor-dije irritada, tratando por decima vez que caiga la bebida.

-Estas cosas son de terror- dijo una chica posándose a mi lado. Le pego una patada a la maquina, para que luego cayera la dichosa bebida.

-Gracias- dije agarrándola para tomar un buen trago.

-No fue nada-respondió- por cierto soy Olive

-Ema- conteste. La mire bien, y me di cuenta que tenia puesta ropa deportiva y traía consigo un palo de hockey- ¿juegas al hockey?.

-Si- ella hizo lo mismo conmigo- por lo que veo tu también

-Si, ¿practicamos?- pregunte

-Claro.

Nos dirigimos a la cancha y comenzamos a practicar. Olive jugaba muy bien. Luego de una hora, decidimos ir tomar algo. Hablamos de todo, me di cuenta que era una chica muy agradable. Le gustaban las fiestas como a mi, vivía en Alfa, al principio me sorprendí, pero después me explico que su madre la había obligado, ya que ella había ido a la misma universidad y habitado en esa residencia. Me comento que era la única normal ahí adentro con una chica, me imagino, vivir con una fresitas todo el día. De mi parte, le conté que vivía en Delta, se sorprendió, pero terminé explicándole todo. La invité a la fiesta del sábado, quedamos en que iría más temprano para arreglarnos juntas. También la invite a comer a la residencia, se que dirán que voy muy rápido, pero esa chica me había caído extremadamente bien.

Pagamos y salimos del local, para empezar a caminar hacia Delta.

Al llegar frente a la residencia, saco la llave de mi bolsillo y con esta abrí la puerta.

-Llegue- grite al pasar por la puerta. Deje mis cosas arriba de la mesita y camine hacia la cocina.

-¿Quieres tomar algo?- pregunte.

-Agua, si puede ser.

-Claro- dije sacando la jarra de agua de la heladera, para luego servirlo en un vaso.

-Ema, viste mi billetera - dijo Daniel entrando a la cocina- hola- miro a Olive.

-Hola-repitió esta.

-Bueno, él es- empecé, pero fui interrumpida.

-Daniel. ¿Quien es esta belleza?-dijo coqueto a lo que yo rodé los ojos.

-Olive, y tu coqueteo barato no va a funcionar.

-Olive, nombre de una reina. ¿Apellido?- preguntó.

-No eres mi tipo.

-Medio raro, pero esta bien- dijo y juro que tenia ganas de darle un buen golpe. Oli golpeó su frente con su mano.

-Bueno, qué quieren comer- cambie de tema.

-Pizza- gritaron todos.

-Esta bien- dije, para luego dirigirme al teléfono y marcar el número de la pizzeria.

Media hora después, había llegado la pizza. Estabamos sentados en el living.

-Juguemos verdad o reto- dije, mirando a los demás.

-Si, empiezo- dijo Justin- verdad.

-¿A cuentas chicas te has tirado?- preguntó Oli.

-¿Tengo que decir número? A ver, Sally, Brenda, Kylie, Lila, Mia, Paula, Stefany, Johanna, Catherine- empezó a nombrar.

-Bueno, ya entendimos- interrumpo- mi turno. Reto.

-Te reto a quedarte en brasier- dijo Justin. Yo solo lo mire, me enojo de hombros y me saco la remera. Al ver a los demás, noto que están mirando fijamente a mis amigas.