OJO POR OJO

13-CITA

La velocidad con la cual iba la camioneta era asombroso, jamás había estado dentro de un vehículo que fuera demasiado rápido y la música era genial.

Honestamente, no entendía mucho de lo que decían las canciones, pero aun así, el ritmo le daba otro ambiente al trayecto.

—suena muy bien — comenté en voz alta mientras él seguía conduciendo a lo que él antes de responder sonrío mostrando sus dientes y dejando escapar una pequeña risa.

—claro, es Kanye —respondió en voz alta por el volumen alto de la música, entonces vi el tablero y justo en la pantalla dice el nombre de la canción CARNIVAL.

Volví a girar mi cabeza hacia la ventana viendo como se incorporaba a la carretera que llevaba a la ciudad más cercana, había bajado un poco la velocidad, sin embargo, aún se sentía con fuerza el viento hasta que llegamos a un centro comercial.

Ver a tanta gente me daba nervios, anteriormente había salido al mundo con ayuda de Jordan, pero solo era para el trabajo, esto es diferente.

Le pedí a la seguridad que tomaran una distancia considerable para no llamar la atención y aunque traigo peluca, siento que todos me miran, como si me fueran a descubrir, como si todos pudieran ver a través de mí y ver la mentira en la que me he convertido.

—sonríe, te ves bien —susurro Santiago mientras caminábamos adentrándonos en el centro comercial.

—siento como si todos nos estuvieran viendo, deberíamos de regresar —respondí titubeando, tratando de mantener la calma.

—tranquila ahorita, nadie te está viendo, aunque después de que gastemos una cantidad obscena de dinero, por supuesto que se te van a quedar viendo —

—solo vamos por tu teléfono, ¿Cuánto dinero se puede gastar en un teléfono?

—depende la marca, además hay que aprovechar que tenemos el momento de poder caminar por las tiendas y escoger lo que queramos —menciono emocionado mientras nos adentrábamos en el sitio.

—¿lo que queramos? —reí por sus palabras. —yo no traigo dinero, solo vine a acompañarte.

—yo no te pedí tu dinero, solo dije que vamos a escoger lo que queramos —respondió a mis palabras mientras me jalaba a una tienda de ropa.

Él aprovechó la salida para comprar camisetas, shorts, cualquier cosa que se le cruzara que él considerara que se le viera genial, lo único que no deje es que entrara a los probadores, no dejaría que él escapara de alguna forma, era divertido, pero a la vez el tiempo avanzaba demasiado rápido, no sé cuanto tiempo paso desde que entramos, pero ya cargaba con más de cuatro bolsas llena de cosas.

—Santiago, no quiero arruinarte el momento, pero ya hay que ir a por tu teléfono, le prometí a Jordan que solo nos tardaríamos máximo dos horas —pedí tranquilamente.

Suspiro aún con una pequeña sonrisa y respondió.

—está bien, lo entiendo, pero una última tienda no nos demorará tanto —respondió adentrándome al lugar, esta tienda era diferente a las otras, solo tenía vestidos y no se veían nada normales, se veían salidos de alguna película.

—wow —fue lo único que articulo mi boca.

—escoge uno o los que quieras —aseguro con una sonrisa.

—no hagas eso, solo vine a acompañarte, es todo —respondí de inmediato.

—no seas así, te dije desde el inicio que esto lo tomaría como nuestra primera cita.