El fuego antes de los cristales rotos

19.- FAMILIA

A diferencia de lo que muchos podrían llegar a pensar al haber estado bajo el cuidado y tutela de Hannibal cuando aún era una niña yo siempre estuve a salvo, él nunca me puso en una situación de peligro, al menos no hasta que tuve quince, y aún así desde su perspectiva yo nunca estuve en peligro porque él tenía la situación bajo su control, me enseñó a vivir bajo su filosofía y a ver desde su punto de vista.

Cuando se le concedió mi tutela legal Hannibal se aseguró de reducir sus salidas a "cazar" al mínimo así cómo de hacer de su estilo de vida algo apto para el cuidado de una niña de diez años, él se hizo cargo de mi y vio que todas mis necesidades estuvieran cubiertas.
Me abrazó mientras lloraba por la pérdida de mi madre y el rechazo de mi padre, sostuvo mi mano mientras me perforaban las orejas, asistió a reuniones de padres de familia, condujo a media noche para recogerme de una pijamada cuando lo llamé porque las otras niñas fueron malas conmigo, lavó manchas de sangre de mi ropa despues de mi primer periodo y me dio una muy informativa charla sobre menstruación, me enseñó a colocar un tampon, fue a verme a cada uno de mis recitales de ballet y le dijo a sus conocidos lo orgulloso que estaba de mi, enmarcó una pequeña fotografía de nosotros para ponerla en su escritorio en su consultorio, me consoló cuando me rechazaron y dejo en claro que si me faltaban al respeto a mi le faltaban al respeto a él.
Hannibal se convirtió en la figura paterna que yo necesitaba cuando era una niña y cuando era una adolescente y un chico trato de tocarme sin mi concentración el doctor estuvo ahí para romperle el cuello, deshacerse de su cuerpo y hacerlo parecer un accidente.
Él vio en mi la oportunidad de tener a la hermana menor que se le arrancó de manera violenta cuando era joven y yo vi en él a la figura paterna que me había rechazado en un arranque de dolor ante la pérdida de su esposa.
Hannibal y yo nos convertimos en una familia, una familia poco convencional claro está, pero una familia al fin y al cabo.
Aun cuando el sexo se volvió presente en nuestra relación él jamás dejó de tratarme como su familia, se que visto desde fuera se ve como algo reprobable para la sociedad pero no podría importarme menos y a él tampoco porque mi vida con Hannibal se sentía más real que los diez años previos que viví con mis padres, era casi como si yo hubiese nacido para estar con él, no hubo un solo momento en mi vida previa a Will Graham en el que yo considerará la opción de hacer mi vida lejos de Hannibal y me gusta pensar que antes de Will no hubo un momento en el que Hannibal considerará hacer su vida sin mi.

NOTA DE LA AUTORA:
Tal vez sea porque ya estoy vieja, pero hay algo en mí que se aloca al pensar en Hannibal siendo papá, en mis fantasías tengo una familia tradicional PANista con él.
XOXO.