"Callejon oscuro" 1

Capítulo#11

"Si mi sonrisa mostrara el fondo de mi alma, mucha gente al verme sonreír, lloraría conmigo."
-Kurt D. Cobain.

Al despertar lentamente, una luz me golpeaba directamente en la cara. Mientras aclaraba la vista, me di cuenta de que me encontraba en una habitación que no era la mía. En ese momento, los recuerdos se agolparon en mi mente. ¿Qué hacía Elian allí? ¿Qué me había sucedido? ¿Aquella rata se había aprovechado de mí?

Me voy adaptando a la luz y, al enfocar la vista, descubro a Jones y Trevor dormidos en un sofá. De repente la puerta se habré y entra lo que parece un Doctor

-Parece que has despertado-sonríe.-¿Cómo te sientes?"

-Bien, supongo- respondo.

Jones y Trevor se despiertan y me miran con sorpresa, ¿acaso también con un dejo de pena?

-¿Cómo te encuentras, niña?- pregunta Jones con preocupación.

-Me siento un poco mejor- respondo.

Él me mira como si quisiera decirme algo más, pero al final decide simplemente decir:

-Tengo que contarte algo importante.

-Está bien- afirmo, instándolo a hablar

Después de que el médico sale tras administrarme una inyección, Jones y Trevor se quedan para hablar conmigo.

-¿Y Elian?- pregunté, queriendo saber si es el Halcón Negro o no.

-Elian está afuera esperando a que hablemos primero contigo, no sabía que ya se conocían- comenta Jones con una sonrisa.

-Sí, bueno- respondo con una sonrisa-Fue hace un año.

-¿Tanto?- pregunta Trevor sorprendido.

-Lo que pasa es que solo nos vimos una vez, luego pasó un año y nos volvimos a encontrar en un autobús- explico.

-¿En serio?- pregunta Jones. -Me suena extraño, parece que Enrique estaba espiando.

-¿Qué?

Pregunte confundida, ya que no sé quién es Enrique.

-No es nada- se apresura a decir Trevor antes de que hable Jones, quien a su vez lo mira con desaprobación.

-Bueno pequeña nube voy a contarte algo importante-sonrió Jones acercándose más hasta tomar mi mano

-¿Nube?- pregunté curiosa

-"Las nubes son finas y delicadas pero también son grandes y fuertes por toda una tormenta de lluvia o granizo que contienen adentro, tu eres como ellas"

Sonreí y lo mire atentamente, parece que me va a decir algo muy importante

-Cómo viste, Elian es el Halcón -asentí con la cabeza -Y bueno yo y Trevor somos familia tuya

-¿Somos familia?

-Si, tu padre y yo somos hermanos

Me quedé de piedra, no por que fuera una mala noticia, creo que era lo mejor que me habían dicho desde antes que murieran mis abuelos, pero creo que fue más por lo que dijo a continuación

-Tu padre esta vivo

-¿Mi padre?- pregunté atónita

-Sí, él está en una misión. Lo hace para poder protegerte, ya que en este mundo, mi niña, tanto tu padre como yo tenemos muchos enemigos -suspiró pausadamente-. Ahora mismo está en Italia. Hablé con él hace unas horas. Después, si te sientes preparada, haremos una llamada.

No sabia como tomar esa noticia, pero no pude evitar sonreír, porque el se fue para protegerme y recuerdo muy pocas cosas de él, pero le echo muchísimo de menos.

-Vale, lo haré -afirmé-. Una pregunta: ¿Aquella noche...?

Trevor no me deja continuar y responde:

-Si lo sabemos, es digna de Hollywood y los Oscar. Dale las gracias a la Piscopata de Dina que se dio un puñetazo ella solita -exclamó, mirándome como para que yo también lo apoyara, cosa que no pude evitar y reí.

Después de algunas horas hablando y de algunas confesiones sobre mi salud que no me gustaron mucho, pero al menos no recuerdo nada y no se quedará en mi mente, es algo que agradezco. Jones, que ya sé que es mi tío, quiere que me quede con él y Trevor, así que no dudé en decirles que sí. Aquí iba a ser bien tratada.

Después entró Dina, disculpándose por lo de aquella noche. Tenía que ser creíble, y vaya que lo fue. Hablamos de muchas cosas y pude darme cuenta de que ella y yo seríamos grandes amigas. Pero una de sus preguntas me confundió un poco.

-¿Crees que con una sonrisa podemos ver el fondo de nuestra alma? -me miró atentamente, pero era como si pudiera ver todo dentro de mí.

-No sé -dudé.

-Pues cuando yo te miro, veo un callejón oscuro.

Guardé silencio y la miré detenidamente. Había acertado; había logrado vislumbrar en lo más profundo de mi ser.

-"Hay sangre, destrucción, y estás sola con cuatro personas a tu alrededor. No las ves, pero una te dice: 'No puedes'. La otra: 'Eres débil'. Otra más: '¿Por qué estás viva?'. Y la última, la última juega con tus acciones, convirtiéndolas en errores ante ti, y te muestra y te dice más de diez palabras, sabiendo que con solo una te destruye."

Después de terminar de hablar, me sonrió; ella sabía exactamente lo que decía. Luego se marchó, dejándome allí, reflexionando sobre cómo podría salir, como lo hacía cada noche.

Después de unos minutos llego Elian y no pude estar más feliz por eso. Sus palabras me llegaron hasta en lo más profundo llenándome de esperanza

"-Permaneceré a tu lado, Mar, hasta que mi propio infierno me devore por completo."

Algo que me gustaba de él eran sus ojos, tan oscuros como el infierno que escondía detrás de ellos. Su pelo negro tapando por momentos sus ojos negros, haciéndolo un poco inocente.

Entonces a mi mente vienen las palabras de Dina y lo reconozco. "Me sorprende lo destructivo que puede llegar hacer una Palabra de una persona a la que quieres. Pero cuando la palabra viene de ti mismo, Te mata."... Y ese es el problema de muchos, que se tienen de enemigos ellos mismos, con inseguridades, miedos, y es más peligroso que una maldita enfermedad. Por qué de la enfermedad te recuperas y sanas. Pero eso, te mantiene siempre en un estado de coma, en donde en cualquier momento ese callejón oscuro de tu mente te consume y se apodera de ti, matando tus esperanzas lentamente hasta que te mata a ti.

Después muchas personas preguntan:
¿Por qué lo hizo?, ¿No era feliz?...Y es que no, cuando no puedes soportar las voces de esas cuatro personas lo único que quieres es escapar, cuando tienes una enfermedad grave y se apodera de ti esa oscuridad lo único que quieres es escapar. Y la única solución que te brindan es rendirte a la vida, y muchos la toman sin quejas por que prefieren vivir en el infierno antes de vivir en el infierno de sus mentes.

"Es mejor ser rey de tu silencio que esclavo de tus palabras".

-William Shakespeare