♡Epílogo♡

18 2 0
                                    

《Tuve que soltar y agarrarme muy fuerte de mi misma…》

Las cosas suceden por alguna razón, siempre he pensado eso. Además, las apariencias suelen engañar. Debemos prestar mucha atención a los hechos, ya que a veces todo es una completa mentira.

Estaba enamorada de él, en lo más profundo de mi ser, nunca lo olvidaría. Pero, ¿alguna vez me mintió? Como mencioné antes, las cosas nunca son lo que parecen.

El tiempo había transcurrido velozmente, y no vislumbré nada de lo que estaba por suceder. Era el 9 de agosto de 2026, mi cumpleaños. Habían transcurrido 5 años.

—La policía de Rusia y Estados Unidos están uniendo sus fuerzas para capturar a estos criminales— anuncia la mujer en las noticias, y fijo mi mirada en el televisor encendido.

Me dirijo a la sala y me siento en el sillón cerca del televisor, aumentando el volumen.

—Hace más de 5 años, estos dos hermanos escaparon del Psiquiátrico Lena. No son criminales comunes— declara el presentador.

Entonces percibo una presencia a mis espaldas, y sé que es él.

—Qué bueno que lo saben— dice, y su comentario me hace estallar en risas.

Se supone que hoy sería el mejor día de mi vida, ya que es mi cumpleaños, pero no, los recuerdos me invaden, me invade esa sonrisa, ese "mi hermosa nieta", ese " "Sabes que aquí estaré siempre, no te preocupes, no dejaré que nadie te haga daño, tendrán que matarme primero querída Mar", oh...esos recuerdos, esos que me parten el alma, y recuerdo que ya no están, ellos ya no están.

—¿Porque lloras?- dijo Sacándome de mis pensamientos

—Solo- alzé mi mirada para verlo—Gracias Amon—dije en un susurro.

—¿Por qué?—dijo confuso.

—Por estar Amon, por estar—me levante de mi asiento y dando un suspiro se acercó a mi.

Acaricio mi mejilla y me miró con sus ojos verdes como el bosque.

—Hace más de 5 años, solías decir que me odiabas —dice, mostrando esa sonrisa siniestra como de costumbre.

Lo miro con desdén y me aparto rápidamente.

—Claro que sí, idiota. ¿Qué más podía esperar de ti, aparte de arrojarme desde esa altura? —le reclamo enojada, aunque sé que no puedo estar enojada con él por mucho tiempo; siempre logra hacerme reír.

Mi hermano siempre consigue sacarme una risa. Así son los hermanos, peleamos y luego nos amamos.

—Fue muy divertido —dice, y no puedo evitar esbozar una sonrisa.

Porque los dos estamos un poco locos.

Entonces, alguien interrumpe tocando la puerta con fuerza. Nos miramos confundidos y nos dirigimos a abrir a quien toca de esa manera tan enérgica.

Dina, parada en la entrada, nos observa con desaprobación antes de abrirse paso hasta sentarse en el sillón de la sala. Amon simplemente ríe ante su actitud.

—Tengo malas noticias— declara ella, mientras mira sus manos temblorosas, y es entonces cuando me doy cuenta de su inquietud.

—¿Qué sucede?— pregunta Amon, frunciendo el ceño.

—Mar, no ha muerto— dice ella levantándose del asiento y mirándome fijamente.

Entonces comprendo por qué está tan enojada; siento su furia.

—Nunca murió, y nunca ha venido a ver a sus hijos— declara con amargura.

En ese momento, me quedo inmóvil. Es como si un balde de agua fría cayera sobre mí.

Mi ángel está vivo.

Pero no me busca.

¿Dónde está mi ángel?

Las apariencias engañan, pero al menos conservo la esperanza de que exista una explicación válida, una razón justa.

"Quizás por haber sentido tanto, me quedé sin sentidos. Anestesiado. Agote lo que tenía almacenado. Digamos que me gaste".

—Alberto Fuguet.

—Alberto Fuguet

Йой! Нажаль, це зображення не відповідає нашим правилам. Щоб продовжити публікацію, будь ласка, видаліть його або завантажте інше.
"Callejon oscuro" 1Where stories live. Discover now