La flor y el cazador

🪷11.

JiMin no sabe cómo pero seguía aferrado a YoonGi. Había ignorado la pregunta de su hermano, ya se sentía avergonzado por llorar en los brazos de un humano como para decir lo que lo había pasado para dejarlo tan inestable. YoonGi había sido el único que lo escuchaba. Su hermano ya lidiaba con sus propias angustias y presiones, no quería preocuparlo más.

- Tu cabello es un precioso lila...- YoonGi le susurra luego de un tiempo en silencio, donde solo se escuchan su respiración congestionada. JiMin se sorprende, su esencia mágica quizás sabe más que él.

- Oh...- se ruboriza, sin embargo, no se aleja de YoonGi, se queda allí, entre los brazos del humano. Ha perdido la noción y sus ojos se cierran despacio, su respiración es más calmada.
YoonGi no procesa bien, cree que incluso es parte de la atmosfera mágica, se siente bien, es como tomar un descanso.

Al separarse, JiMin solo sonríe.

- Gracias... lo siento por esto, no suelo tener crisis de pánico o ansiedad...- menciona un poco avergonzado. YoonGi solo le devuelve la sonrisa, no hay nada por lo que sentirse avergonzado, él sabía que las emociones muy fuertes provocaban reacciones inesperadas.

- Me gustaría ayudarte, han hecho mucho por nosotros- YoonGi dice, por alguna razón ninguno se percata que sus manos estan unidas, o solo ignoran ese hecho. JiMin le sonríe y lo agradece, luego frunce el ceño, y recuerda la razón de la salida esa mañana.

- Bueno, me encontré con el lugar pero sigue siendo peligroso, no hay donde ocultarse, han bloqueado la entrada a la cueva que yo conocía y los elfos se vuelven molestos en esta época buscando algun hada o especie mágica con quien procrear...- JiMin menciona un poco abrumado.

- ¿No se supone que tienen parejas asignadas o algo así?- YoonGi pregunta y siente la presencia de su amigo y el hermano de JiMin.

- Se supone...- TaeHyung decide hablar.- Pero los elfos son un poco resentidos... al no encontrar pareja, pueden tratar de apropiarse de alguien más...

- Eso no lo esperaba...- TaeHyung mira a HoSeok, sigue sin creer lo que acaba de pasar. Mira a su hermano, su cabello se mantiene de un color rosa suave. Su naturaleza mágica a aceptado a YoonGi por completo.

- El viaje de noche sería la única opción viable...- TaeHyung comenta luego de escuchar a su hermano.- O de madrugada... si quieren salir de aquí, tendremos que ser rápidos y sigilosos para pasar desapercibidos...

- ¿Tendremos?- JiMin lo mira curioso con una sonrisa.

- Voy a acompañarte, no puedo dejarte solo...- TaeHyung le dice y toma sus manos.- Eres mi hermano, además no puedo estar más metido en esto de lo que ya estoy... y necesitas a alguien con magia que pueda cuidarte las espaldas...

YoonGi miró a HoSeok, ni siquiera habían emprendido la marcha y estaban teniendo sentimientos encontrados, no estaban seguros de irse, miraron a los hermanos quienes se sonreían mutuamente. Esa noche y las siguientes, los dos humanos se quedaron viendo por la ventana, la luna brillaba y ambos se quedaron pensando.

- ¿Qué pasa?- HoSeok miró a YoonGi, quien estaba pensativo, mucho más de lo usual.

- No lo sé...- HoSeok responde.- Todo esto parece un sueño... uno del que talvez no quiero escapar, estos días aquí han sido muy buenos, aun con el miedo de ser descubiertos...

- Hay algo que siento, es extraño...- YoonGi dice y luego mira hacia afuera, la naturaleza brilla aun de noche. No tuvo oportunidad de verlo tan de cerca, pero estaba fascinado con el lugar, hubiera deseado tener la libertad de explorar.- No puedo explicarme en absoluto... pero algo me dice que no sería correcto irnos, ¿soy el único?- HoSeok negó, antes no lo había sentido, pero los últimos dos días, si se había percatado de ello, había algo en la montaña que lo atraía como imán.

YoonGi sentía que había algo que lo detenía, emprender el camino de regreso le provocaba un dolor que le hacía sentir nauseas. Miró a los hermanos que seguían tintineando entre murmullos, parecían preparar pequeños bolsos. HoSeok solo suspiró, había algo que le preocupaba, nada le aseguraba de que los hermanos estuvieran bien luego de que ellos cruzaran la barrera. Estaban seguros que ambos hermanos los harían pasar antes de que otras criaturas mágicas pudieran ponerles las manos encima, no sabía nada respecto a las leyes de ese mundo, si eran tan crueles como en muchas regiones occidentales, o si los exiliarían, no sabían nada...

- ¿Piensas en tu cuarzo?- JiMin pregunta, había escuchado a su hermano, era lo mismo que pasó con el suyo. No tenían nadie a quien realmente preguntarle sobre lo que pasaba con ellos, no sabían como decírselos a sus padres, porque sus reacciones eran inimaginables.

- JiMin, he pasado muchas primaveras buscandolo, y ahora un humano puede hacerlo brillar... además tu no estas muy lejos de lo que me pasa a mi...- TaeHyung señaló. JiMin suspiró.

- No sé tampoco, YoonGi y yo... él parece entenderme mejor de lo que yo lo hago conmigo mismo...- JiMin dijo.- No sé realmente que esperar de todo esto... si ya encontramos a nuestra pareja y no nos enlazamos vamos a morir de tristeza...

TaeHyung solo suspiró.

- Quizás llamar a TaeMin sería bueno, si ambos pueden hacer que su cuarzo cambie de color entonces no son nuestras parejas, JiMin- comentó pensativo. JiMin asintió, enviaron a llamarlo y le pudieron con exactitud que llevara su cuarzo. TaeMin ya estaba emparejado, con un guardia de otra frontera.
Si el cuarzo brillaba probaría lo que TaeHyung había pensado desde el primer día.

TaeMin llegó asustando a ambos humanos, a pesar de ser tarde.

- Sigo sin entender porque me han pedido venir con mi cuarzo- dijo y miró a los hermanos.

- Es algo... no sé como decirlo, deja que ellos lo examinen...- TaeMin miró dudoso a TaeHyung y miró a JiMin quien asintió.

- ¿Saben de dónde provienen estas piedras?- TaeMin miró a los humanos con sospecha. TaeHyung va por el suyo, YoonGi es el primero en tocarlo, y a diferencia de lo que sucedió con JiMin, el cuarzo se mantiene de su color natural, el cual era un celeste intenso.

- Me resultan faniliares, ¿son las mismas que ustedes tienen?- YoonGi pregunta y mira a JiMin, TaeHyung vuelve y para mostrar su punto, le entrega la suya a HoSeok, TaeMin nunca había visto brillar el cuarzo de ninguno de los hermanos.

- Son similares...- JiMin se atreve a decir. Temía que el cuarzo de TaeMin brillara al igual que lo hizo el suyo- Pasan de generación en generación, cada familia por aquí tiene uno muy particular...

- Eso explicaría porque parecen tener muchos años...- YoonGi murmura.

- ¿Por eso también los colores?- HoSeok dice y saca una clase de lupa, con la cual detalla los cortes perfectos y el pulido del cuarzo de TaeHyung.

- Si... en parte...- TaeMin mira a JiMin- Dime que no estoy soñando, ¿es igual para ti?- JiMin asintió.

- Lo es...- JiMin dijo, miró a YoonGi, el humano era su pareja.- No sé que hacer...

TaeMin mordió su pulgar, y solo suspiró.

TaeHyung solo supo que su color de cabello había cambiado junto al brillo de su cuarzo.

Mientras YoonGi y HoSeok seguían observando ambos cuarzos con curiosidad...