La flor y el cazador

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JiMin miraba su cuarzo, su brillo debido a la luz solar le provocaba cierta paz a su alma. TaeHyung se encontraba de visita con sus padres para informar las noticias más recientes respecto a sus respuestas al cuarzo, él había desistido de ir a verlos porque no quería que se preocuparan por su emparejamiento, era un tema que le provocaba ansias a sus padres porque temían que se quedara solo. La vida de un hada era solitaria y la de una ninfa lo era aun más...

Ellos al ser una mezcla, sus padres pensaban que se quedarían solos para siempre. JiMin sabía que las intenciones de sus padres eran buenas, no era por presiones o por un visto bueno, solo querían evitar que se quedara solo, tarde o temprano sus padres no estarían y su hermano talvez aun tuviera oportunidad de encontrar a alguien sino se volverían parte de la naturaleza, pero ya estaba resignado a que no encontraría a nadie. YoonGi y HoSeok seguían durmiendo, de alguna forma la vida de los humanos era efímera, y quisiera a veces ser un humano, amar sin depender.

Vuelve su vista a su cuarzo, a veces se preguntaba porque debía decidir a quien amar, ese cristal brillaba con las esencias de las hadas, pero para él no era tan relevante, JiMin se había llevado algunas desilusiones, por su belleza tuvo pretendientes que lo rechazaron públicamente para quedar bien delante de la comunidad y con la criatura mágica que reaccionaba a su cuarzo. JiMin se sintió herido muchas veces y de no ser por los humanos que escondía en su hogar, estaría cerca del río para evitar olfatear toda esa feronoma mágica.

Estaba tan concentrado que de repente YoonGi estaba sentado a su lado.

- Es una pieza muy preciosa...- le comenta, JiMin le mira sorprendido pero sonríe y asiente.

- Lo es, se siente como parte de mi...- JiMin le menciona con un suspiro. YoonGi asiente.

- He visto muchas piedras preciosas a lo largo de mis viajes, ¿pueda examinarla?- pregunta con cierta vergüenza, además de los animales se inclinaba por conocer cada pieza geólogica nueva a sus ojos. JiMin se resiste un poco pero sr la entrega.- Seré cuidadoso...- YoonGi no necesita preguntar tanto porque mira las expresionas faciales de JiMin. Sabe que es importante y debe tratar la pieza con delicadeza.

- ¿Las conoces muy bien?- el ser mágico pregunta.

- Se puede decir que soy un aficionado, pero esta es nueva... su inexistente color es atrayente- menciona ido mientras examina el cuarzo, la pieza era como un cilindro alargado transparente, se podían definir puntitos brillantes por toda la extensión, eso era la único que brillaba. JiMin nunca había escuchado que hayan alagado su cuarzo, él y su hermano eran los único que portaban un cuarzo transaparente.- Para los humanos, esta transparencia es símbolo de la pureza...

Su comentario sorprende a JiMin, alguien había dicho algo agradable.

- ¿Es así?- su voz ilusionada hace que su cabellos usualmente rubio, tome un color rosaceo.

- Sí, el blanco y este transparente, crean la idea de un alma pura- YoonGi le dice- El corte es perfecto y su degradado a la luz...- YoonGi lo inclina un poco y se acerca a JiMin para que pueda verlo- ¿Notas esto?- señaló la franja de colores, JiMin nunca lo había notado.- Su transparencia actua como las gotas de agua ante la luz, por eso después de cada tormenta usualmente se observan los arcoiris, la luz se convierte en cada uno de los colores que podemos observar... justo como ahora...- JiMin no puede creerlo, nunca había encontrado la inclinación perfecta para observar un arcoiris dentro de su cuarzo. Necesitaba compartirlo con TaeHyung.- Es hermoso... ¿verdad?

JiMin asiente y toca su cuarzo no creyendo que fuera real.

- Nunca había observado tantos colores dentro- murmura y YoonGi sonríe con comprensión y ternura de ver las expresión tan asombrada de JiMin.

- JiMin...- le llama y deja el objeto en manos de su dueño- Quiero agradecerte todo lo que hiciste por nosotros, desde darnos un techo hasta alimentarnos, y protegernos incluso de las demás criaturas mágicas, sé que mi especie no ha sido amable con nadie de este lado, te aseguraré que seguirán ocultos y que nadie vendrá a molestarlos...- JiMim asintió con agardecimiento y observó a YoonGi.

- ¿Cómo es que están aquí?, sé que no son de esta zona...- conenta con curiosidad.

- Venimos de Corea, llegaron cartas a mi dirección de extrañas criaturas nocturnas que perturbaban a los aldeanos del pueblo más cercano, no tenía intenciones de venir pero algo me hizo hacer el viaje y aquí estamos, HoSeok ha sido mi compañero de aventuras en cada expedición, como dije antes, solo buscaría el bienestar de la criatura y reubicarla en una zona donde no pudiera ser cazada ni amenzada- YoonGi explica.- El día que caíamos por la ladera, el bosque se había vuelto muy denso que llegué a pensar que eso era lo que asustaba a los aldeanos, la niebla no dejaba ni ver nuestros propios pies, estabamos a ciegas de las rodillas hacia abajo, HoSeok nos unió con una cuerda, si alguno tropezaba el otro podía sostenerlo... y luego, despertamos aquí... ¿cómo pudiste traernos hasta aquí sin que nos vieran?

- Sencillo, todos estaban ocupados con los preparativos para una de las fuestas más grandes de este lado de la montaña, es donde los seres mágicos, como tu nos llamas, encontramos pareja...

- ¿Y tu pareja?- YoonGi pregunta angustiado- Cielos, ¿estas en problemas?- JiMin encontró adorable la preocupación de YoonGi.

- No tengo, simplemente aun no aparece...- menciona mirando su cuarzo. Nadie ha visto más que a través de él, ni un solo color o brillo propio.- Es algo complejo... es una de las reglas que menos me gusta, pero quizás ni siquiera tendré que seguirla...

- Oh, no sé como son las relaciones entre criaturas mágicas, admito que estoy curioso, pero creo que es mejor si no lo sé- YoonGi dice mirando a su alrededor.

JiMin no lo contradice y se quedan en silencio, HoSeok y TaeHyung los miraban desde diferentes ángulos, TaeHyung había visto el brillo en el cuarzo de su hermano, era el color lila-rosa que todas las hadas ansiaban tener, era tan escaso, que pocas afortunadas lo tenían. Simbolizaban la unión espiritual entre dos seres, no podía creerlo, frotó sus ojos un par de veces para asegurarse que era real lo que miraba. El rosa en un cuarzo era el símbolo del amor, y el lila la tranquilidad, un amor armonioso. JiMin ni siquiera había reparado en su presencia dentro de su hogar.

HoSeok en cambio, no creyó que YoonGi se interesaría en hablar con el hada, sea como sea hayan llegado a hablar, estaba sorprendido, demasiado... y pudo ver algo que lo dejó boquiabierto, el cabello de JiMin cambió de un brillante rubio, a un rosa cálido...