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— Verás Jenna — Dahlia sacó sus lentes de sol de su cara y los puso en la mesita que estaba frente a ella. Estábamos en el patio trasero, ella sentada en el mueble para cuatro personas y yo sentada en uno de los sillones — Déjame decirte porqué soy tan persistente para que entres a las Artes Marciales Mixtas — Hice un gesto con mí mano para que siga — Verás Jenna, eres boxeadora profesional, cómo debes saber las peleas de MMA (Artes Marciales Mixtas), lo que duran son cinco rounds y eso solo cuando es un campeonato, pero peleas casuales, o como quieras llamarlo, duran solamente dos rounds. Y si solo haces knock-out o una llave que te lleva a rendirte. Los knock-out son muy raros y cuando es empate que han llegado al segundo, se busca al ganador con puntos. ¿Por qué crees que el boxeo es más visto que las peleas de octágono? — Se acercó un poco al final del mueble y yo me encogí de hombros — Déjame decirte por qué — Se cruzó de piernas y puso su codo en su rodilla y su barbilla encima de su puño — En el boxeo son diez rounds de puros golpes, solo se gana si es knock-out o al final de los diez por los puntos, pero este último es raro. No se usan llaves ni patadas, solo puños. Y no te puedes rendir — Hizo una pausa de unos minutos y antes de que ella pudiera hablar, hablé yo.

— ¿Y qué exactamente quieres conmigo Dahlia? — Pregunté seria.

— Bueno Jenna. Tu eres una de las mejores mujeres en el boxeo femenino que a tan temprana edad todo el mundo que tenga mente pensante quiere que estés en su gimnasio entrenando. Yo quiero hacerte entrar a este mundo por el simple hecho que vas a ser un éxito andante. Aguantas más golpes que las chicas del octágono, aguantas más rounds y tus golpes son más fuertes. Si golpeas es para noquear, para hacer daño, para hacer sangrar a tu oponente, no para solo entretener al público como algunos hacen con sus golpes tan flojos y lentos. Serás una estrella Jenna, serás como quien dice la próxima Ronda, solo que más joven, sin estar retirada y no terminarás la mayoría de las veces con llaves, lo harás a la vieja escuela — Explica con una sonrisa final.

— Me acercó poniendo mis codos en cada una de mis rodillas y entrelazando mis dedos — En caso de que acepte, ¿Que tendre? — Dije entrecerrando un poco mis ojos y su sonrisa se hizo más grande.

— En caso e que aceptes, dulzura. Tendrás que mudarte a California. No te preocupes por el hospedaje, de eso nos encargamos nosotros, hasta si quieres te buscamos una casa como esta. Se te contratará a los mejores entrenadores en Jiu Jitsu brasileño, Muay Thai, Shoot Wrestling y algo de Karate. Y tendrás que ir a un Dojo por supuesto.
Y hasta si quieres puedes seguir entrenando en el gimnasio de Enrique, tengo entendido que la sede principal es aquí, pero tiene varios locales alrededor de Estados Unidos y uno que otro alrededor del mundo ¿Si? — Asentí — Si quieres que él sea tu mánager o mano derecha, cómo quieras, así me ahorras el trabajo de buscar uno. Tu contrato con nuestra empresa y otros patrocinadores será de un año por treinta y cinco millones de dólares. Sé que en boxeo ganas más pero allí eres una profesional, aquí serás una novata — Volví a asentir porque tenía razón — Tengo un contrato listo por si quieres leerlo, ¿Que dices? — Preguntó emocionada.

— Ok — Me levanté — Perfecto señorita Rogers, nos reuniremos para ver ese contrato y allí le diré si acepto o no — Le extendí la mano y ella la tomó.

— Si dices que si, no te arrepentirás de nada Jenna — Dijo con una gran sonrisa mientras apretaba su mano con la mía.

Y si que no me iba a arrepentir de nada.

° ° ° °

Emma POV

Estaba en la universidad, acababa de salir de un examen. Tuve que dar una explicación de porque necesitaba terminar este semestre antes que todos y como pude convencer de que nos fuéramos después del cumpleaños de Jenna. Me darán al final de la semana los exámenes de las materias que lleve.

K.O. [Jemma]Where stories live. Discover now