• XXXIV •

201 12 7
                                    

El olor a tocino entrando por la puerta y la suave música la cual pude identificar como I Took A Pill In Ibiza (SeeB Remix) me hizo abrir los ojos de a poco para adaptarme a la luz que entraba por la puerta y ventana. Lo primero que sentí es como todo mí cuerpo me dolía. Me senté en la cama mirando al vacío por unos minutos hasta que decidí levantarme de la cama para ir al baño.

Paré de golpe para verme en el espejo y abrí los ojos como dos faroles. Tenía chupetones por todas partes de mí cuerpo. En mí clavícula, cintura, abdomen, uno que otro en mis piernas, en mis costados y en mí cuello ni se diga. Voltee temerosa de lo que pueda ver y ya veo la razón por la cual siento tanto escozor en mí cuerpo. Emma me había arañado toda, no había un lugar limpio en mí espalda el cual no tuviera marcas de sus uñas en mí piel, incluso pude ver una que otra piel levantada por haber enterrado sus uñas tan fuerte.

— Santa mierda — Dije sorprendida al ver arañazos en mí trasero por igual. Creo que esa se ha vuelto mí frase favorita.

Cerré los ojos por unos minutos para después caminar a la ducha, soltando un leve gemido de dolor al sentir el agua caliente hacer contacto con mí espalda arañada.

Al salir de la ducha envolví mí cuerpo en una toalla caminando a mí armario agarrando una ropa interior y una camiseta algo holgada ya que por obvias razones no quería nada rozando mí espalda. Así que de esa forma caminé, con una camiseta holgada, con nada debajo más que mis bragas y mí cabello suelto mojado por haber acabado de salir de la ducha.

Caminé a la cocina que era de dónde venía la música y el olor, topándome con lo más hermoso que mis ojos han visto. Se escuchaba Nobody Business, Emma me daba la espalda moviendo sus caderas al ritmo de la música mientras murmuraba la letra y preparaba el desayuno.

Tenía uno de mis suéters que tenía escrito mí apellido y el nombre del gimnasio donde entrenaba con las mangas arremangadas hasta los codos, al igual que yo solo traía bragas, las cuales eran negras y en letras grandes y rosadas decía “PINK”, con su cabello amarrado en un moño al descuido y algunos mechones cayéndole a los lados, se veía preciosa. Me pude dar cuenta de algunos chupetones en sus largas, bronceadas y torneadas piernas, esto haciéndome sonreír.

Me aclaré ligeramente la garganta y ella dio la vuelta dándole una mordida a una fresa para después darme una sonrisa. Si, ella estaba igual, o creo que peor que yo.

— ¿Te diviertes? — Estaba apoyada en el marco de la puerta, ella dejó la fresa a un lado caminando hacia mí para poner sus finas manos a los lados de mí cuello y haciendo que bajará un poco el cuerpo chocó sus labios con los míos en un beso suave y tierno haciéndome suspirar.

— Buenos días — Dijo con una sonrisa mientras su labio inferior estaba atrapado entre sus dientes y me miraba con ojos inocentes.

— Buenos días — Estaba embobada, eso no me lo tenía que decir. Emma me hacía entrar en la lista de personas estúpidamente enamoradas — ¿Cómo dormiste? — Pregunté.

— Genial, ¿Y tú? — Acariciaba la parte trasera de mí nuca, específicamente mí tatuaje situado en esta parte.

— Muy bien, gracias. Aunque me has matado — Ella soltó una carcajada, ese sonido haciéndome reír como una completa idiota.

— Tu no te quedas atrás — se separó un poco de mí y subió el suéter hasta por encima de sus pechos los cuales debo recalcar estaban sin sostén y abrí mis ojos de golpe. A ella no le quedaba un solo espacio para un chupetón más. Bajo el suéter agarrándome por sorpresa al saltar encima de mí y abrazar mí cintura con sus piernas — Feliz cumpleaños cielo — Sonrió con la lengua entre sus dientes y la nariz arrugada agarrando mí cara con sus pequeñas manos. Si, definitivamente me podría acostumbrar a esto.

K.O. [Jemma]Место, где живут истории. Откройте их для себя