Capitulo 13.

99 13 7
                                    

Tras una semana de estar en Nueva York, ya era hora de abordar el siguiente vuelo a Kansas, lugar donde Bruce conocería los padres de Clark, ahora los papeles se invertirían

Hoppsan! Denna bild följer inte våra riktliner för innehåll. Försök att ta bort den eller ladda upp en annan bild för att fortsätta.


Tras una semana de estar en Nueva York, ya era hora de abordar el siguiente vuelo a Kansas, lugar donde Bruce conocería los padres de Clark, ahora los papeles se invertirían.

—No sé que voy a decirle a mis padres. Van a comenzar a cuestionarme sobre nuestra relación, en como fue que nos conocimos. –Clark limpiaba el sudor de sus manos sobre su ropa.

—Dígales que yo lo seguía a todas partes, que me enamore a primera vista. –Bruce, en cambio, no dejaba de revisar su teléfono.

—¿Qué?, no voy a decirles eso.

—Smallville.. –observó por la ventana del taxi– No me dijiste que tus padres vivían en las afueras, mucho menos que tenían una granja.

—Quizás si lo decía no hubiera querido venir.

—Tal vez deba tenerme más confianza. ¿Hace cuánto no volvías a casa?

—Volví, hace poco, pero está es la vez que más me he quedado a convivir.

—¿Por qué?

—Por mi padre. Discutíamos mucho últimamente, le decía que ya estaba cansado de esto que quería hacer algo útil con mi vida y él solo me respondía que si el cultivo y alimentar a las personas no era útil, ya que nuestra familia ha cultivado por cinco generaciones. –suspiró– Hay algunos padres que sienten la necesidad de que su descendencia siga la tradición.

—¿Es por eso que te mudaste a Metrópolis?

—Exacto, bueno, algo así, porque luego llegaron las deudas con el banco y tuve que hacerlo aunque no estuviera de acuerdo mi padre. Después conocí a Barry, creo que el destino nos unió.

—¿Cómo crees eso?

—Ambos pedimos informes por el mismo departamento, los dos lo queríamos, pero ninguno de los dos completábamos el alquiler, así que decidimos unir nuestro dinero y rentarlo ambos.

—Vaya, eso es hasta cierto punto algo gracioso.

—Lo es. Bueno, hemos llegado.

Ambos jóvenes salieron del taxi y sacaron sus maletas, Bruce le impidió a Clark que pagará el taxi, ya que el lo haría, así que se sumergieron en una pequeña discusión como maridos.

Martha notó el escándalo, así que salió de casa para recibir a Clark y su acompañante.

—¡Clark!

—Mamá. –sonrió, madre e hijo se fundieron en un abrazo, mientras Bruce observaba el lugar y batallaba con las maletas.

—¿Y quién es tu acompañante, hijo?

—¿Recuerdas que Barry dijo que la próxima vez que viniera a visitarte sería con una pareja?

Martha cubrió su boca asombrada.

Propuesta Laboral | superbatDär berättelser lever. Upptäck nu