¿Qué pasó con Elizabeth Parker?

Capítulo trece

—Trato hecho —susurra.

Lord dijo que confesar la verdad siempre funciona, tal vez debería intentarlo.

7 de octubre de 2023:

—Venus, llama a tu hermana a comer —me dice mi padre, sirviendo la mesa.

Subo las escaleras corriendo. Toco la puerta de la habitación de Elizabeth, está cerrada con llave.

Resopló con frustración, ya que mis padres le prohibieron a Elizabeth cerrar la puerta con llave y nunca hace caso.

—Eli... —la llamo—. Apúrate, Luck ya está por llegar.

Vuelvo a tocar la puerta hasta que ella aparece. Mi boca se abre de manera incontrolable al verla.

—¡¿Te gusta?!—me pregunta ante mi sorpresa.

Veo a Elizabeth con el pelo teñido de blanco y el rostro sin maquillaje. Lleva un vestido negro y a ella jamas le gusto el negro. Parece que me estoy viendo a mí misma en ella.

—¿Por qué hiciste eso?

—¿El qué? —sonríe y se toca el cabello con diversión—. Sabía que no te iba a gustar, siempre me tuviste envidia.

Pasa por mi lado, chocando su hombro con el mío.

—¡¿De qué estás hablando?! Estás idéntica a mí. Te pintaste hasta mi mismo color de cabello —la examinó —. Incluso, ese es mi vestido.

—Solo quería un cambio—su humor empieza a cambiar —. No sé qué tiene de malo.

—Te dije que no hicieras nada estúpido porque iba a venir Luck, sabes que me gusta y ¿te transformas en mí?

—¡No todo el mundo quiere ser tú, Venus! —me grita y baja las escaleras—. Deja de comportarte como una niña.

—¡Tú deja de comportarte como si mi vida fuera tuya! —le grito, furiosa.

En todo el día Elizabeth no me hablo, ni siquiera cuando Luck estuvo con nosotros. Trate de fingir que no me molestaba lo que había hecho pero me hacia sentir incomoda como Luck la miraba.

Elizabeth no me dijo ni una sola palabra durante una semana. Yo tampoco pensaba hablar con ella pero la extrañaba, hasta que un día la vi besándose con Luck en la escuela. Pero lo que más me sorprendió fue escucharla hablar como si fuera yo.

Me fui a mi casa llorando, deseando que mi hermana no fuera mi hermana. Jamás había sentido tanto odio. Voy hasta su habitación y tiró todas sus cosas. No me importo lo que se podría romper. Lo hice. Pero cuando tire sus libros en unos de ellos cayó un papel. La curiosidad me gano y lo leí.

Mi cuerpo empieza a temblar cuando leo lo siguiente:

Consulta número cinco: Elizabeth Parker, diagnosticada de trastorno bipolar.

Desde ese día las cosas cambiaron.

Por alguna razón me sentía culpable por odiarla. Entonces le otorgue mi vida a Elizabeth, deje que siga con Luck y que se hiciera pasar por mí cuando mis padres la castigaban. Desde entonces siempre se teñía el cabello como yo, y en ocasiones usaba mi ropa.

Elizabeth empezó a conocer a mucha gente nueva y las cosas comenzaron a empeorar. Ella cada vez iba más lejos y en ocasiones tenía que vivir su vida.

Lo peor era cuando íbamos a fiestas y la reconocían algunos de los chicos que gustaban de ella. Yo tenía que fingir ser ella, pase lo que pase y en ocasiones me tocó hacer cosas que no me gustaban.