Capítulo 19. El viaje con Ero-sennin.

683 111 1
                                    

Narra Asahiko:

Ya pasó una semana desde la muerte del Sandaime Hokage, por lo que no tardarían en buscar al nuevo Hokage.

Me levanté con un extraño buen humor, por lo que hice lo que cualquiera haría en mi posición.

Me puse alerta por si algo ocurría.

Ok, tal vez estoy siendo paranoico, pero para una persona que las cosas no van tan bien... Es normal, supongo.

En fin, cuando desperté Naruto me sorprendió con el desayuno (que resultó ser ramen instantáneo) mientras me narraba la historia de como casi quema el departamento tratando de hacer cereal con leche mientras yo dormía.

— Jeje no te vuelvas a acercar a mi cocina, ¿De acuerdo, Naru-chan? — Mi cabello se elevó como cada vez que me enojo, mientras mantenía una sonrisa falsa.

— De-de-de ac-acuerd-do... N-no te e-enojes mu-mucho... .— Se encogió en su sitio.

— Ah.— Suspiré relanjándome un poco.— Creo que ésto era mi presentimiento, de que algo iba a pasar, ya me quedo más tranquilo.

— Supongo... Ah, por poco lo olvido; hoy tenemos que ir con Ero-sennin a buscar a Tsunade baa-chan.

Escupí el caldo que estaba tomando, sabiendo con quién me iba a encontrar.

(...)

“¡Corre, corre y no mires atrás!” Me repetía mentalmente mientras mientras mis piernas se movían a máxima velocidad. Esquivaba edificios muy altos y tenía cuidado de no tropezar, de ser así sería mi fín.

¿Por qué me pasa esto? Yo solo quería ser un buen compañero.

Creo que no usé las palabras correctas y provoqué al mismísimo demonio.

— ¡¡YA DEJA DE CORRER!! — Exclamó Sakura corriendo detrás mío.— ¡¡ESTO TE GANAS POR LLAMARME GORDA!!

No era eso lo que quería decir, ella mal interpretó mis palabras.

— ¡Lo siento!— Lloriqueé mientras corría hasta Ichiraku ramen, donde Naruto y Jiraiya me esperaban.

— ¿Uh? ¡¿Qué ocurre?! ¡¿Te están siguiendo?!— Preguntó Naruto alarmado.

Asentí cuando llegué a donde él estaba, acto seguido me escondí detrás suyo.

— Protégeme señor con tu espíritu, protégeme señor con tu espíritu.— Cantaba bajito juntando mis manos en modo de rezo.

— Oh, por Kami.— Naruto me vió.— Ya no cantes.

Lo fulminé con la mirada. Según él yo canto mal.

— Ahí viene tu amiga.— Dijo Jiraiya alertándome.

— ¡Cha!

— ¿Qué le dijiste ahora? — Me preguntó el rubio.

— E-ella no entendió.— Me volví a encoger.

— ¿Asahiko? ¿Estás bien?

Oh, genial. El el ojos de huevo se enteró que estaría en Ichiraku por un tiempo, sobre todo porque Naruto come por veinte personas.

— Si, per-¡Ah! — Grité al recibir un golpe de la pelirosa.

— ¡Eso lo merecías!

— ¡Mal interpretaste mis palabras! ¡Yo solo dije que el cabello largo te hace ver más delgada!— Froté mi cabeza, adolorido por el golpe y enojado hablé sin pensar.— ¡El cabello corto resalta tu enorme frente!— Tapé mi boca demasiado tarde.

Nuevo UzumakiWhere stories live. Discover now