Cap 14

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Desde que llegué a Mystic Falls, las cosas habían cambiado de manera sorprendente. La calma aparente que envolvía la ciudad contrastaba con los oscuros secretos que yacían bajo su superficie.

Con el paso del tiempo, me había acercado más a Damon y Stefan, así como a Elena y Elijah.

Sin embargo, a pesar de la relativa calma que reinaba en Mystic Falls, una pregunta persistía en mi mente: ¿habrían logrado Sam y Dean poner fin al apocalipsis? Espero que ninguno de los dos allá dicho que sí.

Me decidí a obtener respuestas, me enfrenté al espejo en el baño, observando mi reflejo con una mezcla de determinación. Era hora de revelar mi verdadera apariencia, de mostrarles a todos quién era en realidad, más allá de las máscaras que había usado, esto no está bien por eso lo haré.

Con un suspiro, envié un mensaje urgente a Dean y Sam, instándolos a venir a Mystic Falls sin demora. Sabía que era arriesgado, que revelar mi identidad verdadera podía desencadenar una discusión con mis superiores, pero era un riesgo que estaba dispuesta a tomar por el bien de todos.

Una vez enviado el mensaje, apagué mi celular y me sumergí en un silencio tenso, esperando con el corazón en la mano la llegada de mis amigos. Sabía que vendrían, que no podían ignorar mi llamado, y eso me llenaba de una mezcla de alivio y preocupación.

Finalmente, el momento llegó. En la sala, Damon, Stefan, Elena, Elijah, Sam y Dean me esperaban con expectación y curiosidad, sus rostros reflejando una mezcla de emociones encontradas. Con determinación, salí del baño y me enfrenté a ellos, camine hacia la sala y me puse en la entrada de ella, mi corazón latiendo con fuerza en mi pecho mientras me preparaba para lo que estaba por venir.

Todos me miraban confundidos sin tener la menor idea de quién era.

—¿Quien demonios eres? —dijo Dean sacando un cuchillo.

—Les ahorraré el trabajo —dije con voz firme, sosteniendo el cuchillo de Ruby en mi mano temblorosa. Con un gesto rápido, me corté la mano y bebí agua bendita, demostrando mi humanidad ante sus ojos incrédulos.

—Espera, ¿Astra? —Pregunto Elena.

—Si.

El silencio que siguió fue ensordecedor, todos en la sala mirándome con asombro y sorpresa, sus mentes luchando por procesar la verdad que se desplegaba ante ellos. Elena y Stefan estaban en shock total, Damon y Stefan me observaban con una sonrisa traviesa, mientras que Sam no mostraba ninguna emoción, ¿Por qué? y Elijah parecía más tranquilo pero igualmente sorprendido por la revelación.

Rompiendo el silencio, les dirigí una mirada desafiante, enfrentando sus miradas con determinación y valentía.

—Sí, lo sé, no pueden creerlo —dije con una sonrisa irónica, anticipando sus reacciones. Me enfrenté a cada uno de ellos con determinación, dispuesta a enfrentar cualquier juicio o duda que pudieran tener.

Entonces, Damon y Dean hablaron al unísono, sus palabras llenas de sorpresa y admiración.

Estas más buena ahora —dijeron, antes de darse cuenta de lo que habían dicho y retroceder con una mezcla de incredulidad y sorpresa.

Una risa escapó de mis labios ante la situación, un destello de humor en medio de la tensión que nos rodeaba.

—Ay, me iré al infierno —dijeron al unísono, compartiendo un momento de complicidad.

En medio del silencio tenso que envolvía la habitación, una risa escapó de mis labios, un sonido liberador que rompió la tensión y nos devolvió un poco de normalidad en medio del caos.

• 𝑵𝒆𝒆𝒅 𝑩𝒂𝒄𝒌 𝑯𝒐𝒎𝒆Kde žijí příběhy. Začni objevovat