𝐌𝐞𝐭𝐚𝐧𝐨𝐢𝐚 | 𝑨𝒊𝒅𝒂𝒏 𝑮𝒂𝒍𝒍𝒂𝒈𝒉𝒆𝒓

Sonder

[ 𝓜. 013 ]

𝓦|____ Willson

Las cosas desde el 18 de septiembre habían transcurrido con normalidad. Se acercaban los exámenes mensuales por lo que gran parte de mis días mis actividades se basaban en estar con la cabeza pegada a libros y cuadernos de las diferentes áreas que se nos eran enseñadas.

¿Mi materia más problemática? Matemáticas, desde el momentos uno en que se añadieron letras le perdí el rastro, y no me iba mal como para sacar malas notas, mis abuelos no me lo permitirían (son ingenieros y están obsesionados con que me lleve bien con los números).

Siempre acudía a ellos, pero en esa oportunidad en específico se encontraban com gripe luego de un gran tiempo de estar de vacaciones en _____ visitando a la familia.

- ¿Problemas? -. Unos dedos se colaron sobre mis hombros con delicadeza, provocando olas de escalofríos, no obstante era relajante.

- ¿Entiendes de matemáticas? -. Hice la cabeza hacia atrás para encontrar aquellos ojos esmeralda que tanto adoraba admirar.

- Me defiendo bien -. Se pasó a sentar en el lugar vacío a mi costado. - ¿Qué no entiendes? -. Se inclinó a leer los ejercicios en las hojas blancas. - Mm facilísimo.

- Bueno, señor facilísimo, ¿cómo se resuelve esa cosa? -. Levanté las cejas esperando respuesta con menos paciencia que en la mañana pero este sólo atinó a reír.

- Te ves tan graciosa así -. Le lance una mirada de querer asesinarlo. - Ya va a tocar el timbre, pero podemos estudiar en la tarde -. Propuso tomando en sus manos el pan que me había enviado mi abuela y que permanecía sin un mordisco hasta que él le clavo sus dientes.

- Pero estudiar -. Recalqué firmemente. - No vas a distraerme hablando de la trayectoria de batman como superheroe en ciudad Gótica.

- Mmh ya sé, eso sólo tomó una hora -. Habló entre bocado. - Esto está rico -. Dejó el pan a la mitad nuevamente en su lugar. - Tú no me vayas a hablar de la carrera discográfica de Taylor Swift y Lana del Rey -. Contraataco.

- Eso sólo tomó una hora -. Respondí de igual forma, el sonrió y se lanzó sobre mí en un abrazo. - ¡Aidan! Me harás caer -. Reí sosteniendolo entre mis brazos.

- Podría quedarme así todo el día.

- Pero no puedes, ni yo puedo, ¿el timbre recuerdas?

- Es verdad, y también debía ir a ayudar a Snapchat, está en medio de un plan de cita o algo así -. Se separó de mí para dejar un corto beso sobre mis labips y levantarse. - Ya me voy, nos vemos a las cuatro en tu casa, come -. Señaló el pan que había ignorado durante todos los quince minutos de receso, y finalmente desapareció entre los estantes de libros.

Mi pregunta quedó suspendida dentro de mi cabeza, ni siquiera pude formularsela por su veloz huida de la biblioteca.

¿Noah iba a tener una cita?