★彡『 Mᴇᴛᴀɴᴏɪᴀ - Más ᴀʟʟá ᴅᴇ ʟᴀ ᴍᴇɴᴛᴇ 』彡★
Es el proceso de transformación que cambia la forma de pensar, sentir, de ser y vivir de alguien.
Ambos causaron una 𝐦𝐞𝐭𝐚𝐧𝐨𝐢𝐚 en sus vidas.
✭ 20/09/2023
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𝓐 |Aidan Gallagher
Para cuando llegamos a nuestro destino, la lluvia ya había parado, con mucha suavidad y delicadeza moví a Willson para despertarla. - Ya llegamos, bella durmiente.
- Perdón, no quería... -. Se disculpó al darse cuenta que su cabeza se encontraba apoyada en mi hombro, rápidamente negué.
- Descuida, no me molesta -. Le hice saber. - Tenga -. Le pasé el billete al conductor. - Vamos -. Toqué la espalda de Willson para que avanzara.
- Esa lluvia apareció en el peor momento -. Comentó la chica abriendo la puerta que daba al salón de estar, tal como ella dijo, la casa estaba vacía.
- ¿Puedo? -. Señale el sofá y ella asintió, como si del mayor triunfo se tratase, celebré y me lance sobre los cojines, sin antes sentir ese regocijon entre el abdomen y las costillas, el maldito si sabía dar un buen golpe. - Mmm mi labio sigue sangrando, ¿puedes creerlo?
- Sí lo creo, la bestia esa te partió el labio por lo que sangra -. Explicó.
Para olvidar el dolor palpitante que sentía nuevamente, me centre en ver cada uno de los movimientos que realizaba Willson, iba de un lado para otro buscando algo, por segunda vez se me hacía de cierta manera tierna, un pequeño grito de celebración salió de ella cuando hallo los objetos, algodón y alcohol yodado, me reacomode mejor en mi lugar esperando que no fuera lo que creía, ya podía sentir el ardor al sentir el contacto de los químicos con las heridas, con el contexto de las cosas definitivamente si era lo que pensaba, pero déjenme pensar que no.
Así como hace un rato, cuando Jaeden se acercó a Willson y pensé que sólo la abrazaría, aún no entiendo el por qué de el deseo de que sólo fuera eso, así que no me cuestionen.
Ella sacaba una pomada cuando la puerta del garaje se escuchó abrirse. - Mierda, mierda, mierda... Ven -. Corrió para jalarme del brazo hacia el pasillo, podía sentir como el dolor subía su intensidad. - Quédate aquí, trata de no hacer ruido, y disculpa por el desorden -. Fue lo único que pronunció para cerrar la puerta blanca de su habitación a gran velocidad. Dejándome solo con los dos gatitos y unas cuantas prendas de ropa en el suelo.
Con enorme lentitud me senté sobre la orilla de la cama, en ese momento el pequeño gato naranja se acurrucó a mi costado esperando caricias, gustoso accedí, mientras que el de color negro se quedó recostado al pie de la puerta.
Observaba más a detalle cada unas de las cosas que tenía Willson (A diferencia del día de la fiesta, que sólo pude dar un vistazo rápido).
El poster grande de "El cadáver de la novia" en la puerta, el resto de posters de Lana del Rey, Taylor Swift, The weeknd y Timothée Chalamet pegados por toda la habitación, también había uno de una chica de pelo castaño cuyo nombre artístico desconocía.
