CAPITULO XXVIII

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— EL QUISQUILLOSO —

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— EL QUISQUILLOSO —

Volver a Hogwarts a meses de los t.i.m.o.s, con Umbridge merodeando y ahora, con una fuga de Azkaban estaba volviendo mas insoportable todo.

Bellatrix, Rodolphus y Rabastan Lestrange, Augustus Rookwood, Antonin Dolohov, Elias Pucey, entre otros habían sido los encarcelados que lograron escapar. El ministerio había atribuido aquel escape a Sirius y mas que nunca aquel hombre lo mantenían aferrado al encarcelamiento en su propia casa.

También, la chica había seguido buscando información sobre los Pucey en Hogwarts entre los años sesenta y ochenta. Por la fuga conoció a Elias, el era un estudiante de Slytherin y compañero de los merodeadores, pero aquella generación era demasiado detallada y sentía que no terminaría de leer aquel anuario hasta el año siguiente. Los gemelos Weasley la ayudaban en ocasiones a leer, pero, ella sabia que ellos estaban demasiado ocupados en sus asuntos de los sortilegios Weasley.

Le habían confiado que en unos meses abandonarían Hogwarts y ella estaba feliz porque ellos lograron encontrar su lugar, ellos estaban seguros que no necesitaban culminar sus estudios.

En fin, el mes de enero fue rápido y no paso nada interesante. Pero, llego la primera excursión a Hogsmeade del año y Tassia había quedado con Draco, Theo, Blaise y Astoria, Daphne no estaría ya que tendría una cita con Ron, justo ese día era San Valentin.

— Esta fecha me recuerdan los enanos de Lockhart — dijo Tassia hacia los chicos mientras recorrían el pueblo mágico.

— Celosa porque tu hermana le mando uno a tu novio — Blaise soltó y Tassia sonrió al acordarse.

— Acá entre nosotros, fui yo — mintió ella.

— Fuiste tan romántica — Blaise le siguió la broma y Astoria rió al ver la cara que habían puesto Theo y Draco.

— Lo sé, cuando quieras te aconsejo — Tassia le guiño el ojo.

— Basta — Theo dijo, mientras acercaba a la pelirroja hacia el y le rodeaba sus hombros con su brazo.

La pelirroja se había acostumbrado a aquellas pequeñas muestras de afecto por parte del Nott y sus amigos también. Logró ver a lo lejos a Harry caminando junto a Cho Chang y se puso feliz al ver que tiene la oportunidad de estar con alguien que si pueda apreciar lo que aquel chico puede dar.

El grupo de Slytherin entraron a Honeydukes donde se atiborraron de dulces y después se dirigieron hacia las tres escobas, la cual estaba llena de gente pero Blaise logro encontrar una mesa.

Se sentaron, Draco y Theo se encargaron de ir por las bebidas mientras Astoria les contaba algo que sucedió con sus compañeras.

— Siento que hablo desde un privilegio al ver como ellas están preocupadas por no hacer enojar a la profesora Umbridge, corre el secreto que la mujer esta amenazando con despedir a los padres que trabajen en el ministerio — Astoria decía. — No me preocupó, mi padre no trabaja ahí y... en ningún lado en si.

— Ese no seria tu problema, afortunadamente tu padre no tiene necesidad de trabajar para mantener estable a su familia — Blaise le decía tratando de animar a la chica. — Y no deben de enojarse contigo por eso, supongo que se enfadan contigo por quedarte callada.

— Si se molestan no me lo hacen saber — Astoria dijo.

Llegaron los chicos con las bebidas y Theo se la entrego a Tassia mientras le regresaba el galeón que le habia dado.

— Te invite yo — le dijo y antes de que ella pudiera decir algo más, volteó hacia el resto. — Ya extrañaba venir aqui.

— Yo igual — Draco lo secundo.

— Prefiero estar en alguna playa de Santorini — soltó Blaise y todos voltearon a verlo por lo que carraspeo.— Pero nada mejor que estar aqui con ustedes.

— Claro — la pequeña Grengass dijo mientras alargaba la "o".

— ¿Aquella no es Rita Skeeter? — preguntó Theo al grupo, mientras colocaba su mano en la pierna de la pelirroja y ella colocaba su mano encima.

— ¿Que hace aqui? — Blaise preguntó al aire.

Después de aquella excursión a Hogsmeade solo tuvieron que pasar unas cuantas semanas para que el caos aterrizara en Hogwarts, una vez mas en aquel ciclo escolar.

Miles de lechuzas comenzaron a llegar a la mesa de Gryffindor, exactamente hacia Harry. También era notable el alboroto que traían mientras abrían las cartas y Umbridge fue directo hacia ahí.

Prohibió las salidas a Hogsmeade al Potter y también creo otro decreto mas.

La revista El Quisquilloso quedo prohibida en Hogwarts.

Aunque era obvio que entre mas prohibas cosas a los alumnos, con mas ganas tratan de hacerlo. Y no era raro ver a los alumnos con las revistas bajo un hechizo estético, de aquella manera Umbridge no las requisaría.

Claramente, los Slytherin se juntaron en la Sala común para leer aquello, la entrevista trataba de lo que sucedió después de que Harry y Cedric tocaron la copa.

No se sorprendieron cuando llegaron a la parte donde Harry señalo a los señores Crabbe, Goyle, Malfoy, Nott, Mulciber, los Carrow, Travers, Pucey, entre otros.

Crabbe y Goyle fueron los que mas se enojaron al ver el nombre de sus padres ahí, Adrian Pucey debió amenazarlos para que ellos no salieran a golpear a Harry.

— ¡Dejen de ser estupidos! — los regañaba Adrian. — ¡Si salen no solo expondrán aun mas a sus padres, sino, a todos los que han mencionado y eso nos incluye!

Después de que ambos chicos se calmaron, Pucey volvió a hablar.

— Hay que ser inteligentes, mientras tanto Malfoy, Weasley, Greengass's, Crabbe, Goyle, Parkinson, Bulstrode, Zabini, Nott, Warrington, Bletchey, Rowle, Peterson, Wilson... necesito que me acompañen.

Adrian mencionó aproximadamente a veinticinco alumnos y salieron detrás de el, durante el camino no les dijo ni una sola palabra y se detuvieron en la puerta de la oficina de la profesora Umbridge.

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Segundo capitulo del maratón y con este entramos en la recta final para el segundo acto. Ya casi se viene algo emocionante.

Besitos<3

I did It for love | Theodore NottDonde viven las historias. Descúbrelo ahora