Capítulo 57: Gracias y adiós.

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~~ Hugo ~~

Que malos recuerdos, esto es igual a cuando me capturaron y me ataron en aquel laboratorio, la diferencia es que ahora estoy completamente desnudo. Puedo mover mi cuerpo, al menos lo siento funcionar perfectamente, no parece que me hayan inyectado nada extraño. Estoy solo en esta habitación, dejarme así sin seguridad demuestra que no conocen para nada mi habilidad, por otro lado, significa que soy insignificante y que están ahora con Lena, claro, ella es su prioridad; ella es fuerte, pero volver a pasar por esto debe ser traumático para ella, tengo que ayudarla.

Utilizo mis "Twins" y rápidamente libero mis ataduras, no veo cámaras por ningún lado, al menos no se notan a simple vista, eso me da un momento de alivio, pero no puedo relajarme. Al lado de la puerta hay colgadas varias batas blancas, agarro una y cubro mi desnudez, no podía seguir aquí, con este aire acondicionado se me están congelando los Huguitos.

Una fuerte explosión hace que todo se sacuda y lo único que me viene a la mente es, Lena, la puerta no tiene seguro, salgo inmediatamente, pero siento movimiento de pasos, alguien se acerca, entró nuevamente para que nadie me vea y me coloco a dos metros detrás de la puerta preparado para atacar. Pasados unos minutos nadie llega, asomo mi cabeza con cuidado y observo que a la izquierda, la puerta adyacente a esta se encuentra abierta, solo se distingue parte de la espalda de alguien parado justo en la entrada, me dispongo a salir corriendo pero una voz me detiene.

– ¡Lena, estamos aquí! – escucho decir, era la inconfundible voz de Davis.

Avancé a velocidad normal hasta ellos, uno de los chicos del equipo de Nick, el que estaba junto a la puerta se sorprendió al verme y me apuntó con el arma, pero rápidamente me reconoció, abrió paso y me dejó pasar. Vi a Lena frente a todos, sin ropa y cubierta de sangre.

– ¿Pero qué hacen que no la cubren con algo? – entré y me coloqué frente a ella para taparla.

– Hugo, también estás aquí, bien – dijo Nick.

– Si, bien, gracias por venir a buscarnos, pero por favor, alcancen una de esas batas – señalé detrás de la puerta.

– No hace falta – dijo Davis  aquí tenemos sus ropas.

~~ Violena ~~

Ver a Hugo entrar a la habitación es lo que terminó de relajarme, me lancé sobre él y lo abracé, lo había escuchado pelear por algo, pero no entendía, cuando me bajó la adrenalina y sentí el frío de la habitación fue que me percaté que aún continuaba desnuda frente a todos, aunque como buenos caballeros apartaban la vista, al menos hacían lo que podían.

Davis nos entregó nuestras prendas y rápidamente nos cambiamos, nos fueron contando a grandes rasgos cual era la situación y el plan a seguir. Cuando escuché la palabra exterminio mi cuerpo se estremeció, esa era una gran idea, si acabamos con este idiota podríamos vivir en paz.

– Blaze y dos se quedarán en el sexto piso a vigilar que nadie baje en el elevador ni que nadie suba – indicó Davis – el resto de nosotros subiremos poco a poco por las escaleras, tenemos que evitar que el General huya.

– Acaben con todos – ordenó Nick.

– Solo quedan dos pisos y la azotea, debemos apresurarnos, pues encima hay un helipuerto, puede escapar por ahí.

En efecto, la resistencia que nos encontramos era fuerte, al final había más seguridad que la que Davis había predicho, pero esta vez los chicos demostraron la razón de ser considerados de élite, literalmente no tuve que hacer nada. En el octavo piso Hugo si se adelantó y eliminó a los últimos seis soldados en cuestión de apenas tres segundos ¡Ay Hugo, ahí va otro pulóver roto! Ese fue mi único pensamiento. Luego de eliminar a esos obstáculos nos encontramos al General, lo que presentía Davis era cierto, sentimos el ruido de un helicóptero acercarse, estaba apostado en la azotea y su vía de escape ya llegaba.

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