TW : sexo, au moderna, lencería de tigre, tetas, dom! reader, 69
Fandom : Demon Slayer
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Tú y Uzui caminaron por el centro comercial yendo de un lugar a otro revisando todas las cosas de la tienda.
Él había insistido en que ustedes dos salieran por el día, solo ustedes dos y Rengoku incluso los empujó a ir también.
Eras un poco reacio ya que no querías dejar a Kyo solo todo el día, pero fuiste ya que él insistió, además de que fue agradable pasar el rato con tu mejor amigo. Ahora los dos estabais en la sala de juegos jugando hasta que empezó a oscurecer.
"¡Oh, deberíamos jugar a ese juego de lucha y ver si podemos superar nuestra puntuación más alta!" Tengen dijo con lo que estabas de acuerdo, pero luego el teléfono de Uzuis sonó en voz alta.
Lo revisó antes de volverse para enfrentarte, "¿Deberíamos ponernos en marcha, se está haciendo tarde, sí?" Dijo, confundiéndote: "¿Pensé que querías jugar el juego?" Simplemente sacudió la cabeza mientras agitaba los brazos, "No, podemos superarlo algún otro día, vamos a llevaros a casa", os acompañó a los dos a su coche y procedió a llevaros a vuestra casa.
Pensaste que estaba actuando un poco extraño, pero no lo pensaste demasiado pensando que podría tener un lugar donde estar. Llegas a tu casa y te bajas del coche a punto de subir los escalones, "Oye, que tengas buenas noches (Y/n),", se rió antes de irse. "¿Por qué coño lo dijo así?" Murmuraste para ti mismo, pero te encogiste de hombros de nuevo y entraste en tu casa.
Cuando entraste, viste que estaba bastante oscuro, excepto en tu dormitorio, pero te diste cuenta de que la luz era un poco roja. "¿Bebé?" Preguntaste caminando hacia la puerta, "¿Kyo?" Preguntaste, pero jadeaste un poco cuando viste a tu encantador prometido sentado en la cama.
Había velas rojas por toda la habitación con un aroma encantador, algunos pétalos de rosa estaban colocados por toda la entrada del piso y en las sábanas.
La mejor parte fue que el propio Rengoku llevaba un atuendo encantador, un sujetador como un top corto, tangas que apenas lo cubrían y muslos altos, todo con un estampado de tigre.
"Woah, ¿qué está pasando?" Preguntaste mientras te quitabas el suéter. "¡Bueno, solo quería hacer algo bueno por los dos!" Te sonrió con un pequeño rubor por vergüenza por estar tan expuesto.
"Hiciste todo esto", murmuraste y él asintió, observaste su hermoso cuerpo, la forma en que el sujetador presionaba contra su pecho regordete y la tanga exponiendo sus bonitos muslos.
"Te ves tan bonito, cariño". Dijiste que poniendo tu mano en su mejilla frotándola con el pulgar, "Mitsuri dijo que es algo que te podría gustar".
