【Capitulo 30】

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Con la recuperación completa y la oportunidad de volver a jugar voleibol, Hinata estaba decidido a sorprender a Kageyama. Después de un día agotador de entrenamiento, Hinata le pidió a Kageyama que lo acompañara a una zona tranquila detrás del gimnasio, donde había preparado algo especial.

"Hey, Kageyama, ¿puedo mostrarte algo?" preguntó Hinata, con una chispa traviesa en los ojos.

Kageyama asintió con curiosidad, siguiendo a Hinata hacia el lugar indicado. Cuando llegaron, Hinata reveló una cancha improvisada con luces tenues, iluminando un ambiente íntimo.

"¿Qué estás tramando, Shoyo?" preguntó Kageyama, con una sonrisa intrigada.

Hinata, con una expresión llena de emoción, se quitó la chaqueta del equipo para revelar su uniforme de juego. "¡Puedo volver a jugar, Tobio! ¡Sustituiré a Tsukishima en el próximo partido!"

Kageyama quedó momentáneamente sin palabras, sorprendido y emocionado por la noticia. Hinata, con su característica energía, comenzó a saltar y a moverse alrededor de la cancha improvisada, mostrando sus movimientos rápidos y ágiles.

"¡Mira, Tobio! ¡Estoy listo para volver al juego! Y quiero que seas el primero en enfrentarme", exclamó Hinata, desafiante.

Kageyama, contagiado por la emoción de Hinata, sonrió y se preparó para el desafío. Jugaron un set improvisado, lleno de intensidad y camaradería. Cada remate y bloqueo resonaba con la alegría de tener a Hinata de vuelta en la cancha.

Después de una serie de intercambios emocionantes, ambos se detuvieron, juntos en el centro de la cancha improvisada, con sonrisas radiantes.

"Shoyo, es genial tenerte de vuelta", admitió Kageyama, con admiración en su mirada.

Hinata le dio un fuerte abrazo. "¡Gracias, Tobio! Y esto es solo el comienzo. ¡Vamos a hacerlo increíble en el próximo partido!"

Ambos compartieron una mirada llena de determinación y anticipación, listos para enfrentar los desafíos que se avecinaban. La sorpresa de Hinata no solo era un regalo para Kageyama, sino también el símbolo de un nuevo capítulo en su viaje en el mundo del voleibol.

Después del emocionante intercambio en la cancha improvisada, Hinata y Kageyama se encontraban en el centro de la cancha, sus miradas fijas en el otro. Aunque la alegría de tener a Hinata de vuelta era palpable, también se notaba una leve tensión en el aire.

"Tobio, estoy listo para el próximo partido", afirmó Hinata con determinación, pero Kageyama detectó algo más en su tono.

Kageyama asintió, reconociendo la seriedad en la expresión de Hinata. "Sí, lo sé. Vas a ser increíble, como siempre."

Sin embargo, la tensión persistió mientras intercambiaban miradas. Era como si ambos estuvieran cargados de emociones no expresadas. Hinata, a pesar de su alegría por volver al juego, también sentía una presión adicional al enfrentarse a Kageyama.

"Tobio, sabes que siempre quiero ser mejor, ¿verdad?" preguntó Hinata, su mirada buscando la aprobación en los ojos de Kageyama.

Kageyama asintió, comprendiendo la intensidad de Hinata. "Lo sé, Shoyo. Siempre estamos buscando mejorar."

A pesar de sus palabras, la tensión persistía, alimentada por la competencia inherente entre ellos. Ambos eran jugadores apasionados y ambiciosos, y la vuelta de Hinata añadía una nueva capa de complejidad a su dinámica.

"Esto no cambia nada entre nosotros, ¿verdad?" preguntó Hinata, su expresión reflejando una mezcla de esperanza y ansiedad.

Kageyama colocó una mano en el hombro de Hinata, buscando calmar la tensión. "No cambia nada, Shoyo. Seguimos siendo compañeros de equipo, siempre buscando el éxito juntos."

Internado Haikyuu  [En Pausa]Where stories live. Discover now