Capitulo 13:Ojos de cachorro.

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Tomie miro a Souichi caminar mas delante de ella observando los diversos artículos de las tiendas con emoción. Aunque este estaba creciendo y superándola en tamaño, ella sabía que en su interior seguía siendo casi un niño, y ahora lo veía con esa chispa de entusiasmo por unos DVDs de películas que parecía querer.. Continuaron su paseo a un ritmo tranquilo, adentrándose en los extensos pasillos del centro comercial. Por suerte, el lugar parecía estar prácticamente vacío ese día lunes por la mañana, brindándoles una sensación de intimidad y privacidad. Era uno de esos raros momentos en los que podían disfrutar de la tranquilidad y privacidad que tanto ansiaban. Tomie agradeció internamente no tener que trabajar en la agencia de modelos que recién había contactado con ella. Por su parte el alfa, había decidido escaparse de sus clases con el propósito de aprovechar el día junto a su amada omega.

Mientras avanzaban por los pasillos, Tomie no pudo evitar sonreír al notar cómo Souichi se detenía de vez en cuando frente a los escaparates, señalando con entusiasmo cosas interesantes para él. Este la miro a los ojos un momento casi suplicándole que si le podía regalar algo.

"Si te portas bien, al final te compare algo" Ella tapo sus labios riendo de manera ligera, mientras este se ruborizaba porque eso se escucho igual a cuando le pedía algo a su madre cuando era infante.

Tomie y Souichi entraron en varias tiendas de ropa, explorando las diferentes opciones disponibles. La omega buscaba con atención prendas que le llamaran la atención, mientras una amable trabajadora de la tienda se acercaba para brindarle ayuda, señalándole algunos artículos que podrían interesarle. Con el asesoramiento de la empleada, Tomie examinaba las prendas, sosteniéndolas frente a su cuerpo y observando cómo le quedaban en el espejo cercano. En ocasiones, fruncía ligeramente el ceño si algo no le gustaba o no le favorecía, pero a los ojos de Souichi, cualquier elección resaltaba la belleza de su amada omega.

Mientras Tomie sostenía dos vestidos idénticos, con la única diferencia en el color, uno rojo y otro azul celeste, se acercó a Souichi con una sonrisa curiosa en su rostro. Llevaba los vestidos en sus manos, mostrándoselos a su amado alfa.

"¿Crees que alguno de estos me quedará bien?" preguntó Tomie, buscando la opinión de Souichi sobre su elección.

Souichi miró los vestidos con atención y, tras un breve momento de reflexión, respondió con seguridad: "El celeste te quedará mejor".

Tomie asintió, complacida con la elección de Souichi. Ella siguió explorando la tienda en busca de más prendas y accesorios que pudieran complementar el atuendo elegido, cuando ya tuvo todo lo que complementara ese atuendo fue hasta la caja a pagar las cosas que eligio para ella al igual que una o dos prendas destinadas a su alfa, este no era mucho de salir a tiendas a comprarse la ropa a si que Tomie aprovecho de cambiar un poquito el closet del alfa.

Este como siempre se ofrecio con amabilidad cargarle las bolsas para regresar, estaba penando en si comprar algo para beber para ambos, tal vez un café o una soda estaría bien, cuando le quiso preguntar a Souichi lo había perdido de vista este estaba nuevamente mirando unos DVDS, era otra tienda que al igual que la anterior ofrecia las mismas películas que este estaba deseado.

"¿Tu crees que me las puedas regalar?" Pregunto con ojos emocionados. "Me vi la primera película en la televisión y aquí están las tres completas, pudiéramos verlas juntos"

"¿No quieres mejor algo de beber?" Pregunto mientras se acercaba a este observando que películas eran las que deseaba.

"Tal vez pero..." No sabia como decirle enserio que deseaba aquellas película, la miro a los ojos mientras en su cabeza repetia algunas cosas. Tomie por su parte fruncio las cejs mientras tapaba uno de sus oidos con la palma de su mano.

"Souichi Tsujii, ¿me intentas hacer unos de tus truquitos para conseguir lo que deseas?" Este agacho la cabeza.

"Lo siento" dijo sinceramente. Tomie soltó un suspiro cansado y rodó los ojos ante la situación.

"Bien te la regalo" accedió finalmente, resignada. Souichi sonrió emocionado por la respuesta afirmativa y entró a la tienda para dirigirse al empleado encargado de la venta de los DVDs.

Esta saco el dinero de su bolso para pasárselo, este casi corrio adentro con emoción. Después de unos minutos, Souichi salió de la tienda con una sonrisa triunfal en el rostro, sosteniendo los DVDs en sus manos. Tomie lo miró con una mezcla de diversión y ternura, sabiendo que aquellas películas ahora serían una parte especial de su tiempo juntos.

Con las bolsas en manos de Souichi y los DVDs en su posesión, continuaron su camino de regreso, dejando atrás las tiendas. ¿Quién diría que Souichi pudiera hacer ese truquito de usar unos ojitos de cahorro callejero abandonado y flaco le sirvió para conseguir algo?

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