¡Esta forma de transmigración es definitivamente incorrecta!

Capítulo 165: No lo creo.

"Su Alteza, Yin Suye y Huang Beichen tomaron un pequeño equipo de personas y abandonaron el campamento principal de los humanos. Se estaban escabullendo secretamente hacia el reino de los demonios".

Yan Ruya llevaba una armadura plateada y parecía muy heroico. Justo cuando vio al distante Huan Tian sentado en el asiento alto, su expresión originalmente rígida se convirtió instantáneamente en reverencia, y luego informó las noticias que recibió de una manera concisa y clara. Sin embargo, cuando dijo el nombre de Yin Suye, el actual Rey Supremo humano, no hubo ningún respeto en el tono; ella se dirigió a él directamente por su nombre. Era como si solo Huan Tian fuera el único Rey Supremo en la mente de Yan Ruya.

"Pasa la voz, quiero ver a Yin Suye y Huang Beichen, déjalos venir".

Huan Tian agitó la mano sin dudarlo y no puso a Yin Suye y Huang Beichen en sus ojos. A Huan Tian no le importa el progreso de la guerra, solo necesita asegurarse de que el desarrollo actual siga la trayectoria original.

"Sí."

Al recibir la orden de Huan Tian, ​​Yan Ruya no tiene dudas ni disentimiento. Ella presentó sus respetos y fue inmediatamente a realizar la tarea.

"..."

No era la primera vez que Shui Ruoshan veía a Yan Ruya, pero cada vez que la veía, Yan Ruya lograba refrescar su impresión sobre ella. No sabe que la influencia de Huan Tian sobre los demonios será tanta. ¿Incluso la heroína Yan Ruya no puede escapar del encanto de Huan Tian, ​​y mucho menos de los demás en el reino de los demonios? Por ejemplo, en este momento Yan Ruya parece no ser completamente consciente de cuán engorrosa e irrazonable es la orden de Huan Tian y solo aceptó resueltamente la orden de Huan Tian como la orden más alta.

Shui Ruoshan no tiene dudas de que si Huan Tian le pidiera a Yan Ruya que muriera, ¡Yan Ruya ni siquiera parpadearía antes de suicidarse de inmediato! Finalmente entiende por qué Yan Ruya, que amaba tanto a Huang Beichen en el pasado, todavía elegiría aceptar la orden de Huan Tian y mató a Huang Beichen muriendo juntos. Porque en el corazón de Yan Ruya, no hay nada comparable a la existencia de Huan Tian, ​​¡ni siquiera la suya!

Obviamente, Huan Tian no es un buen Rey Supremo demonio, pero puede obtener la lealtad ciega de todo el reino de los demonios... ya sea correcto o incorrecto, razonable o no, o lo que sería causado por la acción. ¡Realmente hace que uno sienta envidia, celos y odio!

"¿Qué sucede contigo?"

Aparentemente, Huan Tian sintió el pensamiento inusualmente activo de Shui Ruoshan. Al ver la expresión distorsionada de Shui Ruoshan, preguntó con curiosidad.

"¡Solo estoy suspirando porque eres demasiado irresponsable como Rey Supremo demonio!"

Shui Ruoshan no tiene una buena actitud hacia Huan Tian. Entonces, cuando le habló, naturalmente no habrá ningún tono positivo en ello. O se podría decir que desde la última vez que habló con Huan Tian sobre la destrucción del mundo y descubrió que todos sus encuentros fueron causados ​​por Huan Tian, ​​se sintió muy disgustado con Huan Tian. Naturalmente, aprovechará cualquier oportunidad para regañar a Huan Tian siempre que pueda. Sin embargo, cuando dijo que Huan Tian no es un buen Rey Supremo demonio, no lo dijo por enojo. Fue por lo que resumió de las acciones de Huan Tian durante su tiempo con él.

Huan Tian era realmente poco confiable, incluso un extraño como él no puede soportarlo más. ¡Él piensa que el reino de los demonios debe tener 8 generaciones de mala suerte para tener a un loco como Huan Tian como su Rey Supremo! Uno necesita saber que después de que Huan Tian provocó la guerra entre los demonios y los humanos, él (HT) se cruzó de brazos y actuó como un comerciante ocioso, sin hacer nada más, dejando que los demonios y los humanos pelearan libremente por sí mismos. Incluso cuando hay 2 Reyes Supremos en el lado humano, Yin Suye y Huang Beichen, lo que causó que el lado demoníaco sufriera grandes pérdidas en la guerra, el demonio Rey Supremo Huan Tian todavía no tiene intención de ayudar, dejando que los demonios se sacrifiquen continuamente. En la guerra...