Un juego|Benny Watts

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"Benny Watts", dijo Benny mientras observaba al hombre garabatear su nombre en la parte superior del papel.

"¿Clasificación?" Preguntó el hombre, mirando hacia arriba.

"tres mil setecientos sesenta"

"Impresionante,"

"Lo sé", respondió después de que le entregaran el trozo de papel y caminara rápidamente hacia la sala de ajedrez. Había alrededor de cuarenta hombres de mediana edad, todos hablando y caminando lentamente por el pasillo, todos se quedaron en silencio cuando la cabeza entró, revelando el emparejamiento. Benny se acercó y lo revisó todo rápidamente, sin ver mucho fuera de lo común, solo para verlo jugar un torneo contra J. Walter.

Se sentó mirando al hombre que tenía enfrente por un segundo antes de hacer clic en su reloj. El juego comenzó... o eso pensó hasta que alguien entró al pasillo. Vistiendo un elegante abrigo largo de cuero blanco con un cinturón alrededor de su cintura. Su cabello era largo y liso excepto por los dos mechones delanteros que caían alrededor de sus grandes gafas de sol negras.

La mujer asintió cortésmente. "Mis disculpas", dijo, antes de caminar hacia el tablero. Su gran bota blanca resonó en el silencioso pasillo antes de sentarse en una silla detrás de Benny. Ahora comenzó el juego.

Benny ganó en veintitrés movidas, Jennifer en veintidós. Benny aún no sabía que esta mujer era Jennifer y no lo supo por un tiempo. Jennifer, por otro lado, vio a 'B. Watts estaba en el tablero e inmediatamente supo que estaba allí, pero no tuvo el esfuerzo de encontrarlo en el pasillo lleno de hombres.

Una vez terminados los primeros partidos, el resto se fue a almorzar. Jennifer 2caminó por el pueblo, hacía mucho que no pasaba por aquí. Ella siempre estaba al otro lado de la ciudad, la última vez que estuvo aquí fue cuando estaba recogiendo sus cosas de Benny's por última vez.

Para ser honesta, había extrañado mucho este lado de la ciudad, extrañaba todos los pequeños restaurantes que se alineaban en el lado izquierdo y todas las tiendas que se alineaban en el lado opuesto y el eco constante de la música jazz de fondo. Vio un pequeño café y decidió llevar su negocio allí. Se sentó adentro y pidió un sándwich pequeño y café.

Sacó un par de papeles de su bolso y comenzó a revisarlos, firmando y leyendo mientras lo hacía. Todavía se estaban tramitando los trámites para un casino en las calles principales de Londres. Debido a que estaba tan lejos y fue tanta la inversión que hubo muchísimos papeles.

Benny observó a la mujer desde el otro lado del café. Él estaba tan interesado en ella, ella parecía muy ocupada y no parecía una jugadora de ajedrez en absoluto. Siempre llevaba gafas de sol negras que cubrían sus ojos y parte de su rostro. Su cabello siempre estaba delante de sus orejas, ocultando aún más su rostro. Tenía un montón de papeles y un bolígrafo en la mano.

Sabía que no debía permitirse mirarla por mucho tiempo, así que desvió la mirada, alejándola de sus pensamientos. Pensó en contra quién se enfrentará a continuación, quién perderá ante él a continuación. Muy pronto, sus preguntas fueron respondidas mientras revisaba los nombres de los próximos torneos... Hasta que uno llamó su atención.

  J. Martínez contra M. Black

Lo miró fijamente durante mucho tiempo. Ella no hacía torneos, ¿por qué estaba aquí? ¿Donde estaba ella? Él no la había visto todavía. Su mente corría con una pregunta tras otra. "Martínez", repitió sacudiendo la cabeza lentamente, confundido.

"¿Sí, Watts?" Respondió una mujer, él miró a la mujer. Era la misma del café, con los ojos todavía tapados. Ella apartó la mirada del tablero para mirarlo.

"Lo siento, yo-" Volvió a mirar el tablero mirándolo con atención. "Debe haber elegido a la persona equivocada", decidió. Quiero decir, Martínez no era el nombre más raro del mundo y podría haber sido simplemente una coincidencia.

"¿Acaso tú?" Ella cuestionó mirándolo.

"Pensé que era un viejo amigo".

"¿En serio? ¿Cómo se llamaba?" Preguntó, levantando las cejas pero Benny no se dio cuenta.

"Uh-Jennifer", respondió.

"¿Sí, Benny?" Ella respondió quitándose las gafas de sol y dejando al descubierto sus ojos marrones. Era ella, ella realmente estaba aquí. No se habían visto en al menos un año y ahora allí estaban.

"¿Jennifer?" Respiró.

"Me alegra que recuerdes mi nombre", se subió las gafas de sol una vez más y se volvió hacia el tablero.

"¿Qué estás haciendo aquí?"

"¿Pues, qué piensas?"

"Dijiste que no harías torneos".

"Ella dijo que no lo haría", corrigió. Esta corrección no tenía sentido para Benny, pero él la dejó continuar. "Cambié de opinión", se encogió de hombros antes de alejarse dejando a Benny estupefacto. Ella acababa de hacer un movimiento en su juego de ajedrez mental, preparando algo que él no podía entender.

Era extraño verla, escuchar su voz nuevamente después de tanto tiempo. Tenía tantas preguntas pero no había forma de hacerlas ni de obtener respuestas. Quería saber qué había estado haciendo y dónde había estado, pero lo más probable es que nunca lo descubriera. Lo más probable es que él nunca supiera qué había estado haciendo y dónde había estado. Pero entonces se le ocurrió.

Las oportunidades eran algo que aprovechó.

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