Yo lo siento

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El camino hacia Surin era algo cansado ya que el bebé pedía varias veces de comer entonces procuraban detenerse para que Anya lo alimentara.

Pero a pesar de esos contratiempos llegaron a la hora prometida al hospital donde Robert los esperaba

Tenemos que dejar esta ambulancia—los observó
Si—todos bajaron
Los doctores de acá tampoco dirán nada—le puso la mano en el hombro a Damián—pero aun así no podemos quedarnos acá mucho tiempo
¿Qué haremos?—Becky estaba preocupada mientras cargaba a su hijo
Necesito marcarle a Sylvia, ella nos puede ayudar—observo al doctor Franz—disculpa ¿puedo usar tu teléfono?
Claro—el doctor lo acompaño al teléfono público

Estamos en medio de la nada y no sabemos donde pasaremos la noche—susurro Becky—esto es molesto
Lo siento—Damián suspiró
No es tu culpa, ni siquiera es tu padre—le puso la mano en la espalda—¿y si vamos mas al norte?
Sería bueno que el señor Forger nos dijera donde ir—la miro
Dios, ya tienes mirada de padre—se burló—por cierto ¿William?
Esta con Anya y el bebé—sonrió algo triste—los doctores les están haciendo estudios para justificar que usamos la ambulancia

Poco a poco los demás coches llegaron a las afueras del hospital, estaban esperando nuevas indicaciones y que pasaría esa noche

Oye Ken—Damián se acercó—no es tu culpa
Claro que lo es, afecte a nuestros hijos y la paz—ponía su mano en su cabeza
No fue tu culpa—hablo Yuri—ni siquiera sabías a que se dedicaba tu padre y no tendrías porque
Aun así—estaba molesto
Ya, deja de culparte y mejor busca la solución —Fiona se enojo—ya eres padre, busca como proteger a tu hijo y tu esposa

Los dos témpanos de hielo tenían razón, en su afán de culparse no estaba pensando claro y por ende no podía buscar una solución para el problema generando así que su esposa se preocupara más.

Una hora mas tarde Loid regreso donde todos estaban reunidos y los miro.

Solo hay una solución—trago saliva—irnos a Westalis
¿No hay guerra?—se preocupo Yor
No—la miro—es una mala información, la guerra solo es en este territorio
¿Podemos confiar?—Robert estaba abrazando a Irina
Si—asintió—solo que, debemos irnos por la carretera de Surin y tratar de ocultar la identidad de los Desmond, Ken y Becky
Esta bien, hagame feo—dijo Ken
Hoy dormiremos en un hotel—los observo— mi jefa ya nos reservó habitación

Cuando Damián termino de oír el plan decidió ir a ver a su amada Anya y a su bebé en el hospital, cuando entro noto que apenas salía de sus estudios y cargo a su esposa y a su hijo para llevarlos a la sala de espera.

¿Salieron bien?—la observó
De maravilla—sonrío—Demetrius nos cuido porque igual William estaba en estudios
¿Se quedo con él?—alzo la ceja
Si, el pequeño se espanto de ver las inyecciones—se burló—por cierto, dime ¿por qué huimos?—lo observó

Damián solo suspiro y la observo

El padre de Ken era amigo de Donovan, él nos delató—cerró los ojos
Maldito Rupert—murmuró
¿Qué fue lo que leíste?—la miro
Él—bajo la mirada—él, fue quién me hizo esto—señalo su cabeza—yo, leí todo y se que amaba a Ken que estuvo en ese matrimonio aunque ya no se amaban, pero
Odio a ese idiota—la abrazo—te juro que haré que pague por esto junto con mi padre y que me perdone Ken
Su amistad con Donovan empezó desde la escuela Edén, también se llevaba bien con tu madre y Jeeves—suspiró
Te prometo que te voy a cuidar y a este bebé igual—la miro—no dejare que nada malo les pase aunque eso me cueste a mi la vida
No digas eso—puso su mano en su mejilla—este niño tiene que tener a sus dos padres
Lo se—la abrazó y beso su frente

Lo siento—una voz los saco de su momento de pareja
Ken—Anya lo observó—no cargas con el pasado de tu padre, recuerda eso
Anya, Damián y bebé—los miro con los ojos llorosos—les juro que igual los protegeré como protejo a Becky y a Ewen
No te preocupes—Damián le sonrío—ya no te culpes

El joven de cabello castaño no sabía el porque pero sintió que necesitaba llorar, su burbuja donde vivía y donde creía que su padre era un héroe, ahora veía el monstruo que había lastimado a una de sus grandes amigas.

Mientras tanto Damián y Anya se acercaron a él para darle su apoyo ante esa caída que estaba teniendo, porque a pesar de los pecados de su padre, Ken no era culpable de nada.

Listo para empezar- Ready to startDonde viven las historias. Descúbrelo ahora