No estas sola

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Una pelirosa despertaba debido a los rayos del sol que se dejaban ver por las aberturas de su cortina, al inicio su semblante malhumorado imperaba en su cara, pero al ver que al lado de ella dormía un chico de cabello verdoso sonrió con ternura.

Se veía demasiado tranquilo, era un rostro de él que no había visto, era como si su corazón se mantuviera en calma, entonces llego a la conclusión de que el rostro dormido de Damián era su favorito.

Si me sigues viendo no puedo dormir—frunció el ceño y abrió un ojo

Me espantas—lloriqueo falsamente—pero vuelve a dormir, me gusta tu rostro así

¿Te gusta verme con los ojos cerrados? —se quedó confundido

No—negó—me gusta verte tranquilo

El chico se sonrojo ante las palabras de la pelirosa, era un secreto que solo Ewen y Emile sabían desde niños, pero él no dormía tranquilo, siempre algo lo aquejaba y por eso se despertaba con unas pequeñas ojeras casi imperceptibles, pero esa noche, después de que abrazo a la pelirosa sintió como su corazón se calmó y como si las preocupaciones se iban, sabía que eso era paz, pero no pensó que al abrazarla y dormir eso pasara.

Damián—se sonrojo

Perdón—bajo la vista sonrojado—se me olvido que lees la mente

No sabía que te provocaba mucha paz—tapo su rostro con sus manos

Ah—se levantó de la cama—vamos a desayunar

Si—se levantó y se acercó a su perro blanco que los miraba confundido—vamos Bond

Woof—ladro el canino

Los tres salieron de la habitación y observaron como un rubio se quedaba atónito al ver como el menor de los Desmond salía de la habitación de su hija

¿QUÉ ES ESTO? —grito

Pido disculpas señor Forger—interrumpió Demetrius—ayer quería mi espacio y mande a mi hermano a dormir con su hija

¿USTEDES DOS SE COMPORTARON? —estaba nervioso

¡PADRE! —grito Anya sonrojada

Señor Forger—interrumpió Damián—respeto a su hija, a su casa y a usted, no haría nada indecoroso

Si padre—se sonrojo la peli rosada—Anya se portó bien

Loid calma—se acercó Franky—además conoces a Anya, ella no es así

Está bien—carraspeo la garganta—vengan a desayunar

Si—grito feliz la peli rosada

Todos se dirigieron a la mesa, pero observaron que Becky ni Ken habían salido de su habitación por lo que Anya decidió desayunar rápido para poder ir a ver a su amiga, cuando esto llego, Anya toco la puerta de la habitación generando que un chico castaño le abriera.

Hola Anya—sonrió amablemente—intente levantarla para que vayamos a desayunar, pero no quiere

¿Puedo hablar con ella? —comento Anya observando desde el hombro del chico a una chica cubierta con la cobija

Si—asintió—mientras desayunare, te la encargo

Si—asintió y entro a la habitación cerrando la puerta tras ella

Ven a desayunar—comento Loid

Si—camino a la mesa

Oye chico—hablo Franky—' ¿tus padres no estarán preocupados de que no llegaste a dormir a casa?

No—negó—mis padres son artistas, ahorita están viviendo en Francia así que me emancipé de ellos desde que salí de Edén, así como ellos se divorciaron

Disculpa la pregunta—el rizado se quedó apenado

No pasa nada—comió el desayuno—hay diferentes tipos de familias y yo siempre he querido ser una persona diferente a ellos

¿Un llorón? —comento Damián

No—lo observo—un hombre que te gana en futbol

Quisieras—se burlo

Eres fastidioso—se burló Ken—pero me agradas

¿Gracias? —Damián lo miro confundido

Oye—Markus le hablo

Dime—lo observo el castaño

¿la señorita Blackbell? —se quedó observando al chico

Anya está con ella—comió su desayuno mientras ponía una mueca de tristeza

Esto no pasó desapercibido por el menor de los Forger quien no necesitaba ser un telepata porque sabía cuándo una persona estaba mintiendo.

En la habitación de Becky, una peli rosada se acercaba a la orilla de la cama y observo como su amiga no se había quitado su uniforme de la escuela, ese uniforme que tenía sangre de Ewen, manchas de tierra y un poco de polvo de los escombros.

Becky—la movió un poco

Anya déjame—se tapó su cara con la cobija

Becky—se recostó en la cama y la abrazo—no digas que me vaya

Anya—volvió a empezar a llorar—no quiero esto, quiero que esto sea un sueño

Lo sé—la abrazo muy fuerte como si eso fuera a unir su corazón

Esto duele—suspiro—duele estar sola

Becky no está sola—la siguió abrazando—yo estoy contigo

La castaña siguió llorando mientras Anya la abrazaba con mucho cuidado, tenía mucho miedo de lo que venía en su vida, se sentía aun mala persona y mala hija, pero sobretodo se sentía perdida, era mucho para una chica de 17 años.

Becky—la pelirosa la llamo—sabes, cuando escape del laboratorio donde me tenían siempre tuve miedo de que me quedara sola, pero papá me encontró, aunque igual me dio miedo que después me abandonara, pero no fue así—tomo aire—sé que no es lo mismo estar sola y después conseguir una familia a tener una familia y perderla, son casos diferentes, pero, sé que de algo estoy segura, donde quiera que Becky este Anya siempre ira, nunca la dejare porque ella es mi familia

Anya—empezó a sollozar más fuerte—gracias

Mi señorita debe de desayunar, debe de cambiarse y dormir—la abrazo—debe de ser feliz, porque Ewen, Martha, el profesor Henderson y tus padres quieren que seas feliz, así que hazlo, vive con una sonrisa tan grande que se sientan tranquilos de adelantarse al otro mundo

La castaña se levantó de la cama mientras Anya la observaba

Si—asintió y limpio sus lágrimas que aun salían de sus ojos—gracias Anya

Somos mejores amigas, somos familia y cumpliré mi promesa que le hice a Martha—se levantó—así que póngase el pijama que le dejé, hace juego con la mía

Gracias—se acercó a la peli rosada y la abrazo—gracias

Somos amigas—correspondió su abrazo—ahora somos familia.

Familia—se separó del abrazo y le sonrió

Listo para empezar- Ready to startDonde viven las historias. Descúbrelo ahora