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Mientras los dos chicos seguían besándose con calma de vez en cuando, una persona se dirigía con todo el enojo posible en su sistema, sus manos apretandose con fuerza hasta el punto que sus nudillos se volvían blancos y su rostro estaba rojo debido a la rabia. Y todo aquel que pase por su camino era empujado con brusquedad, él rubio no podía estar más enojado en ese momento.

Jungkook mordió en labio de Taehyung, la herida que tenía ahí empezó a sangrar pero eso no le impidió seguir besandolo con ganas, sin importarle el hecho de que poco a poco se hiba quedando sin aire y el castaño en su regazo correspondía muy pocas veces a éstas alturas. Al principio correspondía por obligación, hasta que Jungkook se dío cuenta de que los besos seguían sin la necesidad de su navaja, así que la alejó, pero ahora, cuando habían pasado un par de minutos, el adolescente finalmente se dío cuenta de lo que estaba sucediendo y sólo se mantuvo quieto en su lugar, mirando fijamente al payaso.

─Taehyung: Detente─Pidió, empujandolo con suavidad a Jungkook, para no alterarlo, sus manos se posaron en el pecho del pelinegro al momento de darle el empujón.

Jungkook gruñó por lo bajo y quito su mano de la ramera de Taehyung y agarro con fuerza su cintura, pegádolo aún más a él, sus ojos recorrían por completo el rostro del menor, pero por más que intentará, no podía soltarlo si se veía así luego de un par de besos, mil cosas pasaban por la mente del pelinegro, quería quitarse el estrés y el enojó con
el chico que tiene al frente.

El cabello castaño del chico estaba desordenado, sus labios rojos, heridos e hinchados, mientras que su mejilla tenía restos de lágrimas secas, y demás, un pequeño hilo de sangre salía desde la herida de su labio.

Jungkook no quería soltarlo, claro está, así que ignorando por completo al menor lo tomó por la nuca y lo acercó a él, pegándo sus labios nuevamente mientras conseguia un par de golpecitos en el pecho en señal de protesta por parte del castaño, Taehyung mantenía su ceño fruncido, sus manos golpeaban sin fuerzas al mayor en un inútil intentó por soltarse.

Se sentía débil, adolorido y usado, no sabía que pretendía el hombre que tenia delante suyo, pero no quería que las cosas vayan más lejos, la simple idea le parecía repugnante y sería demasiado para él, pensar que ese hombre podía tocarlo de más hacía que su estómago se revuelva, sus ojos se llenan de lágrimas nuevamente y su pecho empieza a doler.

No quería, no quería que eso pasará, no quería que aquel hombre se propasara con él.

Así que con lágrimas en los ojos, se preparó para arriesgarse, se separaría de aquel sujetó aunque se gane unas nuevas heridas por ello, no le importaba nada, no pensaba que podría haber peor cosa que una violación.

Apretó la camisa de Jungkook con sus manos, y cuando estuvo a punto de empujarlo con brusquedad, la puerta de la casa rodante se abrió, chocando contra la pared hasta hacer un sonoro ruido que se escucho por todo el lugar.

Taehyung ni siquiera pudo reaccionar, solo supo de que un momento a otro lo agarraron por la parte trasera de su ramera y lo tiraron al suelo de forma brusca, su cuerpo cayó hasta rasparse, haciendo que sus heridas empiecen a doler con intensidad, y sus ojos se cierran con fuerza ante la sensación.

Pero eso no importó, lo que importaba era que hacia Jimin ahí, apareciendo hecho una fiera. El rubio lucía furioso y en un parpadeó ya se había tirado sobre Jungkook, él cuál estaba igual o más perdido que Taehyung ante la situación.

─Jimin: ¿¡PERO QUE MIERDA HICISTES! HIJO DE PUTA!?─Gritó el rubio algo bajo, tirándose junto a Jungkook contra el suelo, solo que él permanecía encima del pelinegro, sus manos sujetaban con fuerzas el cuello de la camisa del payaso mientras lo movía de un lado a otro.─¡INFELIZ!, ARRUINASTES SU VIDA!─.Volvió a gritar, dándole un puñetazo a Jungkook en la mejilla derecha.

Clown  | KookV | Ver.explícita Where stories live. Discover now