—Benjamín, me alegro que estés bien—dijo Tania sonriendo—eres un niño muy fuerte.
—Gracias doñita, la verdad es que lamento mucho todo esto, espero que todos se recuperen.
—Si, ya Josh están por darle el alta como a ti, y Kika y Angie despertaron, solo faltan Ana Ju y Lili.
—Espero que despierten pronto, sabe que me subí a ese auto porque algo me dijo que debía protegerlos, espero que en serio se sanen.
—Gracias Benjamín, cuando vuelvan no los vayas a dejar solos, les agradas muchos, todos preguntan cómo estás.
—Pues a mi también me agradan, y espero que sigamos siendo amigos.
—Se que así será.
—Bueno, chao, y pediré mucho para que sus hijos y sobrinas estén bien muy prontito.
Ellos se despidieron y se fueron.
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Por una parte Josefa y Ramsés habían estado hablando en el cuarto donde Kika y Angie estaban, la última dormida, pero no se percataron de que Kika oyó lo que dijeron. Era que Ana Julia y Liliana no eran hijas de Camila y Calixto, y que Angie no era hija de Alexander.
Mientras eso, en terapia intensiva Gael y Camila hablaban cuando ambas hermanas despertaron poco poco.
—Mis amores—dijo Camila, Gael se acercó a Lili y Camila estaba con Ana Ju—.
—Lili, Ana Ju—dijo Gael con una sonrisa—.
—Que felicidad que por fin abrieron sus ojitos—ellas los miraban—¿escucharon algo de lo que hablábamos? No quiero que tengan que preocuparse por nuestras pláticas—ellas negaron—.
—Estábamos muy preocupados, nos dieron un gran susto eh—dijo Gael riendo levemente—.
—Su papá Calixto está viendo los trámites del hospital pero se va a poner feliz que despertaste—dijo Camila—.
—Estoy muy mareada—dijo Ana Julia—.
—¿Cómo están los demás? Dano, nuestros primos, Benjamín—dijo Liliana algo alterará cuando se acordó del accidente—.
—Tranquila, tranquila—dijo Gael—Josh ya están por darle el alta, Kika y Angie ya despertaron, y a Benjamín ya le dieron de alta—ella asintió y se recostó tranquila—pero Dano... Dano está en coma.
—No—dijo Ana Ju queriéndose levantar—.
—Tranquila, cálmense, el va a estar bien, se los juro—dijo Gael—quiero darle las gracias por ser tan valientes, gracias por luchar por sus vidas y quedarse con nosotros.
—Si, gracias mis amores, sin ustedes mi vida no tiene sentido—dijo Camila—.
Lili apretó la mano de Gael y le sonrió levemente, este le correspondió.
