Cap. 25

2K 128 11
                                    

Escucho el pequeño canto de las aves, alzo la vista a la pequeña ventana del cuarto de Derek y veo el cielo completamente blanco. Trato de levantarme pero siento el peso de Derek sobre mi espalda, me volteo boca arriba con mucho cuidado y su cabeza se acomoda en mi pecho. Coloco mi mano en su cabello y comienzo a mover mi mano entre su cabello. Siento cuando mueve su brazo tratando de aferrarse más a mi y poco a poco comienza a despertarse. Alza la cabeza y me mira.

-Hola... - saludo
-Hola - habla mientras entrelaza mi mano con la suya - ¿como dormiste?
-sin contar el candente sexo que tuvimos anoche - pienso un momento - si creo que si ¿y tu?
-lo mismo digo - comenta

Se coloca boca arriba a un lado mío mientras yo me coloco sobre el boca abajo y pongo mis manos en su pecho mientras recargo mi barbilla en mi manos y lo miro a los ojos. Escucho cuando suelta el aire en su pulmones y pasa una mano por mi cabello castaño, lo mueve hacia atrás.

-¿quieres hacer algo? - me pregunta
-no, lo se - comento - siento que si me muevo me romperé en mil pedazos

Se ríe ante mi chiste.

-déjame ver algo - me pide

Me quito de encima y me apuesto boca abajo en el colchón mientras Derek se sienta y mira mi espalda. Veo algo muy intrigado y después me mira con un rostro sin saber que expresión poner.

-¿te tatuaste el triskel? - me pregunta
-si, digo - carraspeo - tu dijiste que significa estar en balance con uno mismo ¿no?

Asiente mientras no quita sus ojos de los míos.

-pues creo que ninguno de los dos podría estar en balance consigo mismo sin el otro - hablo - es como tú habías dicho, cuando estoy contigo... me siento en balance

Traza el trisquel de mi espalda con sus dedos y después posa toda su mano sobre mi espalda y acaricia cada centímetro de ella. Escucho que suspira.

-bien, hora de levantarse - comenta
-¿que? Pero si acabamos de despertar - comento - y no siento la mitad de mi cuerpo
-estarás bien - habla - iremos por algo de desayunar
-entonces me vestiré en un santiamén - agrego
-¿te importa más la comida que yo? - pregunta
-claro que no - contesto riéndome - es solo que muero de hambre

Temiendo de vestirme y salgo al pasillo, poco después sale Derek y caminamos hacia la puerta de salida al campus. Cuando abro la puerta veo una capa de nieve cubriendo el césped por completo. Alzo la vista y veo los copos de nieve caer. Miro a Derek quien sonríe, de seguro por la expresión de niño de dos años que jamás ha visto la nieve en su vida que se refleja en mi rostro. Baja los escalones y sigo su paso. Cuando llegamos al edificio de habitaciones, entramos y buscamos a Heather por todos lados. Al entrar al comedor la vemos sentada en una mesa con su taza de café.

Derek me da un apretón en el hombro para que vaya hacia donde esta Heather. Me siento frente a ella y me sonríe.

-Hola Stiles - me saluda
-Hola chica - la saludo - Feliz Navidad
-gracias - contesta - ¿durmieron bien?
-si, claro - respondo
-¿pasó algo interesante? - me pregunta
-si te cuento no deberás decirle. Derek que te dije ¿de acuerdo? - comento
-si, te lo prometo - contesta

Tomo aire.

-bien, fuimos a su oficina y bailamos un rato - hablo - después todo cambio de plano y terminamos en su habitación pues ya sabes...
-¿teniendo sexo? - pregunta
-si, pero no solos sexo fue más intenso fue...
-excitante - habla
-¡si! - suspiro - dios, si supieras cuanto lo amo a pesar de que por mi culpa nos echaron de la casa de sus padres

Veo a Derek llegar y me entrega una charola con panqueques, junto con crema batida y fresas. En un costado hay huevo y tocino. Un jugo de naranja y una taza de café caliente. Comienzo a devorar mi desayuno, le doy un trago al jugo de naranja y dejo los cubiertos sobre el plato. Derek toma mi mano mientras Heather sonríe ante nuestra forma de demostrarnos afecto. Finalmente, Heather se levanta. Escucho cuando alguien entra al comedor.

A Forbidden Love®Dove le storie prendono vita. Scoprilo ora