𝘼𝙉𝙂𝙀𝙇 | 🌹🏹
glenn rhee fanfiction
❝Samara Swan era como un ángel o eso le decían sus padres por ser inocente, bondadosa y hermosa❞
El mundo ha cambiado, Sam tendra que cambiar también si quiere vivir. Ha salido de la ciudad con la ayuda de Gle...
Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.
La tarde había caído, Sam estaban en la cocina con Lucy y Sophia, las cuales estaban haciendo pulseras de la amistad con unos hilos de colores que habían encontrado por la casa. Lucy le contaba a su hermana mayor la nunca discusión que había tenido con Carl, Sophia sonreía al ver que las cosas entre ellos dos no habían cambiado. La rubia reía un poco, le causaba mucha risa ver a dos niños pequeños como Carl y Lucy discutir hasta por el color del agua del mar. Samara dejo de reír al ver a Maggie entrar en la cocina despreocupada, la castaño abrió el grifo y lleno un vaso de agua. Le pareció extraño que dejara a Beth sola.
—¿Beth esta sola?—pregunto la Swan mayor.
—No, está con Andrea.
—¡¿Que?!—de pronto escucharon como rompían un cristal—Dios mío, no.
Samara comenzó a rezar en su cabeza, suplicando que Beth no haya sido quién ha roto el cristal. Sam y Maggie salieron corriendo hacia la habitación de Beth, quién no estaba acostada en su cama. Las dos mujeres comenzaron a tocar la puerta de manera desesperada mientras le suplicaban a la rubia que abriera la puerta. Samara le dio una patada a la puerta con todas sus fuerzas, no supo como pero la abrió. Beth estaba dentro del cuarto de baño sujetando su muñeca cubierta de su sangre, la adolescente se disculpó.
—Lo siento…
—Tranquila, Beth—dijeron ambas mujeres acercándose a ella.
—Busca a tu padre rápido—le pidio Samara a Maggie, ella asintió.
—Lo siento, lo siento...
—Beth, cariño, no te preocupes—Sam trato de consolarla—Vas a estar bien.
Mientras Hershel cosia las muñecas de Beth, Samara vio a Maggie salir de la casa probablemente en busca de Andrea. Tanto Maggie como Sam le gritaban a la rubia por haberle incitado a quitarse la vida. Gracias a Dios los cortes no fueron profundos, según Andrea eso significaba que quería vivir. Sam contuvo las ganas de darle un puñetazo en toda la cara pero cada a vez que abría la boca para saltar alguna idiotez le era más difícil. Maggie le prohibió a Andrea entrar en la casa y acercarse a su hermana. Las dos amigas entraron de nuevo a la casa muy molestas.
—¿Beth esta bien?—se giraron al escuchar la voz de Lucy, quién estaba junto a Sophia.
—Estará bien—contesto Sam, no quería contarle a su hermana de once años que Beth había intentado quitarse la vida.
—¿Podemos ir con ella?—pregunto ahora Sophia—Le hicimos una pulsera también.
—Si—respondió Maggie.
Cuando Hershel termino de coser las muñecas de su hija menor, las dos rubias entraron en la habitación con una sonrisa. Tal vez el ánimo alegre de Lucy y Sophia animaría un poco a Beth. La Peletier saco una pulsera morada de su bolsillo y se la dio a la adolescente, ella hizo su mejor intento de sonreí pero solo le salió una mueca. La pulsera de Lucy era de color rosa pastel mientras la de Sophia era de color amarillo pastel. Samara y Maggie se quedaron un par de minutos cerca de la puerta de la habitación de Beth, estaban muy preocupadas por la adolescente.
