Babies

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Al principio se sentían gritos y llantos de los niños, pero luego de unos momentos solo pequeños sollozos apenados y molestos al ser reprendidos por sus actitudes. Tanto T/N como yo habíamos separado a los niños y conversado con ellos de esa forma.

-Minho, ¿ahora qué pasó?- Lo senté en la silla frente a mi luego de haber reprendido a Felix por golpear a Changbin.

-Nada.- Dijo molesto cruzándose de brazos mirando a otro lado.

-Nada no, tú no pelearías con Hyunjin por nada.- Suspiré y froté mi rostro mientras él mantenía la misma postura de antes.- Tienes cinco minutos para decirme qué te hizo pelear de forma tan espantosamente grosera con Hyunjin, sino te quedarás sin los videojuegos.

El niño no realizó ningún movimiento, no era tan fanático de las consolas, quizás porque se aburría rápido al perder.

-Te quitaré tu música, los libros y las clases de danza.- Redoblé el castigo y ahí me miró.

-Bien, te diré. Pero antes deberás prometerme que no me quitarás nada de eso.- Me miró enfadado, a lo que yo solo levanté una ceja y le hice un breve gesto para que prosiguiera.- Hyunjin comenzó a molestarme porque quiere hacer las mismas cosas que yo, quiere tener todas mis cosas, quiere parecerse a mi, incluso comenzó a montar drama porque no le prestaba mi chaqueta favorita. Por eso yo lo golpeé e insulté. Me cansó la situación, ¿por qué tiene que parecerse a mi? Él es él y yo soy yo. Nadie tiene derecho a robarse mi personalidad.

-Tienes razón en eso de que tú eres tú y él es él.- Asentí con la cabeza bajando el tono para que así él también lo hiciese.- Pero no por eso debes golpearlo y gritarle groserías. Tienes que entender que tú eres el ejemplo de ellos, ya te lo he dicho muchas veces. Hyunjin te admira mucho, por eso se comporta intentando imitarte, en lugar de enfadarte podrías ser buen hermano y ayudarle a encontrar su personalidad.

-¡NO ES MI OBLIGACIÓN! ÉL TIENE QUE APRENDER SOLO COMO LO HICE YO.- Comenzó a gritar.- TÚ NO LO ENTIENDES, PORQUE NADIE INTENTA ROBARTE NADA. NO SABES LO QUE SE SIENTE PERDER UNA PARTE DE TI POR CULPA DE OTROS.

Inevitablemente mis ojos se aguaron, si bien no sabía lo que era que otros quisieran ser igual a ti, si comprendía ese sentimiento de perder una parte de mi por culpa de otros, así sentí la perdida de T/N.

-Estas exagerando. Me haces el favor y te vas a tu habitación a reflexionar sobre esto. Yo debo salir a trabajar.- Me puse firme.

-SIEMPRE HUYENDO DE ESTAS COSAS. ERES UN MAL PADRE Y TE ODIO.- Me gritó antes de salir corriendo hacia su habitación y dar un portazo.

Junto con el golpe mi corazón se rompió un poco, creí que lo hacía bien, que le daba seguridad, que habíamos avanzado y él comenzaba a abrirse más sin reaccionar así. Pero esto demostraba que todo quedó solamente en mis creencias. Sin poder contenerlo más me derrumbé llorando, cubrí mi rostro y dejé que las lágrimas cayesen sin control mientras mordía mis labios para no sollozar.

-Cariño...- T/N me puso una mano en la espalda llamando mi atención, rápidamente me aferré a su cintura sin dejar de llorar.

-¿Soy un mal padre?- Pregunté mientras recibía caricias de la chica.

-Claro que no cielo.- Su voz era pausada y llena de comprensión.- A veces los niños se enojan y dicen cosas que no saben como nos van a caer, tu estas algo sensible hoy y esta situación no ayuda en nada.

-Pero Minho está muy enfadado esta vez.- Me sentía indefenso, al estar en esta situacion podía recordar claramente como todos los momentos de enojo y castigo con los niños los tenía que sortear solo antes, y solía encerrarme a llorar abrazando mi almohada. Odiaba tener que ser duro para marcar límites, pero era necesario con los niños para ayudarlos a crecer.