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-¿Que quieren qué?- Miré a los 6 niños allí parados con sus ojitos suplicantes.

-Queremos ver las estrellas esta noche.- Suplicó Felix haciendo pucheros.

-Si eso lo entendí, pero no entendí la otra parte.- Me crucé de brazos y recosté en el sofá.

-Oh, solo queremos asar malvaviscos como en las películas.- Dijo Hyunjin tranquilamente.

-Seria una experiencia muy grata.- T/N los apoyaba desde el otro lado del sofá donde jugaba en el suelo con Jeongin.- ¿Tú que dices pequeño?

-¡Jeoni quiere mavadiscos!- Gritó animado mi bebé.

-¿Ves? Hasta Jeongin quiere, anda papá di que si.- Me volvió a suplicar Minho.

-Bien.- Suspiré y todos, incluida T/N festejaron, a veces parecía una niña más dentro del grupo, cosa que me daba ternura.- Pero hay que ir a comprar las cosas.

-¿No se pueden pedir por delivery?- Preguntó impactado Felix.

-Amor, hasta aquí apenas llega la señal de Internet ¿y tu quieres que llegue un delivery?- Me reí con ternura por su ocurrencia, si ellos supieran que antes uno debía llamar por teléfono de línea a la casa de su amada y arriesgarse a que le atendiera su padre en lugar de la chica, se morirían.

-El delivery tendría que estar en todos lados.- Dijo ofendido Changbin.

-Lamento decepcionarlos, pero su padre tiene razón.- Aportó T/N riendo también.- Antes no había teléfonos celulares, el Internet era mucho más lento y eso dificultaba mucho la comunicación entre todos, era hasta incómodo tener que hablar por teléfono con tus amigos o pareja porque toda tu familia se enteraba de las cosas que decían. Incluso llegábamos a inventarnos códigos para que no nos preguntaran tanto.

-¿Es por eso que no haz podido encontrar a tu amor igual que papá?- Preguntó con inocencia Jisung a lo que yo me sorprendí, ellos sabían más la historia que yo.

¿Será que ella lo estaba buscando a él? ¿Qué tal si un día lo encontraba? Bueno, no sería tan malo, al menos estaría con quien ella amó toda su vida, aunque a mi me haría sentir mal, pero también podría correr el riesgo de perderla como niñera y eso era algo que no podía permitir, aunque suene egoísta, la quiero siempre a mi lado, bueno mio y de los niños.

-De echo no, es porque simplemente dejé de buscarlo.- Sonrió y eso me hizo respirar.

-Pero...- Quizá seguir con el tema Felix y yo lo Interrumpí.

-¿Vamos a comprar las cosas?- Pregunté levantándome del sofá y yendo a tomar las llaves del auto mientras los niños corrían hacia la entrada.- ¿Vienes?- Me giré a ver a T/N que se había quedado sentada en el suelo observando toda la situación.

-Lo siento.- Respondió y asintió con una sonrisa dándome a entender que también saldría con nosotros. Le sonreí y la esperé mientras tomaba en brazos a Jeongin que había corrido a su ritmo junto con sus hermanos.

-Mamos...- Se quejó el pequeño haciéndole gesto con su manito para que se acercara.

-Ya voy pequeño.- Se rió y a paso rápido se acercó para dejarle besos y cosquillas, quedando a su vez muy cerca de mi rostro.

Podía oler su perfume, era tan suave y atrapante que me perdía, su cabello era suave y hacia cosquillas a mi pequeño y a mi que me rozaba un poco el cuello y la mandíbula, su voz tan cerca de mi hablándole de forma tierna al infante hizo que mi corazón se acelerase. Realmente tenía que aclararme, debia ser sincero conmigo mismo de una vez.

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-¿Y si llevamos galletitas y también chocolate y mezclamos todo?- Preguntó Jisung emocionado observando las galletitas del estante mientras sus otros hermanos estaban distribuidos por ahí.

BabiesWhere stories live. Discover now