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Un brazo rodeando mi cintura fue lo que me despertó. No sabía en qué momento me había girado y soltado la mano de mi niño, lo que si sabía es que él ya no estaba en la cama, con pesadez abrí los ojos, encontrándome con el cuerpo de T/N completamente pegado al mío. Sus piernas enredadas con las mías, uno de sus brazos en mi cintura mientras que el otro estaba flexionado debajo de la almohada. Se veía tan linda dormida que me daba pena despertarla.

Moví mi mano delineando el contorno de su rostro con suavidad, apartando algún que otro mechón rebelde que se cruzaba en mi camino.

-Me haces cosquillas.- Dijo aún con los ojos cerrados.

-¿No que estabas dormida?- Pregunté riendo y bajando mis manos a su cuello.

-Hasta que comenzaste las caricias lo estaba.- Sonrió ampliamente y tembló cuando pasé mi mano hacia su nuca, abriendo muy grande los ojos.

-Buenos días.- Dije y la acerqué a mi para dejar un pequeño beso en su frente.

-Buenos días.- Me sonrió y se sonrojó.

-¡PAPÁ! ¡MINHO ME QUITÓ MIS ZAPATOS PREFERIDOS Y NO ME LOS QUIERE DEV...!- Hyunjin irrumpió en el recinto y se quedó estático al vernos, nosotros también lo hicimos y solo giramos el rostro para mirar hacia la puerta, donde segundos después apareció Minho gritando.

-¡ES MENTIRA, ESTOS SON MIS ZAPATOS, LOS TUYOS TIENEN ROJO EN LA PUNTA, LOS MIOS AZUL Y ADEM...!- También se quedó mirando.

-¡PASENLE SEGURO SI VAN A HACER ESAS COSAS!- Dramatizó Hyunjin.

-No estamos haciendo nada.- Nos defendí y los dos nos levantamos de golpe de la cama a la vez que los niños se tapaban los ojos por precaución.

-¡PAPÁ!- Gritó Minho.

-¡T/N!- Lo acompaño Hyunjin.

-¿Pueden dejar de gritar de una vez?- Les pregunté molesto.- Estamos vestidos, no se que les pasó por la cabeza, pero nada ocurrió, calmens3 los dos.

-No es cierto, anoche los vi besándose en la cocina.- Replicó Jisung que había llegado corriendo junto con sus hermanos y mi tío al escuchar los gritos de los menores.

T/N y yo intercambiamos una mirada y suspiramos, no podíamos negarles la verdad a los niños, aunque Ji no había alcanzado a presenciar el beso real, tenía razón.

-Niños, a veces los adultos se quieren mucho y se lo demuestran con besos.- Comencé y T/N me golpeó el hombro.

-Los vas a confundir.- Me reprendió y yo me sonrojé.- Lo que ocurre niños, es que su papá y yo nos gustamos y quisiera tener el permiso de ustedes para poder...

-¡Se nuestra mamá!- Gritó abalanzandose Jisung.

-¿No nos dejarás nunca?- Changbin corrió emocionado hacia ella y con los ojos llenos de lagrimas.

-¿Significa que podremos tener una familia normal?- Preguntó Minho con cierta ilusión y nostalgia en la voz.

-Ya no seremos los ramitos del colegio.- Festejó Hyunjin bailando.

-Tendrás que prepararte para mucho más cariño entonces.- Le dijo Felix antes de saltar a sus brazos.

El único que no se acercaba a ellos era Seungmin, quien por alguna razón nos miraba desde la puerta todavía. Con calma me acerqué a él y me arrodillé a su lado.

-Hijo...- Le llamé y antes de que pudiese decir nada me abrazó.

-Cuídala papá, lo necesita.- Eso me extrañó todavía más.- No la dejes ir por nada del mundo.

-No lo haré hijo, aunque es muy pronto para prometerlo, haré todo para que eso no ocurra, pase lo que pase.- Palmeé su espalda con cariño y besé su mejilla.

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-¿Ya puedo llamarte mami?

Era la tercera vez en este día que le preguntaba lo mismo a T/N, habíamos comenzado a salir juntos hacia apenas un mes, los niños estaban felices por eso, pero su ansiedad por decirle de esa manera a T/N me preocupaba. Sabía que esa figura materna les había faltado durante las etapas más importantes de su vida, pero sentía que quizás así podrían asustarla y ella se alejaría de nosotros.

Le había pedido que no se guardará nada, que todo lo que le preocupase, molestase o incomodase me lo contara, ya que era consciente de lo cerrada que ella podía llegar a ser con sus cosas.

-Ji, me parece que deberías dejar de preguntar eso.- Le dije observándolo por el retrovisor, íbamos de camino a la empresa, ya que tenia una presentación de un disco y la banda que lo lanzaba era la favorita de mis hijos.

-¿Por qué?- Preguntó para mí sorpresa T/N. Pero la pregunta no iba dirigida a mi, sino a mi hijo que la miró confundido.

-¿Por qué que?- Preguntó Minho también de la misma forma que su hermano.

-¿Por qué insisten tanto en llamarme mamá?- Volvió a cuestionar y no supe identificar sus emociones.

-Pues, estas saliendo con papá, eso significa que eres nuestra mamá.- Soltó con inocencia Jisung, a la vez que Felix le daba un golpe en la nuca y cuando lo iba a reprender este hablo hacia su mellizo.

-Tonto, esa no es razón para que ella sea nuestra mamá, si fuera así la secretaria Junha hubiese sido nuestra mamá el tiempo que salió con papá.

-Felix tiene razón.- Acotó T/N observando la situación con diversión notoria.

-Yo creo que podemos llamarte mamá porque nos cuidas como una desde antes de salir con papá.- Pensó Changbin.- Nos enseñaste a ser ordenados, nos cocinas nuestras comidas favoritas, nos ayudas a vestir o con las tareas...

-También nos cantas y juegas con nosotros.- Aportó Jisung.

-Y nos llevas a cada práctica que tengamos, además de recogernos de la escuela.- Continuó Minho.

-También cuidas de nosotros si estamos enfermos.- Felix le sonrió.

-Nos quieres y nos tienes paciencia.- Comentó Hyunjin mirando por la ventana.

-Y cuidas a papá como lo haría una mamá.- Finalizó el punteo Seungmin.

A este punto ya habíamos llegado a la empresa y los niños bajado de la camioneta al igual que nosotros. Estábamos todos de pie en el estacionamiento subterráneo esperando la respuesta de T/N que sostenía su bolso y el bolso maternal de Jeongin mientras yo cargaba al niño.

-Esas si son buenas razones.- La sentí hablar y luego un sollozo se escapó de sus labios, cosa que nos alertó a todos y enseguida nos pusimos más cerca para abrazarla.

-¿Qué ocurre T/N?- Pregunté con cariño sobando su espalda.

-Me emociona mucho tener una familia.- Dijo y levantó el rostro para sonreirnos entre lágrimas.

Yo me aproximé más y dejé un beso en su mejilla, cuando me fui a separar, Jeongin se prendió del cuello de la muchacha y la abrazó.

-Mami...- Le dijo haciéndola reír y asintiendo hacia todos los niños.

-¡Tenemos mamá!- Gritaron con emoción los tres mayores.

-Ahora debes elegir un nombre cariñoso para decirle tu papá.- Me reprendió Felix con la mirada.

-Ya lo pensaré cariño.- Le revolvi su cabellera rubia.- Vamos que están esperando por nosotros.

Los niños salieron corriendo hacia el ascensor y yo saqué un pañuelo de tela de mi bolsillo, con cuidado sequé las lágrimas de la castaña y le sonreí.

-Gracias.- Le di un pequeño beso en los labios y tomé su mano para dirigirnos al ascensor.

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