Maestro Shinobi Academia [TRADUCIDA]

Hanzo Arc: Capítulo 3: Reunión efímera

"Bien, veamos, tengo la carne, el arroz, el caldo, ¿qué queda? Brotes de soja eh, de acuerdo". Hablé conmigo mismo. Han pasado unos días desde que tuve mi pelea con Katsuragi y me convertí en estudiante de la Academia Nacional Hanzo. Hoy era un día libre, así que mi madre dijo que haría Katsudon, mi favorito, como felicitación por haber entrado en Hanzo. "Hace tiempo que no veo a Kacchan, me pregunto qué estará haciendo". Pregunté mientras caminaba por el distrito comercial.

"¡Eh, Izuku!" Oí una voz. Me giré y vi que era Asuka, acompañada de Ikaruga. Los saludé con la mano: "Hola, chicos". hablé mientras se acercaban a mí. Asuka se puso directamente en mi cara. "¿Qué te traes entre manos?" Me preguntó. ¿Por qué tiene que estar tan cerca? "W... Bueno, yo estaba aquí recogiendo algunas cosas para mi mamá ya que iba a hacer Katsudon esta noche". Le expliqué. "Bueno, entonces, podríamos ayudarte a conseguir lo que queda". Ofreció Ikaruga. "Oh, bueno solo me queda una cosa por conseguir y habré terminado pero, aunque la compañía estaría bien". Respondí y todos comenzamos a caminar de nuevo.

"Por cierto Izuku, ¿qué te hizo querer ser Shinobi?". Me preguntó Asuka. No puedo contarles sobre One for All, de lo contrario, eso los llevaría a saber sobre los Yoma. "Bueno, cuando estaba en la escuela media, fui atacada por unos matones, estaba asustada y sola, no sabía que hacer pero, entonces como un ángel guardián alguien llegó y los derribó. Ese hombre era mi Maestro Shota Aizawa, me dijo que era un Shinobi y accedió a entrenarme para luchar, de eso hace ya dos años y soy mucho más fuerte de lo que era entonces." Les mentí. "Vaya, parece que realmente te salvó la vida dos veces". Ikaruga declaró: "Sí, lo hizo, y le estoy muy agradecido, realmente le debo mucho pero, no tengo ni idea de dónde está ahora mismo".

Mientras continuábamos se escuchaba un evidente gruñido, provenía del estómago de Asuka. "¿Tienes hambre?" Pregunté. "Sí, no desayuné esta mañana". Contestó ella. "Ikaruga, ¿y tú?". Le pregunté y ella asintió con la cabeza. "Está bien, yo también tengo hambre, así que, ¿qué tal si los tres comemos algo?" le ofrecí. Asuka se animó: "Tengo una idea, seguidme". Empezó a guiarnos por el barrio hasta que llegamos a una pequeña tienda de sushi vacía. "¡Abuelo, he venido a comer!". Asuka gritó en la tienda. Un anciano alto salió de la trastienda con una sonrisa en la cara al ver a su nieta.

Un anciano alto apareció por detrás con una sonrisa en la cara al ver a su nieta.

"¡Asuka!" Gritó mientras los dos se abrazaban. Yo no podía formar palabras ya que estaba asombrada de este hombre. "Tú, tú eres Hanzo, el legendario Shinobi que da nombre a la Academia Nacional Hanzo, ¿verdad?". Pregunté. "Así es mi niño, tú debes ser el pequeño pupilo de Shota". Contestó. "¿Conoces a mi Maestro?" "No demasiado personalmente pero, trabajé con él varias veces antes de retirarme". Me explicó. Me incliné ante él, "S...Señor es un honor conocerle, he oído hablar mucho de usted por mi maestro y otros Shinobi que he conocido". Se rió y se acercó a mí. "Levántate chico, esta es mi tienda después de todo, fui un shinobi una vez pero, ahora soy el amo de mi tienda de sushi". Me dijo mientras se ponía detrás del mostrador. "Entonces, que será, me has puesto de buen humor así que invita la casa". Me dijo. "Señor, no necesita hacer eso". "Tonterías, es lo menos que puedo hacer por una admiradora, compañera de clase de mis nietas, y la novena que ha recorrido un buen trecho". Habló. Sabe lo de One for All. Como si pudiera oír mis pensamientos, asintió a mi expresión y me senté.

"Entonces, ¿qué será?" Preguntó. "Uh, puede elegir señor, no soy muy exigente". Respondí. "Tomaré mis rollos Futomaki de siempre". Asuka declaró, "Tomaré lo mismo". Añadió Ikaruga mientras preparaba la comida rápido como un rayo. "Disfrutad", dijo mientras todos hablábamos, "¡Gracias por la comida!". Cuando me comí el primer trozo del plato que me dio, me di cuenta de que, aunque estaba hecho rápidamente, había mucha precisión. El rollo de atún estaba preparado a la perfección, dentro había semillas de pimienta que le daban un toque picante y la cobertura de mayonesa del rollo le daba un toque dulce para que las semillas no fueran demasiado pesadas. "¡Es increíble, señor! Podría comerlo todos los días". exclamé y seguí comiendo. "Me alegra oírlo chico". Contestó

Fue entonces cuando escucharía una voz que no sabía si volvería a oír. "¿Qué demonios importa el precio de los brotes de soja?" Gritó una voz masculina. La reconocí, tanto que dejé caer el trozo de sushi que tenía y se desplomó sobre el plato. "Izuku ¿qué pasa?" preguntó Ikaruga mientras saltaba de mi asiento y salía corriendo de la tienda. "Es que nunca es bueno que suba Katsuki". Dijo una chica con el pelo rubio que le caía hasta la cintura, llevaba un uniforme escolar negro y rojo. Junto a ella había un chico alto de pelo rubio ceniza que llevaba un uniforme similar pero con pantalones en vez de falda. "Aunque sólo son diez zeni más". Reconocí esa voz en efecto, esa cara, esa forma de hablar, era él. "¡Kacchan!" grité. Pareció congelarse entonces y se giró lentamente para mirarme.

Nos miramos a los ojos y todo se detuvo en ese momento.

Nos miramos a los ojos y todo se detuvo en ese momento. Era él. "D...Deku." Habló. "Hm, Katsuki ¿lo conoces?" Preguntó la chica. Asuka e Ikaruga salieron corriendo de la tienda detrás de mí. "Izuku ¿qué pasa?" Preguntó Asuka mientras miraba hacia donde yo estaba. "¿Quiénes son?" Preguntó. "Kacchan." Volví a hablar mientras parecía enfadado, agarraba la mano de la chica y salía corriendo. "¡Kacchan!" Grité y salí tras él. Corrí por todo el distrito sin perder de vista a ninguno de los dos. "¡Kacchan espera, soy yo Deku!" Grité pero, fue inútil. Sin darme cuenta activé One for All y usé mi velocidad mejorada para alcanzarle. Me acerqué y él usó la tapa de un cubo de basura cercano para apartarme de un manotazo. Me levanté y los vi correr por un callejón. "Es un callejón sin salida". Hablé y corrí hacia abajo. Oí una explosión en el callejón. Cuando el humo se disipó, Kacchan había desaparecido y la chica también. No quedaba ni rastro de ninguno de los dos. Caí de rodillas, sin aliento y en estado de shock. "K... Kacchan".

Mientras estaba allí sentado, Asuka e Ikaruga por fin me alcanzaron. "Izuku, ¿qué fue eso? ¿Quiénes eran?" Me preguntó. "Alguien que tiene todo el derecho a odiarme". Respondí mientras me levantaba y volvía a la tienda a por mis cosas. Kacchan, ¿adónde has ido?