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Agustin silba cuando sale del baño, recorriendo apreciativamente su cuerpo vestido con traje. "Te ves muy bien, Ginocchio," dice.

Marcos jala las solapas de su cuello fingiendo indiferencia, sonriendo de lado. "Gracias."

Poniendo los ojos en blanco, Agustin resopla. Mira a Marcos críticamente antes de acercarse y jalar su corbata para aflojarla un poco. Luego desabrocha los primeros botones de su camisa, dejando asomar su tatuaje de golondrinas. "Así está mejor," dice satisfecho.

Grita cuando Marcos golpea su culo. "Guárdalo para el vídeo, idiota," se queja.

"Aún estoy preocupado sobre las consecuencias de esto," dice Marcos frunciendo el ceño. "En serio no quiero ir a la tintorería por semen en el saco de mi traje."

"Ya te dije... podemos limpiarlo nosotros con el detergente correcto," dice Agustin, poniendo los ojos en blanco porque Marcos ha dicho lo mismo varias veces desde que sugirió la idea para el vídeo. "Le pondremos mucho detergente y estará bien."

"Tú lo llevarás a la tintorería si no funciona," dice Marcos, sacudiendo la cabeza.

"Lo que sea," murmura Agustin. "Ahora apúrate."

Esta vez Marcos acomoda la cámara mientras Marcos arrastra uno de los sillones desde la sala hasta una pared vacía para tener un buen fondo. Prueban algunos ángulos e iluminaciones por unos minutos antes de elegir la mejor toma.

Luego Marcos presiona "grabar" y entran en sus roles.

Se voltea y Agustin choca contra él, sus piernas entrelazándose mientras sus labios se conectan. Marcos chupa el labio inferior de Agustin dentro de su boca, saboreando el sabor a miel. De hecho, vio a Agustín poniéndose el exfoliante esta mañana y esta vez ha esperado todo el día para probarlo.

Ha pasado casi una semana desde que grabaron un vídeo así que harán dos hoy para compensarlo. Marcos no esperaba sentir una gran pérdida cuando estuvieron algunos días sin grabar, pero por alguna razón la sintió.

Y cuando despertó esta mañana, su primer pensamiento es que iban a grabar hoy y se sintió genuinamente emocionado.

Razona que es porque el sexo es bueno, pero aún es raro. No se supone que deba depender de esta rutina, no se supone que sea una rutina para nada, en primer lugar. Pero inconscientemente, ha estado dependiendo de ella, dependiendo de Agustin para su satisfacción sexual y dopamina. Si piensa con detenimiento sobre eso, se empieza a poner raro así que no lo hace.

Solo besa a Agustin más duro, yéndose hacia atrás hasta que la parte trasera de sus rodillas chocan con el sillón y se sienta estirando las piernas con arrogancia. Agustín gatea hacia su regazo, asentando su culo sobre su ya un poco endurecida erección y deslizando sus dedos sobre el cuero cabelludo de Marcos.

Marcos arrastra sus manos hacia su espalda bajo la tela, acariciando la cálida piel y sintiendo a Agustin estremecerse con el toque. Solo está vestido con una camiseta delgada y shorts de dormir, un gran contraste a la vestimenta formal de Marcos. Pero, hey, aparentemente a las personas les gusta esa disparidad y Marcos no puede mentir y decir que no le excita un poco.

Se nota aún más cuando Marcos lleva sus manos culo de Agustin tocándolo perezosamente. Eventualmente las desliza debajo de sus shorts para apretar sus nalgas. Agustín se estremece, con sus labios abriéndose en un jadeo que Marcos traga ansiosamente.

Se besan por un rato más hasta que Marcos se impacienta por el cálido cuerpo removiéndose directamente encima de su polla. Baja los shorts de Agustin y este lo ayuda a quitárselos junto con las bragas blancas de algodón que decidieron que añadirían un buen toque al vídeo ( Agustin lo sugirió y Marcos definitivamente no se estaba quejando), su camiseta las siguió un poco después. Ahora Marcos queda completamente vestido con Agustin desnudo en su regazo.

MIEL ; MARGUS Where stories live. Discover now