Five Nights At Freddy's: La Historia Completa.

Capítulo 7: Reencuentro.

"Sé amable con la gente en tu ascenso, pues lo más probable es que te los encuentres en la bajada".

- Jimmy Durante.

Desde aquel fatídico suceso que cobró la vida de Elizabeth, la sombra de la paranoia se apoderó de mí. Mi obsesión por proteger a Evan, mi hijo más pequeño, crecía con cada día que pasaba. No podía permitir que se acercara demasiado a los animatrónicos, su fascinación por ellos era innegable.

El estrés me carcomía, no podía parar de pensar en como traer a Elizabeth de vuelta, como proteger a Evan y como lidiar con la policía. Estaba sumergido en mis investigaciones sobre el remanente cuando el teléfono de casa comenzó a sonar. Me levanté de mi escritorio y me dirigí rápidamente hacia el salón para contestar la llamada. Tomé el auricular y escuché la voz de Henry al otro lado de la línea.

—William, soy Henry. Necesito hablar contigo —dijo Henry con un tono de arrepentimiento en su voz.

Un escalofrío recorrió mi espalda al escuchar su nombre. No había tenido contacto con Henry desde el incidente con Fazbear Entertaiment, y sus palabras me tomaron por sorpresa. Aunque sentía desconfianza hacia él, también existía una parte de mí que anhelaba respuestas y cerrar ese capítulo oscuro de mi vida.

—¿Qué deseas, Henry? —respondí, tratando de mantener la cautela.

—Lamento profundamente lo que ha sucedido con Elizabeth. No fue mi intención causar tanto dolor en el pasado. Me gustaría encontrarme contigo en persona para discutirlo y hacer las paces —expresó Henry con sinceridad.

Sus palabras resonaron en mi mente. Por un lado, el resentimiento y la desconfianza me advertían que no confiara en él. Pero por otro lado, sentía la necesidad de obtener respuestas y encontrar algún tipo de cierre en esta historia.

—¿Por qué debería? Ya no eres nada para mí, nuestra asociación dejó de existir hace tiempo.

—Lo sé, y de verdad lamento todo lo sucedido. Sé que no puedes confiar en mí y no te pido que lo hagas ni estoy pidiendo un comienzo de cero, pero si te pido que al menos hagamos las paces y puedas desahogarte un poco.

Pensé en la propuesta de Henry. Mi razón me decía que no tuviera ningún tipo de contacto con él de nuevo, pero mi corazón expresaba cansancio, y en el fondo sabía que me vendría bien desconectar, por mi salud física y mental.

—Está bien, acepto tu propuesta. Sin embargo, no te prometo nada, lo que hiciste es delicado y no podrás redimirte bajo ninguna circunstancia, ¿queda claro?

—Claro, William.

—Perfecto; entonces nos vemos en el bar de JR's a las ocho —dije.

—Bien, ahí estaré.

Corté el teléfono reflexionando sobre si había tomado la decisión correcta. Henry es alguien realmente incompetente a veces y no creo que compartir el mismo espacio sea otra cosa más que perjudicial para mí. Sin embargo, de alguna manera, me convenció.

El bar estaba envuelto en una atmósfera tenue y tranquila cuando Henry y yo nos encontramos. Nos sentamos en una mesa apartada, rodeados por el sonido de conversaciones apagadas y el tintineo de los vasos.

—William, estoy sinceramente arrepentido por todo lo que ha sucedido. No puedo expresar con palabras el dolor que siento por la pérdida de tu hija Elizabeth y las consecuencias que tuvo para tu familia —comenzó Henry, desanimado.

Lo miré fijamente, tratando de encontrar alguna señal de insinceridad en sus ojos. Aunque no podía olvidar lo que había pasado, también comprendía que guardar rencor no me llevaría a ninguna parte.