[23] stay with me

1.5K 242 254
                                    

Hyunjin:

—¿Es lo único que dirás? ¿Ni un "también te extrañé"? —me saco el
barbijo por completo, dejándolo por ahí. Felix cierra la puerta disimuladamente.

—¿Que haces aquí? —pregunta ignorando mis insinuaciones.

—Me prohibieron la entrada al hospital y tuve que entrar camuflado ¿Te gusta? ¿Crees que pueda ser un buen enfermero?–muerdo mi labio inferior mientras le enseño como luzco mi uniforme.

—Déjate de bromas, vamos, quítate eso–pide rodando los ojos y yo finjo sacarme la parte inferior del uniforme.

—No tengo nada abajo ¿Estas seguro?

— ¡N-no! —se exalta enseguida.

—No respondiste mis mensajes -digo acortando la distancia entre nosotros.

Esto de acorralarlo contra la pared se hizo costumbre entre nosotros y debo decir que no termina en algo apto para todo público.

—Mucho trabajo.

—Vamos, Lix. No me mientas —mis manos pasan por su cintura y de un momento a otro lo tengo pegado a mi pecho, agradezco que la tela del uniforme sea fina, puedo sentir los latidos rápidos de su corazón—. ¿Me extrañaste, hum? —susurro cerca de sus labios, esos que muero por probar de nuevo.

—S-si-—dice nervioso y baja la mirada pero lo tomo rápidamente
del mentón.

—¿Por qué no me respondiste entonces? -busco su mirada pero la evita, lo suelto y coloco mis manos a cada lado de su bello rostro.

—Hyunjin... pronuncia como forma de queja o hastiado, no sé qué está pasando por su cabeza entonces las palabras de anoche vuelven a mí—. Es una mierda lo que pasa por mi cabeza ahora mismo y no sé qué estoy haciendo, no sé qué está pasando y tampoco tengo idea
como llegamos a esto.

— Felix, escucha...

—Tengo miedo de mi mismo. De no poder controlar esto— a medida que iba confesandome todo eso sus ojos se llenan de lágrimas y con mis pulgares los seco rápidamente, y lo escucho, porque en sus ojos puedo ver—. Porque... yo te... te quiero mucho.

Por un momento creí que había escuchado mal, parpadeo varias veces y no puedo creer lo que estoy escuchando. Acerco mis labios a los suyos tímidamente, porque no se sabe si Felix puede meterme una patada en los huevos por aprovecharme de la situación,
aunque esto no sería aprovecharme porque desde que lo vi tengo ganas de probar sus labios. Y él
corresponde a mi beso de la forma más dulce que podemos hacerlo, esto es diferente a los besos de
anoche, sin apuros, disfrutando la calidez del otro. Sus labios hacen chasquidos dulces contra los míos y me separo, porque quiero observarlo y chequear que lo que está pasando es real.

—Lo vas a lograr, vencerás tus miedos. Si lo hacemos juntos podremos hacerlo y aunque no parezca también estoy asustado. No llores por favor –sostengo su carita secando las lágrimas restantes—.Además, vine a hacerte el exámen
¿Recuerdas? —bromeo para calmar
un poco el ambiente.

Me da un golpecito y ríe un poco.

—¿Por qué tienes la entrada prohibida al hospital? ¿Qué hiciste ahora? -relame sus labios rojos y mojados por el reciente beso.

—Minho robó una máquina de hacer vapor del piso de arriba.

—¿Sólo Minho?

—Bueno... puede ser que lo ayudé un poco a romper uno de los estantes donde los guardan. Pero fue sólo eso te lo juro no robe nada más.

—¿A quién le robaste el uniforme?

—Lo encontré en uno de los casilleros de los cambiadores ¿Me veo lindo?

i hate himWhere stories live. Discover now