Capítulo 7.

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—Buenos días bebe— dijo.

—Buenos días mamasita— reí bajo y esta levantó su rostro mirándome.

—¿Como estás?—

—De maravilla— sonreí y le di un corto beso —¿Y tu viejita?— reí.

—No soy ninguna vieja— me pellizco un pezon y me quejé riendo.

—Auch— la abrace del cuello dándole un beso en la mejilla —¿Debes irte?—

—En un momento bebé— se levantó y suspire al verla completamente desnuda, es perfecta, es como
una Diosa griega. Entró al baño y yo me quede en la cama pensando, al rato Lauren salió y me levante,
fui al baño para darme una rapida ducha, lavar mis dientes y luego salir a la habitación para vestirme. Me miré al espejo, amo la sensación en mi cuerpo después de buen sexo, mientras arreglaba mi cabello
Lauren me abrazo por detrás dando besos en mi cuello.

—Camz… ¿Piensas salir con alguien más?—

—Lauren tú y yo no somos nada más que amantes— créanme que esas palabras me dolieron más a mi que a ella —Se que esto es como una clase
de contrato, pero estás casada y yo no quiero estar contigo toda mi vida así— suspiré y me di vuelta mirándola fijamente —Perdón pero debo ver la
realidad, tú no dejarás a tu esposa y yo no voy a estar solamente para coger, también quiero una relación seria y eso es algo que tú no me vas a dar— acaricie su mejilla y me miró algo triste.

—Entiendo… está bien— se alejó y tomó su celular —¿Quieres que te lleve?—

—No tranquila, vine en mi auto— la miré y realmente su humor había cambiado.

—Vale, adiós— me miró antes de salir de la habitación y luego se fue, suspiré y tomé mis cosas, salí de la habitación, al bajar a la recepción iba metida de cabeza en mi celular que me tropecé con alguien haciendo que cayéramos al piso —¿Idiota no ves por donde
caminas?— dije molesta y miré a la persona que estaba en el piso limpiando sus rodillas —¿Lauren, no
te habías ido?— se levantó y me tendió la mano para ayudarme.

—Deje mis llaves en la recepción ¿Que paso que vas con tanta prisa?—

—Olvide que debía ir a la oficina—
la miré —Adiós— me apresuré a mi auto, me subí lo encendí y arranqué. Al rato llegué al departamento y al entrar Dinah estaba en el sofá mirando su laptop.

—Esa imbécil no se da cuenta que estoy enamorada de ella— solloce y rápidamente Dinah se levantó para ir hasta mi y abrazarme —Se que ella no
dejará a Verónica… lo que estoy haciendo está mal, pero no creí que mis sentimientos fueran a interferir— acarició mi espalda y nos fuimos al sofá para hablar, luego de un rato mi teléfono empezó a sonar —Es ella— sorbí mi nariz y Dinah tomo mi celular.

—Dejamelo a mi— contestó — ¿Si, diga? Camila está tomando un baño... Claro le avisaré — me entregó el celular y la miré —Lauren viene en camino—

—¿Qué, por qué?— dije nerviosa.

—Quiere hablar contigo, y creo que este es el momento perfecto para que ustedes dos tengan una conversación sobre lo que está pasando— Dinah tenía razón, me levanté y fui a lavarme la cara para luego vestirme con algo más cómodo. Al poco rato tocaron el timbre y fui a abrir, cuando la mire no pude evitar una leve sonrisa.

—Hola guapa— dijo con esa estúpida sonrisa tan malditamente perfecta, me hice a un lado dejándola entrar y nos fuimos a la sala, Dinah se fue y me puse cómoda en el sofá.

—Dinah me dijo que quieres hablar conmigo, ¿Todo bien?— la miré.

—¿Estás enamorada de mi?— soltó de golpe, trague fuerte.

—Lauren... Se que en nuestro acuerdo estaba claramente especificado el tema de no enamorarse... Pero sinceramente no pude evitarlo— miré a otro lado.

—No vine a culparte y mucho menos reclamarte Camz, solo quería que fueras sincera conmigo porque lo pude notar desde hace dias— me miró —¿Por qué no querías decirme?— me alcé de hombros.

—Creí que te molestarías—

—Claro que no me molesta eso Camila... pero siendo ese el caso creo que deberíamos dejar las cosas hasta aquí antes de que se compliquen más— la miré.

—¿Estás de broma?— negó a lo que solté una risa irónica.

—Lauren, lárgate de mi casa — me levanté y esta lo hizo también.

—Camila vamos, hay que hablarlo como las adultas que somos— trato de tomar mi mano y le di un manotazo.

—Te dije que te vayas— dije y está suspiró dándose la vuelta, cuando la puerta se cerró me deje caer en el sofá y enseguida el llanto me impacto de una manera inexplicable, sentía un ardor en mi pecho espantoso, la falta de aire poco a poco se hacía presente. En medio de esa crisis llegó Dinah y enseguida se sentó a mi lado tratando de consolarme pero era imposible, quería gritar, quería salir corriendo a la nada.

Más tarde en mi cama ya después de llorar por más de 2 horas estaba mirando el chat con Lauren, me había dejado varios mensajes los cuales ni respondí, sin siquiera pensar en las consecuencias comencé a tomarle capturas a las conversaciones y redacté un correo donde estaban todas las imágenes, videos y demás.

Un pequeño regalo para ti... querida jefa.

Le dí a enviar y bloqueé a Lauren de todas mis redes para luego tratar de dormir.

Te vas a hundir Jauregui.

Al día siguiente iba en camino al trabajo, cuando llegué bajé de mi auto y ví a Lauren quien se acercaba a paso apresurado y con una magnífica cara de orto, sin decir nada me tomó del brazo y me llevo a rastras hasta su auto, me hizo subir y luego lo hizo ella. Encendió el auto y arrancó.

—¿Que mierda fue la que hiciste?— dijo molesta.

—¿Que hice de qué?— la miré.

—Anoche le llegó un correo a Verónica con fotos de nuestras conversaciones y más cosas—

—¿Qué? ¿Y por qué piensas que fui yo?— dije tratando de hacerme la desentendida.

—Oh no lo sé, déjame pensar... ¿Tal vez por el hecho de que ayer mismo te dije que debíamos dejar todo?— dijo y reí —¿Que es tan gracioso?—

—Nada, solo me dió gracia y te equivocas Lauren yo no sabía nada de ese correo—

—¿¡Entonces quien mierda le envío esas fotos y videos a mi esposa dónde mi masturbo con su secretaria!?— gritó y golpeó el volante frenando de golpe en un callejón —¿Crees que es una maldita coincidencia?— me miró bastante molesta.

—Perdón— susurré.

—Sé que tú lo hiciste— suspiré —Y que ni se te ocurra volver a esa empresa— pasó una mano por su cabello —Mierda Camila, ¿Que pensabas?—

—Venganza— dije sin más.

—Estas loca, pudimos hablar y preferiste arruinar mi matrimonio de la peor manera—

—Llevas meses engañando a tu esposa, y ella como estúpida pegada a tí como un chicle en un zapato. Hubiera sido peor, créeme—

—No sé qué era lo que querías lograr con eso Camila pero fue sumamente inmaduro. No pensé que podías llegar a ese extremo— encendió el auto y arrancó —Búscate otro trabajo, nadie quiere verte allá— se estacionó frente al edificio ya que mi auto estaba allí y me miró.

—No me llames, no me busques, no quiero saber de tí. Olvida lo que tuvimos— hice comillas con mis dedos —Olvídate de mi Lauren, adiós— me bajé del auto y fuí hasta el mío para subirme e irme. Tomé mi celular y llamé a Dinah poniendo el manos libres.

—¿Que pasa chancho?—

—Dinah acomoda mis cosas, me voy—

Venganza con la Esposa de mi Jefa (Lauren G!P)Where stories live. Discover now