Alba no podía negar como los encantos naturales del cordobés la cautivaron desde el principio. Y Julian no podía evitar todo lo que lo hacía sentir. La vida mediática los conectó pero, ¿Los relacionó?
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"Ella se enamoró primero. Pero él se enamoró m...
- Cuando te conté que me mudaba no pensé que te lo tomarías tan a pecho. - Comentó cerrando con cinta de embalar una de las primeras cajas.
- Estaba de paso. - Bromeó. - Además, tenes muchas cosas. Julian no va a poder bajar todo solo.
Un silencio se formó, alertando a Mauricio. Conocía perfectamente a su ex novia para saber que había dicho algo malo en ese momento.
- ¿Va a venir? - Dijo lento. - ¿No?
Negó con su cabeza intentando no demostrar lo mucho que le dolía. Le conflictuaba lo suficiente la situación para hablarlo con su ex novio.
- ¿Qué pasó?
La pelirroja se negó a hablar. Cambiando de tema abruptamente siguió con su cometido ignorando al castaño vorazmente y sin ni un poco de disimulo. Subió a su cuarto para separar en otra caja todo lo que tenía allí. Ya que si, él tenía razón. Ella de verdad tenía muchas cosas que llevarse.
Mauricio siguió dándole vueltas al asunto lo que restó de la tarde. Apenas su ex novia le comentó su plan de mudanza decidió permanecer en su escala en Buenos Aires un tiempo para ayudarla con aquel pesado proceso. Aunque estaría el jugador de River Plate, a quien ya no le tenía menosprecio ni mucho menos, considero que estar para ella era lo correspondiente.
Llego a su casa al día siguiente con una medialunas para desayunar y seguido a eso comenzaron a empacar. Por aquel departamento también pasaron las amigas de Alba, quienes exigieron explicaciones que Mauricio no tuvo problemas en dar. Realmente estaba arrepentido y sabía que no sería la última vez que debería explicarse. Pero también sabía perfectamente que sus actos lo llevaron a eso y todo el entorno de la modelo merecía todas las respuestas que pidieran.
Entre idas y vueltas, otra vez aquel dúo estaba solo. Se acercaba la hora de la merienda y aún meditaban que comprarían para acompañar los mates que se asomaban. Habían compartido todo aquel día, más conversando que empacando pero al menos intentando hacerlo.
Hasta que el atardecer ya se había instalado, salieron al balcón para descansar un momento. Alba no había vuelto a hablar del tema y Mauricio lo respeto con creces. Más no era ningún boludo y se encargó de buscar en sus redes sociales algún indicio de esta situación.
Pudo hablar con una de las cuentas que más se había dedicado a responder hace meses atrás. Sabiendo al fin del rumor que se había infiltrado en las redes en ese último tiempo. Parte de su terapia fue alejarse del celular y dejar de seguir medios que lo hicieron mal en un pasado. Puesto que no estaba al tanto de la vida mediática de los últimos meses.
Twitter.
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Luego de un largo proceso, hasta comenzaba a resultarle gracioso esa ida y vuelta que se había formado en su twitter. Se reía mucho por lo general con todos los comentario que las ingeniosas fans del jugador cordobés le dejaban a lo largo de esos meses de más calma hasta el día de hoy. Suponía que las redes sociales son un poco así y que, al fin al cabo, debía ser algo con que lidiar y tomarlo a la ligera. Después de todo detrás de la pantalla solo había una persona admirando y defendiendo a quien quería.
