Capítulo 11: Thor y Loki

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Decidí ir a la casa de Michael para darle una sorpresa.
Agarré algunas películas de Marvel; las de Iron Man y Thor.
Pegué al timbre de su puerta y esperé unos segundos para que alguien me abriera.
Quién me abrió la puerta fue Michael.
-¡Traigo pelis! - exclamé, agitando las carátulas que llevaba en mis manos.
Michael me miró con el ceño fruncido. Luego dijo:
-¿Está es tu venganza por hacerte ver la mayoría de películas de Disney?
-Puede ser - me encogí de hombros.
-Pues espero que sean buenas - se apartó para que yo pudiera entrar.
Entré.
Michael cerró la puerta.
La casa era más o menos como la mía.
La cocina a la derecha, salón a la izquierda y escaleras en el medio.
Su casa se diferenciaba sólo porque era más ordenada: sin juguetes por los suelos, los cojines del sofá estaban colocados, - en mi casa los cojines desaparecieron hace dos semanas -.
-Esta todo muy...
-¿Ordenado? - terminó la frase. - Si, lo se. En mi casa el orden es primordial.
La verdad es que más de una vez había entrado a la casa de la señora Davies, pero nunca me había fijado en lo ordenado que lo tenía todo.
-Vamos a mi habitación, tengo un DVD allí - dijo.
Subimos las escaleras.
Su habitación estaba al fondo a la derecha.
- Las damas primero - abrió la puerta y me dejó pasar primera. El pasó detras de mí cerrando la puerta.
La habitación de Michael estaba más ordenada que la mía.
Su escritorio estaba ordenado; cada lápiz en su sitio, un montón de libretas en un rincón, una televisión y un DVD.
Su cama estaba hecha, con sábanas blancas, una almohada y dos cojines.
-Esta todo muy ordenado - señalé. - Creo que no te llevaré nunca a mi habitación - murmuré.
-Eso no lo sabes - sonrió.
Lo miré, con el ceño fruncido.
Dejé las carátulas encima de su escritorio.
-¿Que peliculas has traído? - me preguntó.
Agarré una de las películas y respondí.
-Las de Iron Man te encantarán, pero... - agarré otra película -... las de Thor te gustarán más.
-Eso espero - me sonrió. -Sientate en la cama.
Yo asentí y me acerqué a la cama.
Me quite los zapatos y los dejé al lado de los suyos.
Me senté en la cama y vi como Michael agarraba la primera película de Iron Man, sacaba el disco y lo metía en el DVD.
El se dio la vuelta y se sentó a mi lado.
La película empezó.
Mientras veíamos la pelicula, en vez en cuando Michael me preguntaba algunas curiosidades:
-¿No se puede morir por estar tanto tiempo en la cueva?
-Es ficción, además es Iron Man, no se va a morir por no tomar el sol.
O también:
-¿Por qué el guardaespaldas se llama Happy, pero nunca está feliz?
-Si te digo la verdad, no lo se.

.........

Estuvimos todo el día viendo las películas, hasta que las terminamos.
-Y....¿ Que te parecen ? - le pregunté.
El se quedó pensativo por un rato, pero luego respondió:
-Me han gustado, sobre todo la última de Iron Man - opinó.
-¿Y qué opinas de las películas de Thor?
- Me cae muy bien Thor, pero Loki no me calló muy bien, la verdad - su respuesta me ofendió.
- ¿Como puedes decir eso de mi personaje favorito? - le pregunté, ofendida.
-Se gana la vida mintiendo.
-Hace más cosas que mentir - le defendí.
- Pues no lo parece .
Lo miré con los ojos muy abiertos.
Para parecer más ofendida, le di la espalda.
-No te ofendas, solo es mi opinión - dijo con un ligero rentintín.
-Solo es mi opinión - dije, imitando su voz.
Noté que te acercaba a mi.
Puso una mano en mi hombro y me giró, para que lo mirara.
-¿Te acuerdas que hace dos días me preguntastes por cual mote te podría?
Yo asentí.
-Pues ya tengo tu mote.
-Haber, ilumíname.
El se levantó de la cama y se dirigió a su escritorio.
Miró las carátulas que estaban en el escritorio, agarró una y la escondió detrás de su espalda.
El se acerco a mí y se puso delante mía.
Saco la carátula que había agarrado y me la enseño.
-Tu mote será, Thor.

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