Capítulo 18.- Trato

1.3K 241 44
                                    

Al despertar, Jiang Cheng no supo si habían sido las feromonas de Xichen o Wangji las que lograron llenarlo de energía y apaciguar su malestar. Realmente no le importaba, solo agradecía sentirse renovado y optimista de poder llegar a un acuerdo con su esposo.

Así que aprovechando que A-Zhan se encontraba en casa, bajó a la cocina y preparó el desayuno. El alfa seguía entrenando como acostumbraba antes de ir al trabajo, así que cuando A-Cheng lo vio terminar su entrenamiento e intentar ignorarlo para ir a tomar una ducha. Anunció.

—Hice el desayuno. ¿Podríamos hablar antes de que te vayas?

Sabía que esa plática debieron tenerla desde el primer día en que se conocieron, pero en ese momento A-Zhan estaba tan furioso con él que ni siquiera le hubiera dado una oportunidad de hablar. Por lo que ahora que no tenían opción y sería demasiado problemático seguir evitándose por el bien del bebé, creyó que podrían actuar como personas civilizadas.

Wangji secó el sudor que corría por su rostro y A-Cheng hizo un esfuerzo sobre humano para evitar que su omega se deleitara con el fuerte aroma a sándalo que desprendía y no intentara lanzarse a los brazos de ese hermoso alfa que lo miraba con curiosidad.

—Tomare un baño primero. —espetó el Lan antes de subir a su habitación.

Jiang Cheng que no había esperado demasiado, aguardó tranquilamente en lo que A-Zhan se reunía con él. Desayunaron en silencio y cuando Wangji terminó, supo que era hora de poner las cartas sobre la mesa.

—Escucha. Ni tu ni yo deseamos casarnos, fue simplemente un malentendido...—Wangji soltó un resoplido a modo de burla y A-Cheng rodó los ojos antes de continuar.—Sabes qué, si no quieres creer que yo ni siquiera sabía que era tu habitación o que no tenía la maldita intención de condenarme enlazándome con un alfa, está bien.

>>Puedes creer lo que quieras, pero es un hecho que ya estamos casados, estoy encita y tendremos un cachorro. Así que porque no nos ahorramos los dramas e insultos al menos por unos meses.

—¿Qué sugieres?—preguntó Wangji con seriedad e intentando no convencerse de que el omega frente a él estaba siendo honesto. Él era la razón por la que no había podido casarse con Mo Xuanyu y aunque tenía un lindo rostro no podía simplemente dejarse llevar por su vínculo o sus palabras gentiles.

—Llevémonos bien en lo que nace Leilei, ayúdame a continuar el embarazo perfectamente. Prometo no darte problemas y unos meses después de que nazca te daré el divorcio, podrás casarte con tu omega y seguir tu vida como lo tenías planeado.

Wangji estudió sus palabras y al notar que no había mencionado que pasaría con su hijo preguntó.

—¿Y Leilei? ¿Ese es el nombre que elegiste? ¿No piensas dejarme verlo?

—Es su nombre de nacimiento y por supuesto que podrás verlo, si quieres. Eres su padre así que no te prohibiré conocerlo, pero obviamente vivirá conmigo, podremos acordar en el divorcio su custodia compartida y...

—¿Y qué?—preguntó Wangji no creyendo que A-Cheng decidiera salir de su vida tan fácilmente y sin ganar absolutamente nada.— ¿Qué quieres a cambio? ¿Acciones en la compañía Lan? ¿Ayuda para la empresa de tu familia? ¿Qué quieres?

Jiang Cheng sonrió con tristeza antes de declarar.

—Dame una quinta parte de todo lo que tienes, con eso podre cuidar al bebé y no te reclamare la mitad de todos tus bienes.

—Así que sabes que los omegas siempre quieren la mitad de todo ¿Cierto? Supongo que Mo Xuanyu tenía razón al pensar que eras un cazafortunas.—se mofó Wangji viendo como el lindo omega delante de él comenzó a tornar su olor agridulce, clara señal de que estaba enfadado por sus palabras.

𝙱𝚘𝚞𝚗𝚍 𝚝𝚘 𝚢𝚘𝚞 💎Where stories live. Discover now