Nuestro querido escritor esta perdidamente enamorado del mejor detective del mundo, pero no sabe cómo conquistarlo...Pues no importa ¡Él dará su mejor esfuerzo y no se rendirá tan fácil, no sin antes dar la lucha! Porque todo es más difícil cuando t...
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-El tiempo seguía pasando, los chicos se enamoraban cada vez más del otro, no sabían cómo eso era posible, pero...oh, Dios, no se arrepentían ni se molestaban por eso, se amaban tanto.
-Aunque últimamente Poe no actuaba como de costumbre, se le notaba estresado, fatigado, frustrado e incluso enojado...aunque, eso no lo detenía a demostrar amor al menor, cuando estaba con él intentaba que todo lo que le estaba pasando no reluciera tanto, aunque el menor era detective: se daba cuenta, pero había algo importante: No importa cuantos sentimientos negativos como esos lo invadan, nunca se desquitaría con el menor y viceversa.
-Recientemente el trabajo en Guild había estado pesado, literalmente pesado, nunca antes había sido de esa manera, era extraño...sin embargo trabajo es trabajo, y como maestro arquitecto (que es la tercera posición más alta en Guild) debía cumplir con su trabajo...aunque eso requiera llegar un poco más tarde de lo normal a su casa, seguir trabajando en la laptop aún en esta, sentirse estresado, frustrado y cansado, saltarse unas cuantas comidas y no dormir lo necesario.
-Un día más de trabajo en el cual Edgar llegaba cansado, y de paso seguir trabajando en la laptop. Edgar se encontraba en su casa, en el escritorio con la laptop, eran las 20:05 P.M. Su novio se acercó hasta él lentamente.
-Amor, te iba a decir que ya serví la merienda, pero solo preparaste para nuestro hijito y para mí, ¿Acaso no piensas merendar? -Pregunto un preocupado y curioso Rampo.
-Lo siento cariño, pero lo que pasa es que Margaret preparo una merienda para todos. Ya comí en el trabajo y estoy lleno. -Hablo un cansado y nervioso Edgar.
- ¿Me quieres ver la cara de estúpido Allan? -Hablo un Rampo enojado, serio y con sus ojos abiertos.
-No amor, ¿Por qué lo dices? -Pregunto un nervioso Edgar, aunque tratando de ocultarlo.
-Que no se te olvide que soy tu novio y de paso el mejor detective del mundo, me estás mintiendo.
- ¿En qué?
-Margaret no preparo nada, no has comido, tienes hambre: aunque no quieres comer por el puto trabajo, estás estresado, frustrado y cansado, no has comido ni dormido bien desde hace días, tienes sueño, te tomas más de 5 tazas de café aquí y te tomas como 7 más en el trabajo, intentas ocultarme tu cansancio y te levantas en la madrugada a seguir trabajando. ¿Quieres más detalles Allan? -Hablo serio el menor resaltando su nombre.
-B-bueno, puede que tengas un poco de razón, pero-
-Pero nada, me apagas esa laptop ahora mismo, sé que tienes el trabajo más de la mitad avanzado y que tienes 5 días más, de paso te puedo ayudar en eso así que me la apagas ahora antes de que la rompa.
-Okey, Rampo enojado es Rampo enojado, por lo que cerró el programa y apago la laptop lo más rápido posible.
-Eso está mejor, ahora vamos a la cocina, prepararemos algo extra para ti y cenaremos junto a nuestro hijito. -Hablo más calmado el menor.
-Luego de la cena, lavaron los platos y fueron a darse una ducha cada uno por separado, pues aún no se sentían listos como para bañarse juntos. Arreglaron todo y durmieron a su hijito.
-Bueno era hora de dormir, y aunque Edgar quería seguir trabajando, Rampo no lo dejo y lo jalo con él para dormir juntos como solían hacer.
-Luego de unas horas, Edgar se despertó en la madrugada, decidió levantarse lentamente por una taza de café, cuando de repente alguien le agarro de la manga del pijama.
-No no no, ni creas que te vas a parar a tomar una taza de café y seguir trabajando maestro arquitecto.
- ¡¿Rampo?! ¿Qué haces despierto?
-Mi ultra deducción me dijo que esto pasaría... ¡Y no lo voy a permitir no señor!
-Tranquilo amor, estoy bien.
-Para nada estás bien lindo, sé que estás estresado y créeme:
1.-El trabajo va a salir fantástico.
2.- Eres increíble, no necesitas siempre estar esforzándote de esa manera, toma un respiro.
-Edgar sabía en el fondo que su novio tenía razón, estaba demasiado cansado y estresado: necesitaba un descanso.
-Tienes razón cariño. -Edgar se acostó nuevamente en la cama alado de su novio.
-Cariño... -Preguntó el mayor.
- ¿Sí? -Preguntó el menor mientras miraba a su novio, el cual estaba acostado a su lado.
-Rampo se acercó más a su novio y comenzó a darle muchos mimos, jugaba con su cabello, le daba besos y le susurraba dulces palabras en el oído.
-No deberías de esforzarte demasiado Edgar, eres suficiente lindo, te lo prometo.
- ¿D-de verdad?
-De verdad.
-Los novios se abrazaron fuertemente y se acurrucaron lentamente.
-Ahora a dormir Edgar, después puedes trabajar.
-Bueno, pero ¿Y mi beso de buenas noches Rampo? No puedo dormir sin él y lo sabes.
-El menor río tiernamente. -Y tú sabes que yo tampoco puedo, ven aquí.
-El menor acerco el rostro del mayor y le dio un profundo beso, como todas las noches, sin más se abrazaron, se taparon con la cobija y cayeron en los brazos de Morfeo, sin tener ninguna pesadilla ya que no puedes tener pesadillas cuando tienes al amor de tu vida entre tus brazos.
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