Polvo de estrellas || The Mandalorian [Libro I]

35.

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LOS DÍAS QUE siguieron, Elena se centró en sanar y recuperar su condición física, pese a que tuviera que estar en la cama gran parte del día. Din le ayudaba a realizar gestos que ella antes hubiera podido ejecutar sin problemas, como enderezarse, comer y caminar.

Durante aquel período, el Doctor que estaba encargado de atenderla se mostró persistente en cuanto a hacerle preguntas sobre su pasado. Tenía que hacerse una idea de los orígenes de la chica, y las respuestas que le había proporcionado Elena, algunas breves y otras más extensas, le ayudaron a comprender más su situación.

—El cerebro a veces ocultará recuerdos particularmente estresantes, traumáticos o relacionados con el miedo. A largo plazo, los recuerdos reprimidos pueden generar serios problemas de salud emocional.

Evazan, de vez en cuando, le comentaba a Din los progresos que hacía Elena, tanto física como psicológicamente. Aquella tarde, como de costumbre, se había reunido con el mandaloriano en privado para proporcionarle algunas explicaciones e intentar obtener ciertas aclaraciones.

—Guarda un trauma muy profundo, proveniente tanto de su infancia como de su adolescencia, y principios de la edad adulta. El evento que ocurrió hace dos semanas no ayuda en nada, es evidente.

El hombre hizo una pausa y revisó sus anotaciones.

—Ha confirmado haber tenido pensamientos dañinos. ¿Era consciente de ello? ¿Alguna vez le ha hecho parte de tales revelaciones o la ha sorprendido intentando algo?

—No sé nada al respecto —contestó Djarin.

La única vez que había oído decir a Elena que quería morir había sido el día en el que había estado a punto de entregarla de nuevo a aquella secta. Y también, ese día había sido el único donde la había visto intentar quitarse la vida. Pero quizás algo más estaba pasando y él no se había dado cuenta.

—Es de lo más inconveniente. No ha querido dar demasiadas explicaciones. Confiaba en que lo habría hablado con alguien cercano a ella. El trauma no es algo que desaparezca de una noche a la mañana. De hecho, nunca lo hace. La medicina se ve limitada en este aspecto, sobre todo en el ámbito mental. No está dispuesta a dar explicaciones, y forzarla no haría más que agravar la situación.

Din puso toda su atención en lo que le estaba revelando aquel hombre.

—Me parece un trauma renegado, el de su infancia. No quiere hacerle frente. Por ese motivo su cerebro ha bloqueado gran parte de sus recuerdos.

El mandaloriano intentó hacer memoria. Ahora que lo pensaba, no la había visto llorar excesivamente. En algunos momentos sí que Elena había mostrado emociones más fuertes y negativas, pero no tanto como para que fuera preocupante. Din comenzó a cuestionarse a él mismo y la manera en la que cuidaba de Elena.