ִ ۫ 𓍯 ִֶָ 𝐜𝐡𝐮𝐛𝐛𝐲 ⑅ 𝐲𝐨𝐨𝐧𝐦𝐢𝐧 . 𔘓𓂃 ִֶָ

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Yoongi se mordió el labio al leer la primera posición y se sintió avergonzado en demasía. Tanto que tuvo que cubrirse el rostro con el papel en sus manos porque sentía la cara demasiado caliente y probablemente estaba rojo hasta más no poder.

Sabía perfectamente cuál era aquella posición. Anteriormente había tenido solo una novia y aunque lamentaba tanto eso, desgraciadamente no era virgen y él hubiese preferido mantenerse puro para su hermos bebé, pero la adolescencia le había sentado muy mal y lo había convertido en un completo idiota.

Soltó un suspiro algo tembloroso y tragó saliva para poder lubricar su garganta al sentiela seca.

Ya había pasado exactamente una semana desde que fueron a la cita con el nutriologo y SeokJin les había dicho que debían empezar con la dieta lo más pronto posible.

En el transcurso de esa semana, Jimin no había mencionado nada sobre esto y aunque Yoongi era el que tenía el control de la dieta de ejercicio, sabía que su pequeño se encontraba demasiado avergonzado como para tomar la iniciativa.

El calor en sus mejillas no desapareció y fue aumentando mientras imaginaba la situación en su pervertida cabeza.

Debía de admitir que tenía muchas ganas de dar ese enorme paso con Jimin y la marca estaba en sus pensamientos todos los días, pues aquello lo emocionaba y aunque aún era muy temprano, también se había imaginado miles de escenarios donde Jimin se encontraba embarazado.

Conoció al menor en una cafetería donde actualmente su pequeño es el dueño. Recuerda perfectamente cuando lo vió por primera vez y ponía cualquier excusa para ir a verlo mientras le sacaba alguna que otra platica solo para escuchar su hermosa y melodiosa voz.

Park Jimin lo tenía profundamente enamorado y eso sin contar que era su omega predestinado, cosa que no pudo encantarle más. Su bebé era la cosita más linda que había visto nunca, Jimin era de estatura bastante bajita y tenía mejillas abultadas que los hacían ver muy adorable.

Su cabello era rubio y sus labios eran demasiado apetitoso para la salud de Yoongi. Tenía unas curvas que lo hacían ver demasiado sensual y su trasero era tan... ¡Aaah! Yoongi se mordió el labio ante tal pensamiento.

Su omega era perfecto y quería estar con él para siempre, así que ante sus deseos y el querer ayudar a su bebé, se encaminó hasta la habitación en donde este estaba y se alentó así mismo que debía complacerlo de todas las formas posibles. O almenos con la única posición que debían hacer.

Entró a la habitación y escuchó el ruido de la ducha junto a la bonita y suave voz de su hermoso Jiminnie, cantando.

Sonrió inconcientemente y miró la hora en el reloj que estaba sobre la mesita de noche a lado de su cama, dándose cuenta de que ya eran las nueve de la noche y por suerte, el siguiente día era sábado y ambos estarían libres del trabajar.

Se sentó en la cama y mordió su labio con algo de nervios. Estaba feliz y su Alfa se encontraba bastante emocionado.

Llevaba junto a Jimin viviendo un año y medio. Agradecía enormemente que su bebé acepatara irse a vivir juntos en el departamento suyo, él cual era bastante solitario antes de la llegada de su pequeño.

Llevaban poco tiempo juntos, pero el suficiente para que Yoongi supiera y estuviera seguro de que Jimin tenía que ser la persona que envejeciera a su lado. Puede que sea un Alfa algo simple y bastante callado, pero Jimin sacaba lo mejor de él todo el tiempo cuando estaba juntos y eso lo hacía feliz porque su omega lo llenaba de amor y eso era más que suficiente.

Alzó la mirada cuando escuchó que la puerta del cuarto de baño se abrió y su corazón latió rápido al ver semejante belleza en toalla y con el cabello mojado.