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- Well look at that  (Pues mira que tal) - Gruñó con los ojos entrecerrados

El tricolor quitó bruscamente su mano del agarre. Canadá buscó los ojos de su hermano, pero este otro tan solo lo ignoraba, su felicidad había desaparecido y, en su lugar, una ahogante incomodidas y un nerviosismo contagioso se pusieron a la luz del sol.

- OH! I also made some notes about them, wanna see?  (También hice algunas notas sobre ellos ¿Quieres ver?) - Soltó de manera repentina, poniendo una sonrisa falsa para ocultar su molestia y acercándole los papeles que había estado escribiendo

El australiano las ojeó, con cada palabra el pánico en su expresión aumentaba... hasta que llegó al dibujo de los cuatro ninfos... y allí se quedó, paralizado.

- Is there something wrong, Aussi? Did you see something you recognize?  (¿Hay algo malo, Aussi? ¿Viste algo que reconozcas?) - Empezó a atacar con más claridad - That Perú guy, maybe?  (¿Ese tal Perú, quizá?) - Gruñó, en su garganta se trababa la acidez y sus puños temblaban por la fuerza con la que los apretaba

El australiano finalmente levantó la mirada... sus ojos cristalizados acompañaban esa mueca aterrada.

- ... How did you find out?  (¿Cómo lo descubriste?) - Su voz se quebró con dolor

El cuerpo del canadiense se prendió fuego por la molestia, su corazón achicándose al tener que reconocer obligatoriamente la verdad: Su hermano era verdaderamente el culpable.
Él había traicionado a Perú.

- WHY?! Why did you do it?! Do you know the harm you have caused?!  (¡¿POR QUÉ?! ¡¿Por qué lo hiciste?! ¡¿Tienes idea del daño que causaste?!) - Le reclamó, arrancando de sus manos las notas

- How did you find out the nymphus where real?  (¿Cómo supiste que los ninfos eran reales?) - Sollozó, apretando con fuerza esa pulsera de lianas trenzadas

- Probably the same way you did.  (Problablemente de la misma manera que tú.) - Terminó lanzando con fuerza los papeles contra la cama sin importarle la manera en la que se desordenaron

¿Cómo podía importarle nada de eso? Después de lo que descubrió...

- He trusted you!  (¡Él confió en tí!) - Le giró, para después darle la espalda... no podía ni mirarlo a la cara - And you ruined him like it was nothing!  (¡Y tú lo arruinaste como si no fuera nada!) -

- I would never do that!  (¡Nunca haría eso!) - Negó Australia al instante - Perú was... my friend  (Perú era... mi amigo) - Agregó despues de dudar un poco

- Then who?! Argentina saw you, it was your van, YOU did this!  (¿¡Entonces quién!? Argentina te vio, era tú camioneta ¡Tú hiciste esto!) - Volvió a reclamarle, pequeñas lagrims escapando de sus ojos

Esta vez Australia no respondió, de su garganta de liberaron rotos sollozos, con una de sus manos tapandose la cara y la otra en el pecho, controlando su respiración agitada, algo encorbado como si tratara de ocultarse.
Canadá también detuvo su hablar, dejándose olvidar la moral para preocuparse por su hermano. Fue a su lado y lo ayudó a sentarse en la cama, hiperventilando pero tratando de no hacer mucho ruido... ¿Estaba Australia tratando que nadie más lo escuchara?
Estuvo un rato junto a él, acariciandole la espalda y dejando que se desahogara tanto como necesitara, si quería respuestas entonces debía esperar que se calmara.

Cuando se sacó las manos de la cara pudo distinguir esos detalles que demostraban un verdadero dolor: Su rostro hinchado, destrozado y desordenado por la humedad de sus interminables lagrimas y ojos rojizos.
Realmente parecía sufrir por el remordimiento.

Los ninfos (CanArg)Where stories live. Discover now