Lucy Weasley.

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Una encapuchada se levantó y se acercó al escenario lentamente, una vez que Molly se sentó junto a sus padres.

―Buenos días a todos ―saludó educadamente, con una sonrisa.

Se quitó la capucha. Era una chica muy parecida a Molly, pero con el pelo más corto y los ojos más claros.

―Yo soy Lucy Audrey Weasley ―se presentó la chica―. Hermana gemela de Molly.

Audrey besó a Percy ahora con más pasión, haciendo que sus hermanos gemelos silbaran y que el chico se sonrojara, así como Molly Weasley, la matriarca, les reprendiera por molestar a su hermano.

―Bueno, al ser gemelas somos prácticamente idénticas. Tengo dieciocho años, como es obvio, y fui Ravenclaw.

La mesa aplaudió y su familia también.

―Al principio fue un poco raro estar separada de mi hermana porque estábamos acostumbradas a dormir en la misma habitación ―comentó mirando su hermana y sonriendo, sonrisa que fue devuelta―. Pero al final se hizo normal.

―Aun así me echabas de menos ―se rió Molls.

―Fui prefecta y premio anual, pero no jugué al Quidditch ―sus palabras eran de orgullo, pues era una copia de su padre.

Percy sonrió orgulloso.

―Mis notas eran buenas. Mi patronus es un caballo. Me llevo muy bien con mi hermana, pero a menudo discutimos, pero es cosa de gemelas.

―También es cosa de gemelos ―dijeron dos voces masculinas desde la mesa de los encapuchados.

―Y de hermanas mayores ―dijo otro chico.

―Y de hermanos mayores ―protestó una.

―Y hermanas pequeñas ―dijo otro.

―Y hermanos pequeños ―exclamó una chica.

― ¡Bueno! ―exclamó Ann, pegando un grito, pues la estaban exasperando entre todos ellos―. Hermanos en general, ahora sigue Lucy.

La chica sonrió.

―Mis padrinos son tío Charlie y Hermione.

― ¿Yo? ―preguntó la mencionada, sorprendida―. Gracias.

―Ahora trabajo con mi hermana en el Departamento de Aplicación de la Ley Mágica y también estudio derecho, pero en Cambridge, la universidad muggle ―aclaró, para después preguntar―. ¿Preguntas?

― ¿Novio? ―preguntó Audrey.

―Sí ―suspiró la chica, haciendo un ligero movimiento de cabeza―. Papá, no te enfades, por favor.

―Merlín Lucy, dilo ya ―la apresuró su padre, que no podía con tanta intriga ni tanto misterio.

―Mi novio es Theo ―soltó la chica de golpe, pero con una sonrisa de enamorada que la hacía ver como una boba enamorada.

― ¿Tú estás saliendo con mi sobrino? ―bramó Lils con una sonrisa en su rostro―. Que calladito se lo tenía el enano, no había dicho nada ―añadió con una sonrisa pícara, ganándose una mala mirada por parte de su ahijado.

― ¿Qué? ―exclamaron Theodore y Percival, recibiendo miradas asesinas por parte de Daphne y Audrey.

―Bueno. . .yo no tengo ningún problema con los Weasley ―dijo Theo.

―Y los Nott no son maniáticos extremistas de la pureza de sangre ―añadió Percy―. Pero una lágrima, Nott, y te enteras ―amenazó mirando al chico, que asintió nervioso.

La chica Weasley bajó corriendo y besó a su novio, que siguió gustoso al beso, para después irse con su familia.

―Ahora comeremos y luego seguimos ―anunció Dumbledore, haciendo que la comida apareciese en las diferentes mesas del Gran Comedor.

✓ | A través del tiempo.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora