Talvez Mañana Ya Me Quieras.

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                         🌹Millie🌹

Había llegado el día de la cena con los padres de Sadie. ¿Estaba nerviosa? sí.
Ya había cenado antes con sus padres pero ahora que somos novias y que mi familia irá a su casa, entonces la cosa cambia.

Y me da preocupación por Ava, aveces habla demaciado y es muy imperativa.
Mi madre se llevará bien con ellos, estoy segura. Por mi padre, el se molesta si son mal educados o un poco groseros con quién sea, eso lo pone de mal humor y más si es contra los hijos (nosotros o Sadie). Así que encerio espero que hayan cambiado cómo tanto me dice Sadie. Y por parte de Paige yo solo espero que no diga algo que me aga quedar en vergüenza o mal, obviamente no lo aria con mala intención, pero aveces también puede ser una boca suelta.

Ya estaba lista. Tenía puesto un vestido elegante junto con unos tacones. Baje al primer piso y mi familia ya estaba arreglada, mi padre iba de traje y mis hermanas y mi madre igual iban de vestidos elegantes exepto por Acá que tenía uno no elegante. Es una niña, obviamente no querría ponerse algo mas elegante que su amado vestido rosa.

—Bien, hora de irnos— Dijo mi padre y todos hicimos caso.

Salimos de casa y subimos todos al auto. Mi padre arranco y entonces aproveche el momento de silencio para hablar.

—Por favor, por favor no digan algo me deje en vergüenza, que sea personal o algo así. Y Ava ¿puedes retener tus energías y no correr por toda la casa de los Sink?— Millie

—Relajate Millie— Mamá

—Si, relájate Millie. No tienes porque alterarte— Paige

—Puede salir todo mal— Millie

—¿Y eso por qué?— Papá

—Simplemente puede pasar... Solo quiero que salgan las cosas bien y que no termine en ridículo por alguna anécdota vergonzosa que decidan contar o algo así— Millie

—¿Podré jugar en la casa de la princesa roja?— Ava

—No. Te prestaré mi celular si hace falta pero no puedes correr por toda la casa de los Sink por andar jugando y más vale que....— Miller

—Llegamos. Relájate Millie, solo es una cena.— Papá

Bajamos del auto todos y yo fuí quien tocó el timbre ya que todos parecían estar de acuerdo en que yo debía hacerlo. A los segundos Sadie me abrió con una sonrisa para luego abrazarme pero sin besarme, seguro porque mi familia está justo atrás de mi.

—Bienvenidos pasen, están en su casa— Sadie

Yo pasé y con ello entro mi familia. Yo me quedé en el marco de la puerta mientras Sadie también estaba al otro lado del marco de la puerta, mi familia fue a saludar a los padres de Sadie así que yo aproveché para acercarme a besarla. Tome su menton y uni nuestros labios.

—Luces preciosa, te besaría más pero tus padres van a ver— Dijo con una sonrisa tímida.

—Cierto, por hoy tendremos que ahorrarnos algunos besos— Millie

Ella asintió. Luego las dos miramos hacia mis padres y los suyos, quien parecía estar mucho más sonriente que todos era la madre de Sadie, ella si que no solo parecía feliz cómo todos, si no que también emocionada.

—Mi madre está que no cabe de la felicidad... Ya quería conocer a tu familia... Ella realmente se lo está tomando en serio— Sadie

Aquí la pregunta es  ¿tú te lo tomas en serio?.

Porque el cómo se lo tome la señora Sink no me importa tanto al cómo se lo tome Sadie, obviamente. Y justo hoy pensaba decirle ese "te quiero" que ya no puedo guardarme, quiero dejarle en claro que de verdad la quiero y que es todo para mí, no solo un romance adolecente, es más... De verdad yo siento que esto es algo más.