Entre juegos y engaños✔

15. Jaque

Se me quedó mirando de arriba abajo, con una sonrisa y no hacía nada más. Había corrido su brazo libre detrás de su cabeza, para estar cómodo, y eso fue todo.

—Decime todo. —Exigí, pero solo logré que se ría.

Cuando paró, quedó con media sonrisa mientras me miraba fijo y me repetí.

—Decime todo, Eric. —Lo único que logré fue que su sonrisa se pronuncie más, entonces me cansé y le salté encima. —QUIERO SABER TODO.

Volvió a reírse y pasó su mano, por el moño de mi bata, para desatarlo y cuando miré, nos dio la vuelta y quedó arriba de mí.

—¿Vaiana, vos crees que unas esposas de juguete pueden contra un hombre adulto, que cuando va al gimnasio levanta tu peso en cada brazo?

—Lo están haciendo bastante bien.

—Sácamelas antes de que las rompa.

—¿O qué?

—O... solo voy a decir que podría no ser muy gentil. —Dijo mientras pasaba sus dedos por mis labios y me asusté un poco. —Podría hacer todo lo que quisiera con vos... Aunque tal vez no, realmente no quiero hacerte nada malo... —Dijo, pero no sé si para mí, o para él mismo. —Sos hermosa, ¿sabías eso? —Preguntó y suspiró. —Fuiste mi perdición, Vaiana... La perdición de muchos... Sacame esto y te prometo que vas a tener toda la verdad.

—No puedo confiar más en vos.

—Lo vas a hacer, cuándo escuches todo... Pero en serio dejame estar cómodo e ir al baño antes de empezar, porque tenemos para rato.

Lo miré y le hice caso, sí, soy estúpi*da, pero es una persona y no puedo privarlo de sus libertades y de ir al baño. Tampoco soy un monstruo...

—Esa es mi chica. —Dijo y me dio un suave beso en los labios antes de salir de la habitación.

Creí que eso era todo... Podría salir por la puerta si quiere... En bata, pero salir de acá igualmente... pero no lo hizo... Volvió y se sentó a mi lado, como si fuera lo mas normal del mundo.

—¿Por qué no te fuiste? —Pregunté confundida.

—Yo ya jugué mi último movimiento, Vaiana... Me gustaría ver cuál es el tuyo. —Dijo y corrió un mechón de mi pelo detrás de mi oreja.

—¿Y cuál fue tu último movimiento? —Pregunté, pero creo que no estaba preparada, para lo que vino después.

—Cederte a mi reina, para que mates al rey.

—¿Por qué? ¿Cómo?

—Porque perdí. Por primera vez en mi vida, perdí. Tenía una tarea y creí que iba a ser de lo mas fácil del mundo... Pero no tuve en cuenta de la variable mas importante de todas...—Miró sus manos y después miró mis ojos. —Me enamoré de vos, Vaiana... De esos ojos marrones y de esos labios que tengan o no labial siempre están rojos... Caí a tus pies... "He luchado en vano y ya no lo soporto más. Estas últimas semanas han sido un tormento. Vine con la única idea de verla a usted. He luchado contra el sentido común, las expectativas de mi familia y las circunstancias, pero estoy dispuesto a dejarlas a un lado y pedirle que ponga fin a mi agonía. Porque la admiro y la amo, con locura."

¿Cita a Darcy?

—Si, Vaiana, cito a Darcy. —Afirmó con una sonrisa, como si pudiera leer mi mente. —Lo cito porque me di cuenta que es tu libro favorito, porque siempre que vengo acá, está arriba del escritorio, abierto en una frase icónica diferente y porque no hay frase o palabra que se acerque más a como me siento.