𝓛𝒂 𝓝𝒐𝒗𝒊𝒂 𝒅𝒆 𝒎𝒊 𝓜𝒆𝒋𝒐𝒓 𝓐𝒎𝒊𝒈𝒐 // 𝐋𝐈𝐓 𝐊𝐈𝐋𝐋𝐀𝐇

26. "¿Dónde estás, Alicia?" - Parte 1.

Mauro

-¿Quién era, Nadu? -Pregunté sin despegar mi vista de la televisión, al oír a mi novia volver al dormitorio.

-Un repartidor de pizzas confundido. -Sonrió con inocencia.- El pedido era para el piso de al lado.

-Ah, ok. -Respondí.

Ella se acurrucó a mi lado y posó su cabeza en mi pecho, mientras que yo, con una de mis manos, comencé a acariciar su cabello. Mi cuerpo estaba en la cama, pero mi mente viajaba hacia la tarde hoy, hacia el almuerzo con Alicia. Si no la conociera tan bien, diría que estaba celosa; pero no, es imposible, para Ali siempre fui un simple amigo.

El sonido de mi celular me alarmó, y fue cuando me di cuenta que me había quedado dormido. Puta madre. ¿Qué hora es? Tomé el celu para fijarme; las dos de la madrugada... ¿Quién mierda me marca a esta hora?

-¿Sí? -Atendí.

-Mauro. -Escuché un sollozo al otro lado de la línea, a alguien que reconocí perfectamente; la señora Ávila.

-Señora Ávila, ¿qué sucede? ¿Se encuentra bien? -Pregunté.

-Mauro... Alicia... -Murmuró, y mi corazón se detuvo... ¿Qué le había pasado a mi Ali?- ¿Alicia está contigo? -Dijo al fin.

-No... Digo... ¿Por qué debería estar conmigo? -Ya estaba bastante preocupado.

-Oh, Mauro, no la encontramos por ningún lado, se fue de casa al ver a su padre y nosotros no sabemos cómo...

-¿¡Su padre!? -Exclamé sin contenerme.- ... Lo siento.

-No, no te preocupes cariño, yo tengo la culpa... Tuvo que ser chocante para ella verlo aquí como si nada. Sólo quiero saber dónde está, saber que mi niña está bien. -Mi respiración se agitó al imaginarme las miles de situaciones en las que podría estar.- Mauro, ayúdanos, por favor. Pensé que estaría contigo... Y ahora no tengo idea... Ya llamé a Duki, y tampoco sabe nada.

-Tranquila, señora Ávila, le caigo en unos minutos.

-Gracias, Mauro.

Colgué, y me apresuré a pararme de la cama y buscar algún buzo.

-¿Amor? -Me llamó mi novia, con voz somnolienta; lo que me hizo suponer que la desperté al moverme.- ¿A dónde vas?

-A ver a la mamá de una amiga. -Expliqué.- Está preocupada porque no saben nada de ella.

-Seguro que está en algún boliche. -Comentó, sonriendo.

-Esto es serio, Nadia, estamos preocupados.