𝓛𝒂 𝓝𝒐𝒗𝒊𝒂 𝒅𝒆 𝒎𝒊 𝓜𝒆𝒋𝒐𝒓 𝓐𝒎𝒊𝒈𝒐 // 𝐋𝐈𝐓 𝐊𝐈𝐋𝐋𝐀𝐇

8. "¿Él es...?"

Llegué a casa para comer rápidamente, y pedirle a mi madre que me diese permiso para acompañar a Kitty al estudio. No se negó, no sé cómo lo consiguieron tan rápido, pero Duki y Mauro se ganaron a mi madre desde el primer día, claro está, con comentarios como: "Deliciosa comida, señora Ávila", "¿Vos sos la mamá? Si parecen hermanas"; más básicos y no nacen.

Me preparé para ir a ver a Kitty; unos vaqueros, una camiseta de manga larga y unas zapatillas fueron mi elección; sencilla, pero cómoda.

-Volveré más tarde, ¿vale? -Dije hacia mi madre, y ella asintió, sin prestarme mucha atención.- Después iré a cenar con Mauro y los demás.

Alzó su mirada hacia mí entonces, frunciendo el ceño.

-Últimamente estás todo el día por ahí, ¿no? -Respondió.

-Mamá... No empecemos. -Le rogué.

-No llegues tarde. -Fue lo último que dijo.

Asentí frenéticamente, con una sonrisa en el rostro. Tomé una mochila negra y me apresuré a salir; no me demoré mucho en llegar al lugar que me había dicho Kitty, después de haber ido tantas veces allí, me conocía el camino casi de memoria. Además, estaba sorprendentemente próximo a mi casa. Una vez allí busqué a mi amigo en el exterior con la mirada; lo cierto es que fue bastante fácil reconocerlo. Con todos esos tatuajes en la cara y su vestimenta, destacaba fuese donde fuese.

-¡Eh, Kitty! -Exclamé hacia él.

-Al fin llegas, pelotuda. -Me saludó con un beso en la mejilla.- Tenemos que esperar al pibe con el que voy a hacer el featuring.

-¿Un featuring? Joder, qué bien, ¿no?

-Ya supiste. -Sonrió como un niño.- Tomá, haceme una foto acá fuera. Vengo re fachero hoy. -Dijo, tendiéndome su móvil, cuya cámara era mucho mejor que la del mío.

-Vale, por cierto, ¿vais a tardar mucho? -Cuestioné.

-Nah, después te dejo en tu casa, y yo me voy a alistarme para lo de Lit. Luego vuelvo a por vos, y vamos para allá. ¿Bien?

-Y a por Marta... -Avisé, canturreando.

-Sí, ya sé. -Murmuró.

-¿Nervioso?

-¿Por qué lo estaría? Recién la conocí la otra noche, así que tampoco es como si me gustase, a ver, la piba es linda y todo eso, pero ya, sólo me parece guapa y...

-Kitty. -Le interrumpí.- Me refería a la grabación.

-Oh. -Pude percibir un leve sonrojo en él y quise reír, pero preferí contenerme.

-No pasa nada. -Sonreí.- Venga posa, que voy a hacerte la foto.