7:15 || C.V.&TÚ

Capitulo 19.-

— Estábamos tratando de hacerlo más fácil para
ella. – Joel dijo en voz baja, obviamente, estando de
mi lado.

— Bueno, no es mi hijo de todos modos, así que ¿por
qué me importaría? – Zabdiel me miró, sus ojos
comenzaban a llenarse de lágrimas. Esto no era
nada nuevo para mí, Erick había dicho que Zabdiel
no era el padre hacia casi una semana, estaba
esperando el momento adecuado para sacar el
tema, y no había estado cerca por un largo tiempo.

— ¿Qué quieres decir? – Preguntó Joel, al mismo
tiempo que yo hablaba. — ¿Sabes quién es el padre?

Zabdiel negó con la cabeza.

— Ella no me va a decir

— ¿Cómo sabes que no es tuyo? Has tenido sexo con
ella, ¿verdad? – Le pregunté. Nunca cruzó por mi
mente que Maya pudo haber mentido todas las
veces que me habló de ella y Zabdiel durmiendo
juntos, nunca me di cuenta de lo fácil que sería
exagerar sobre algo así.

— Por supuesto que tenemos. No por un tiempo, sin
embargo, la última vez que lo hicimos fue el
comienzo del verano pasado. – Zabdiel habló entre
sus manos, claramente no orgulloso de lo que
estaba diciendo.

— ¿El comienzo del verano pasado? – Joel rió. — Caray, estás aflojando

— ¡No hemos tenido el tiempo o privacidad, Joel! –
Gritó Zabdiel, frustrándose cada vez más con Joel y
probablemente conmigo también.

— Voy a ir a tratar de hablar con Maya. – dije,
lentamente alejándome de la mesa.

— Que se diviertan, ella probablemente va a tratar de
arrancar tu cabeza. – Zabdiel murmuró, poniendo
su cabeza en sus manos otra vez. Joel deslizó su
silla cerca de Zabdiel, tratando de consolarlo un
poco aunque me di cuenta de que no era muy
bueno en ese tipo de cosas.

Me dirigí al baño de chicas que estaba conectado al
lado de la cafetería, pensando que bien podría
comprobar allí primero. Entré, deslizándome
pasando algunos estudiantes de primer año, ya que
siguieron su camino más allá de mí y a través de la
puerta. No tenía idea de lo que tenía que decirle a
Brooke, solo sentía que sería adecuado tratar de
hablar con ella sobre esto.

— ¿Maya? – Le llamé, con la esperanza de que no
hubiera nadie más aquí.

— Vete, Liv. – dijo Maya en voz baja, abriendo la
puerta de la casilla mientras se paraba.

— Sólo quiero hablar. – dije, tendiéndole la mano y
para que la tomara. Ella lo tomó, lo que me
permitió tirar de ella el resto del camino fuera de la
casilla.

Sin gracia me senté en el suelo, invitando a Maya
a unirse a mí. Ella se sentó a mi lado, cruzando los
brazos sobre el pecho. No lloraba como yo hubiera
pensado que iba a ser, en lugar de eso sólo se veía
muy enojada.

— ¿Estás bien? – Le pregunté.

— No, tengo 18 años y estoy embarazada – Maya
resopló. Ella miró hacia el suelo, y yo estaba
tratando de averiguar quién estaba exactamente
enfadada aquí

— ¿Le has dicho a tu madre? – Cuestioné. La mamá
de Maya era bastante estricta, siempre tratando
de mantener a Maya bajo «control» Ella odiaba la
forma en que Maya actuaba, cuando ella dormía
con diferentes chicos que conocía en las fiestas.
Maya y Zabdiel saliendo era probablemente lo
mejor que le había sucedido a ella, porque Zabdiel
puso fin a eso. Sólo podía imaginar lo que ella
pensaría si se enteraba que Maya había
conseguido quedar embarazada, y mucho menos de
alguien que no era Zabdiel.